[Alejandría] Tienda de Ropajes

por Strife Mar Nov 16, 2010 8:14 pm

Me encontraba caminando por las amplias calles de Alejandria, la Noche aun no se había ido pero seguramente ya eran altas las horas del día. Aquellos pantalones casi completamente destruidos que tenia llamaban mucho la atención ya que la camisa se había destruido del todo, veía como la gente me miraba y como algunas damas sonreían y aveces se reían. Aun así ignorando a aquellas personas comencé a buscar algún lugar donde poder comprar algo de ropa, ya que con lo que tenia puesto podía resultar algo vergonzoso caminar llamando la atención y las burlas de las personas.

Mis oídos escucharon los gritos de una dama, veía como de alguna clase de edificio salia corriendo un tipo con varias ropas masculinas en su brazo y detrás de este una joven dama, de esta provenían esos gritos de pánico. Has que después de todo ese escándalo algunas palabras lograron diferenciarse de entre sus labios, las cuales eran "Ayuda, ayuda. Me están robando" Supe en ese instante que aquel tipo era el maleante. Veía como la gente se hacia un lado ignorando este suceso.

Pero sabia lo que tenia que hacer, como santo de Athena debía proteger al bueno y hacer que el malo sufra las duras reglas de aquel sistema llamado "Ley" Aquel Ladrón venia corriendo en dirección hacia a mi, esperando que yo también me hiciera a un lado para que este pudiera salirse con la suya pero fue todo lo contrario de lo que el pensaba, tome de los ropajes de su camisa elevándolo un poco mientras que algunas palabras salían de mi boca.

- Robar esta mal... En especial si al que robas es a una mujer. -

Aquel hombre soltó en el suelo los ropajes masculinos mientras que yo lo bajaba lentamente este había salido corriendo. Con mi mano derecha tome aquella ropa del suelo mientras que me acercaba a aquella bella mujer que se encontraba a tan solo unos metros de mi. Veía como me sonreía con aquella dulce sonrisa en la que se especializaba en genero Femenino.

- Disculpe pero creo que esto es suyo. - Le dije con algo de amabilidad, parecía guardar la calma mientras que a la vez sonreía de la palabra de aquella mujer también salieron algunas palabras.

- Descuide señor puede quedarse con esa ropa, tómelo como un regalo gracias a su buena acción. -

Al parecer la suerte estaba de mi lado, sonreía gracias a aquella mujer. Al parecer Alejandria no tenia gente in pura del todo, aquella chica y el Doctor que amablemente había curado a Edward a pesar de que este era Romano lo probaban. Entraba lentamente a aquel local directamente para ir a los vestidores y ponerme la ropa que esa mujer me había regalado, salí del local nuevamente y acentuando mi cabeza le di las gracias por haber sido tan amable. Finalmente me dirigí hacia mi compañero, el viaje finalmente podía llevarse a cabo.

por Edward Jue Nov 18, 2010 10:49 am

Era ya bastante tarde, la noche habia caido hace varias horas, pero aun asi seguia habiendo algunas personas por las calles de Alejandria, esas personas no podian evitar hechar la mirada hacia mi compañero Strife que iba mas desnudo que tapado, lo unico que cubria su cuerpo eran algunos ropajes rotos de su pantalon, era lo unico que habia sobrevivido a la prueba que se le habia impuesto su propio cosmos.

Por eso antes de que terminaran de cerrar todas las casas debiamos encontrar algun tipo de ropaje para el por que el viaje a Roma iba a ser largo y si viajaba en esas condiciones lo mas probable es que acabara enfermo y tampoco disponiamos de medicamentos para tratar alguna enfermedad. Pero otro problema que teniamos es que no disponiamos de ningun dinero u objetos para trueque en ese pais, seria dificil encontrar ropa...

Entonces curiosamente de una puerta aparecio un hombre corriendo con varios ropajes egipcios en sus manos, y tras de el una mujer pidiendo ayuda pues parecia que ese hombre era un ladron. El destino habia querido que se produjera esa curiosa situacion donde nosotros estabamos buscando ropa y hombre aparecio robando ropa.

Atrapalo Strife!

Aquel maleante iba a pasar al lado de mi compañero y el haciendo lo que se debia hacer lo detuvo mas no uso mucha fuerza por que solo era un simple ladron. Al cogerlo Strife, el ladron solto la ropa, recibio los avisos de que no volviera hacer eso y salio corriendo asustado... Yo comence a ayudar a recoger la ropa caida y se la ibamos a devolver a su dueña, pero esta mostrando una gran amabilidad nos la entrego como recompensa por haberla ayudado.

Parece que la suerte esta de nuestro lado.

Strife entro dentro del establecimiento de la mujer y se coloco sus nuevas ropas, yo por mi parte esperaba fuera mientras miraba las estrellas del cielo, estaba ansioso por volver a Roma y seguir esa pista que nos llevaria hasta nuestra diosa Athena.

Mi amigo salio por la puerta con sus nuevas ropas, con mucho mejor aspecto que antes cuando todo el mundo lo miraba paseandose por las calles de Alejandria practicamente desnudo. Me acerque a el ahora que estabamos listos para partir nada nos impederia salir de aquella tierra en la que habiamos convivido mucho mas de un año.

Y con esto se demuestra que las buenas acciones siempre estan bien recompensadas de alguna manera u otra. Y ahora vayamos hacia el puerto, debemos buscar algun barco que nos lleve a Roma.

por Hang Vie Ene 07, 2011 9:51 pm

Comencé a caminar por las calles principales de la ciudad pensando el donde podría conseguir algo de ropa, estaba cruzado de brazos mientras lo pensaba aunque la desnudes no fuera problema para los egipcios no me importaba que fuera un campesino que se acostumbro a tener que quitarse la camisa para poder trabajar cómodo en los campