Biblioteca "El Pony Pisador"

por Umpo Lun Nov 07, 2011 10:01 pm

La biblioteca del mercado. Un lugar excepcional para comprar libros, distraer la mente en un escrito o bien, pasear por las grandes estantes de libros apilados de historia pasada, siglos pasados y de mucha historia combinada. El dia era tranquilo en esa tarde calurosa, ya que pocas personas habían ingresado al lugar con el fin de comprar libros, rentar o leer en una de las mesas alejadas cercanas a una fuente entre varias sillas para tranquilizar la mente. La verdad que era un lugar bastante llamativo y calmo, ya que nadie podía descifrar el verdadero porqué de una biblioteca en medio del mercado en donde gente de la peor calaña paseaba por sus calles vendiendo mujeres y hombres como perros, comprando articulos bizarros, etc.

De igual forma y así, la biblioteca era muy concurrida a excepción de aquel día ya que solo dos hombres y unas cuantas mujeres paseaban de aquí para allá.

Para dar una mayor relajación, una música sonaba entre las paredes; nadie podia adivinar de donde salía aquella melodía tan penetrante, ya que todo ser que penetraba aquel lugar, era instintivamente cautivado por la música tranquilizadora que los obligaba a sentarse y leer lentamente, con mucha paz en sus corazones.

Umpo, el actual conserje de la biblioteca, vestia un traje elegante abotonado azul y celeste; vestía formalmente para atender ese lugar que le dio un puesto importante en Roma, ya que era respetado, o al menos ignorado, por los soldados romanos que comenzaban a destruir lo poco de cordura que quedaba en Roma desde la actual perdida del Cesar.

-Hmmm hoy es un día tranquilo

Dejó escapar en un suspiro mientras se acomodaba los pequeños anteojos sobre sus ojos con el dedo indice.

por Priscos Mar Nov 08, 2011 12:10 am

Después de haber caminado un buen rato sobre las calles del mercado, a pesar de su repulsión de estar rodeado por muchas personas Priscos quería continuar su caminata, quizás encontraría algo interesante en ese lugar, necesitaba algo que leer quizás algunos buenos libros que estudiar, como todo buen hijo de una familia respetable Priscos disfrutaba del aprendizaje, pues de esa forma lo habían educado sus padres.
Caminando por aquellos callejones abarrotados de gente, vio entre un claro algo que no esperaba ver en ese tipo de lugares, era una biblioteca grande, quizás no tan grande como a al que había asistido algunas veces en Alejandría, pero tenía bastantes libros que le imploraban a gritos ser leídos.
Sin pensarlo dos veces Priscos se dirigió rápidamente a la entrada como si fuera un vagabundo que está muy hambriento y encontrara comida. La entrada estaba muy bien adornada y sobre el arco que permanecía sobre la puerta se encontraba su nombre, “El poni pisador”, era un tanto raro pero eso no importaba, era una biblioteca y era un buen lugar para estar y dialogar sobre la filosofía.
Al entrar a aquel hermoso vio que a unos cuantos metros de él se encontraba una persona vestida muy elegantemente y unas cuantas mujeres que se encontraban mirando los libros.
-Disculpe usted buen señor, podría indicarme donde están los libros que hablan de filosofía?-

por Umpo Mar Nov 08, 2011 2:58 pm

-Pasillo derecho, cuarto estante, filosofía variada. Espero que Socrates y Heraclito sean de su interes, señor, ya que tenemos muchas de sus obras.

Umpo sintio un pequeño cosquilleo en su espina dorsal cuando observaba a los ojos de aquel hombre parado enfrente de si. Él estaba sentado en una silla con almohadon y con sus brazos apoyados en la mesa con un par de libros abiertos y una pluma de escritura. Delante de él y parado, se hallaba el hombre interesado en la filosofia.

Aquel cosquilleo no era nada parecido a lo que venia sintiendo en esos dias, cuando las desgarradoras ganas de destrozar a humanos ocupaba su pensar del dia, no... esto era distinto. Era un cruze de miradas milenarias y por alguna razon, se sentia parte de ello pero no dio caso a sus pensamientos. Cerro el libro que estaba leyendo y se retiro los lentes de sus ojos.

-Puedo enseñarle si gusta. Mucha gente se pierde en el andar de esta biblioteca.

Los oscuros ojos de Umpo centellaron por un momento, parecían esconder algo que solo su subconsciente sabia en esos momentos.

por Priscos Mar Nov 08, 2011 4:57 pm

-Se lo agradecería mucho- dijo Priscos como respuesta al ofrecimiento de ayuda de aquel personaje –Tal vez podría usted recomendarme un buen libro- dijo Priscos, -Se nota que usted sabe sobre el tema,……………………. Yo también se algo sobre eso, permítame presentarme, soy Priscos Máximo Decimo Merodeo, hijo de Marcelo y Penélope, unos destacados comerciantes de Ítaca- dijo Mac mientras agachaba ligeramente la cabeza en señal de respeto, -le interesaría debatir con migo sobre filosofía- dijo Priscos rápidamente sin dejar que aquella persona se presentase primero.
Aunque no lo demostrara Priscos estaba emocionado ya que por fin habia encontrado alguien que quizás gustaba de la lectura como el y tal vez también de la filosofía griega que el tanto habia estudiado en su Ítaca natal. De cualquier forma eso era un golpe de suerte, como era posible que un lugar que el casi consideraba como un templo se encontrara en aquel nefasto lugar al que llamaban tianguis y que se encontraba lleno de personas de clase baja que no sabían quizás ni lo que era un libro y estaban corrompidos por la ansiedad de tener lo que nunca tendrían, una buena cabeza que pensara lógicamente como la que tenía él y la que probablemente también tenía el encargado de aquella majestuosa biblioteca lugar para engrandecer el alma y conocimientos.

por Umpo Mar Nov 08, 2011 10:30 pm

-Oh si. Mi libro preferido son las obras de Aristoteles. Estoy seguro que ese libro no le dejara de impresionar.

Mencionó Umpo, levantandose de la silla y saliendo por uno de los costados de su escritorio que era iluminado por una vela blanca.

El conserje de la biblioteca llevo ambos brazos por detras de su espalda y comenzo a caminar lentamente, marcando bien firme su paso y su semblante siempre lineal y regio.

Caminó hasta unos estantes que debían atravesar para llegar al destino.

-Me es raro nunca haberlo visto por aqui. La biblioteca no esta hace poco, ha estado aqui hace mucho tiempo, solo que ahora de verdad tiene a alguien que se preocupa por ella.

El tono de voz de Umpo era altivo y orgulloso, se lo podía descifrar a simple vista con solo una mirada a su indumentario y su porte. Sus ojos estaban cerrados, como si pudiera guiarse mentalmente en aquel lugar; parecía conocer de memoria los pasillos adyacentes a estantes y la posición exacta de los libros, en este caso, de filosofía.

-¿Debatir? Hace mucho que no lo hago, claro esta. Generalmente la gente no habla mucho aquí, solo se sienta y lee un poco para despejar la mente de la vida cotidiana.

Y era cierto, todo posible comprador que ingresaba en aquel lugar automaticamente era hipnotizado por la "energía" de ese lugar, energía la cual Umpo, sin saberlo aún del todo, controlaba.

Chasqueó sus dedos y la luz de los pasillos se hizo más amena, mas baja, dando la sensación de llegar el atardecer.

-La música relaja a los presentes, ¿no los ve a todos contentos, penetrados en su lectura? Aquí nada se altera bajo mi presencia.

Dobló por una esquina de libros y ahora caminaba recto y lentamente por el costado de un estante. Tenía los ojos abiertos en ese momento, examinando los titulos.

-Entonces, señor. ¿Qué libro busca en especifico?

por Priscos Miér Nov 09, 2011 4:34 pm

-La música relaja a los presentes, ¿no los ve a todos contentos, penetrados en su lectura? Aquí nada se altera bajo mi presencia.- Dijo el bibliotecario mientras se dirigía por los pasillos con Priscos detrás del hacia el lugar en el que se encontraba aquella sección tan ansiada por El joven griego, doblaron por una esquina y caminaron recto justo al lado de un estante que se encontraba lleno de libros de diversos temas tan interesantes que hacían sentirse a Priscos como en los jardines elíseos.
-Entonces, señor. ¿Qué libro busca en especifico?- Dijo el bibliotecario a su recién llegado cliente, a lo que Priscos contesto –Sorpréndame, confió en su buen gusto- dijo mientras se preguntaba de donde venia esa música, y quien tendría la paciencia de andarla tocando sin descanso.
El bibliotecario seguía buscando entre el estante un buen libro que fuera de interés para Priscos paseándose de un lado hacia otro y alzando y bajando la mirada para buscar un titulo adecuado.
-De modo que esta biblioteca ya hace tiempo que esta en este lugar,…………………………………….. de haber sabido hubiera venido desde mas antes para poder gozar de una buena lectura- dijo Priscos mientras esperaba su libro.

por Priscos Vie Dic 02, 2011 11:44 pm

Mientras aquel personaje buscaba el libro de agrado que le parecía apropiado para su cliente, priscos no dejaba de pensar en una forma para poder involucrarse con las personas que estaban en el poder, después de todo el pertenecía a una familia muy prestigiosa y eso era mas que suficiente para merecer un buen puesto, no es que renegara del empleo que tenia como consejero espiritual, pero ese empleo casi no le hacia aportaciones monetarias que tanto necesitaba para poder cumplir con sus gastos, además era posible que pronto se buscara una mujer para casarse, ya tenía 25 años y eso era ya una buena edad para sentar cabeza, “Pero quien será la indicada” pensó mientras veía como aquel dueño de la librería buscaba entre la estantería sin tener éxito, “Aun no conozco a muchas personas y las que conozco no son buenas candidatas para el puesto”.
Mientras el bibliotecario seguía buscando Priscos logro divisar en uno de los estantes un pergamino que le llamo la atención, asi que lo tomo y le dijo al bibliotecario que parara su búsqueda, que ya había encontrado lo que deseaba, el pergamino era referente a la interpretación de los sueños en un enfoque filosófico.

por Anhai Sáb Dic 24, 2011 3:15 pm

*Recien habia llegado a roma, sinceramente no conosco mucho por estos lugares asi que camine y camine hasta llegar a la entrada de una gran biblioteca, la entrada de esta era amplia tan asi que daba la impresion de que un ejercito completo podria entrar libremente sin problemas por espacio.
Entre despacio y mis pisadas provocaban un ego suave en todo el lugar como si otra persona tambien estubiese caminando a la par de mis pisadas, esto producia algo de miedo para quien no estubiese acostumbrado a ese sonido, veia a todos lados para observar tantos libros bien acomodados en sus anaqueles que sinceramente no sabia cual de ellos podria leer.
Pero una idea se me vino a la mente, el investigar mas acerca de las diferentes mitologias y tal vez en este lugar tendria las respuestas que buscaba, asi podria entender mejor mi destino como sirena de scyla, aunque no se exactamente como despertar a ese espiritu antiguo y legendario para que los dos luchemos juntos en bienestar del dios de los mares.

por Anhai Mar Dic 27, 2011 6:24 pm

*camine por los pasillos buscando el anaquel adecuado en el que encontraria las respuestas que buscaba o por o menos para asi estar al tanto de una situacion que pudiese sucitarse, entre varios tomos encontre uno de antiguas mitologias, todas sus hojas estaban llenas de sabiduria de ancestros quienes habian vivido y escrito sucesos fantasticos.
Leyendas como la de scyla a pesar de que la conocia bien pues ya me la habian contado anteriormente sonaba extraordinara en la manera en el que estaba escrita en esas paginas.
Una a una venian leyendas del mar inclusive que hablaban del mismo dios de los mares, los minutos pasaban a pesar de que no se sentian, ya era tarde cuando termine de leer aquel libro que me parecio excelente. Quize descansar un poco la vista pues no estaba acostumbrada tanto a la lectura y decidi buscar otro, uno a uno lei los tomos que hablaban de los dioses y sus guerreros, aunque habia uno que parecia no estar completo, de una mitologia extrangera, de unas tierras heladas llamadas Asgard.
-seria buena idea ir para alla e investigar un poco
Pero no conocia nada hacerca de ese lugar, terminando mi lectura me fui de la biblioteca

por Priscos Mar Ene 03, 2012 4:45 pm

Una vez que Priscos llego a la entrada de la majestuosa biblioteca junto con Helena se dispusieron a entrar nuevamente por aquella enorme puerta que estaba formada por un arco de fina piedra muy bien tallada o quizás de hormigón, recordó que el hormigón recientemente había sido descubierto por los romanos después de la desgracia de Pompeya y Herculano, y cuyas cenizas fueron fundamentales para la creación de este, sin duda alguna había sido un precio muy alto a pagar por el descubrimiento de ese enorme bien, pero eso no era lo importante ahora. -Helena- dijo priscos para llamar la atención de su esclava que para ese entonces se encontraba pasando sus manos sobre los estantes con tal gracia que parecía que bailaba buscando un buen libro, -¿Qué es lo que haces?- pregunto Priscos en un tono tan desinteresado que pareciera que hablaba con alguien de la misma clase que el y no con una esclava, -Busco- contesto Helena mientras de uno de los estantes saco un pergamino que Priscos no pudo ver pero que intuyo que era lo que Helena buscaba, -Si encontraste lo que querías marchémonos- dijo priscos a lo que Helena solo asintió, y sin mas ni mas se marcharon de ese lugar.

por Chrystalle Vie Ene 06, 2012 10:18 pm

La caminata a la biblioteca resultó tranquila y un poco larga, Chrystalle divisó las instalaciones que se mostraban a su paso, las calles alborotadas del mercado habían quedado atrás dando lugar a calles transitadas pero con menos gente y el ambiente se mostraba distinto distinto. En el trayecto conoció más a las niñas, la mayor se llamaba Miriam y la menor era Melissa, eran hijas de una pareja de comerciantes y vivían muy cerca de aquel mercado donde se encontraron con Chrystalle.

A su llegada se adentraron en aquel recinto, la estructura exterior era muy bella, la arquitectura usada debía ser pasada dándole un aire antiguo, perfecto para un lugar recopila torio de tanta sabiduría, el interior era aun más reluciente, las paredes blancas resaltaban bastante con la iluminación. Chrystalle siguió a las niñas que caminaban en el pasillo medio que separaba en dos lados y cada lado contaba con los muebles apropiados para una buena lectura.

Se sentaron en una mesa vacía, las niñas sacaron unos cuadernos y empezaron con lo suyo, Chrystalle se levantó en silencio para no incomodar-las y recorrió con la vista la estantería más cercana.

por Priscos Vie Ene 06, 2012 10:38 pm

Después de dejar aquel bello lugar a la orilla del rio Priscos y Helena se dirigieron nuevamente a la biblioteca debido a que era un mejor lugar para pensar en aquel escrito que tanto habia fascinado y atemorizado a la vez a Priscos, era como si fuera algo que el ya conocía una sensación que le ponía los pelos de cada parte de su cuerpo de punta (en el buen sentido de la palabra).
Entro nuevamente por la amplia puerta y se dirigió a una de las mesas que se encontraban en ese lugar, por su parte Helena comenzó a moverse entre los estantes como si quisiera buscar un nuevo pergamino, y efectivamente Helena cogió un nuevo pergamino de aspecto viejo como el anterior, -Helena, Préstame ese pergamino que acabas de tomar-, Priscos estaba ansioso de saber que era lo que ese pergamino tenia y cuando lo abrió se dio cuenta que era un pergamino cualquiera que a Helena le había gustado, “Parece que esta situación me ha dominado casi por completo, debería controlarme un poco mas”

por Chrystalle Vie Ene 06, 2012 11:03 pm

Chrystalle - Melissa

Sus dedos recorrían los libros almacenados por nombres en la estantería, leía en su mente los títulos de cada libro hasta que se detuvo repentinamente. Su mano alcanzo un libro y lo retiro de su lugar de descanso, lo examino detenidamente abriendo el libro y leyendo la primera página, sin dudar tomo el libro y se sentó nuevamente en la mesa ocupada por Miriam y Melissa.

-Encontró algo que leer, señorita Chrystalle- hablo Melissa levantando la vista de su cuaderno, en su rostro tenía una sonrisa de felicidad; Chrystalle se preguntó si siempre sonreía de todo.

-Así es...y no te distraigas si quieres terminar rápido- le mostró sutilmente el libro y lo alejo tan rápido como se lo mostró mientras ella hizo un leve puchero y continuó su trabajo, en cambio Miriam no hizo acción alguna, se notaba que ella era muy concentrada en sus cosas a diferencia de su hermana que se distraía rápidamente. Abrió el libro y comenzó la lectura que tenía planeada ese día.

-Señorita Chrystalle...no entiendo...¿Me podría ayudar?- la voz era de Melissa, levanto la vista de su libro y se fijó en la menor, suspiro levemente y dejo el libro en la mesa acercándose a ella -¿Qué no entiendes?-

-Esta parte- Melissa le mostró y la joven le ayudó no del todo, ya que ella misma debía hacerlo. El tiempo transcurrió rápido mientras ayudaba a la menor pero la mayor tenía sus inquietudes y Chrystalle tuvo que dejar en claro ciertas cosas en las hermanas. Después de eso, ellas debían irse a casa antes de que se hiciera más tarde, ambas se despidieron de Chrystalle amablemente y se marcharon del lugar dejándola sola.

Miro el libro que había dejado sobre la mesa, miro el reloj de la biblioteca y notó que le sería imposible terminar la lectura de aquel libro, se levantó y tomo el libro dejándolo en su lugar en la estantería y así se marchó de la biblioteca, esperando regresar otro día.

por Priscos Vie Ene 06, 2012 11:51 pm

Las cosas iban de mal en peor ya que a Priscos no se le venía nada a la mente y Helena parecía que no ayudaba en nada, solo se la pasaba haciendo sus movimientos y comentarios de niña tonta, el ultimo pergamino que esta le habia entregado por un mínimo momento le habia dado esperanzas y le habia reanimado el ánimo que cada vez le iba decreciendo de seguir buscando una respuesta a esos sueños tan misteriosos que lo habían puesto nervioso.
Estaba a punto de tirar la toalla, quizás ese pequeño pero difícil verso lo habia derrotado de la manera más vil y vergonzosa que el se podía permitir, después de haberse autoproclamado como consejero espiritual que sabia mucho de los sueños, Priscos pensaba que ahora ya sabia lo que habían sentido los etruscos que se autoproclamaban la civilización suprema hasta que los Romanos vinieron les copiaron sus tradiciones y creencias, como la de los gladiadores y después los sacaron a patadas en el trasero.
-Eso es todo-Dijo Priscos mientras se levantaba del banquillo para irse derrotado con el rabo entre las piernas, hasta que Helena lo miro con esa misma mirada tan misteriosa que hizo que Priscos deseara seguir adelante.

por Vice Vie Ene 27, 2012 8:57 pm

Vice no hizo esperar mas para salir a conocer un poco Roma parecía un sitio bastante tranquilo a diferencia de Britania siempre había problemas aunque ella no estaba muy enterada de la situación, así que continuo caminando ha donde la llevara el viento con sus manos entrelazadas y a un paso moderado. Giro su cabeza un poco y vio lo que parecía ser una biblioteca con un nombre un poco exótico “el pony pisador” decidió pasar a buscar algo en especial que la había dejado con intriga hace mucho tiempo y no se encontraba nada sobre el en la biblioteca de Britania así que pensó que quizás podría encontrarlo aquí.

Entro y era bastante amplio por dentro estantes llenos de libros se miraba por doquier, no había mucha gente solo unos cuantos, se adentro y poco mas para buscar un libro de objetos mitológicos un estante estaba lleno de leyendas.. Pero nada de lo que buscaba así paso al menos 1 hora buscando lo que necesitaba sin tener buenos resultados, se sentó en una banca y emitió un suspiro – ya me canse y aun me falta un 65% en el cual buscar, lo mejor será volver otro día mi estadía en roma será larga así que tengo tiempo- se puso de pie y salio de la biblioteca, cuando una voz de una chica le detuvo -¿Busca algo en especial señorita?- Vice giro su cabeza -Asi es pero no se preocupe vendre mas tarde-

por Anily Dom Mayo 06, 2012 1:48 pm

Con un poco de indiferencia Anily ve la entrada de la biblioteca, pero le parecio buena idea entrar a leer un poco para distraer su mente o aclarar algunos pensamientos que tenia en aquellos momentos.
Al parecer los trabajadores del lugar estaban algo ocupados, sin embargo una dama muy amable se presento ante la extraña y le ofrecio ayuda, otorgandole algunos libros que para Anily eran de interes......

por Anily Lun Mayo 07, 2012 11:47 am

Pasando unos minutos de profunda lectura anily decidio comprar algunos libros, fue con una de las secretarias y empezo a decirle cual queria comprar.
Entre los libros se encontraban de mitologias romana, egipcia y nordica.
Otro de los libros se trataba de una novela donde la protagonista era una joven, otra era un libro de misterio.
Terminando de hacer las compras se va del lugar pero algo pasa, a la entrada logra ver a una pareja de jovenes muy enamorados, esto empezo a destrozarle el corazon.

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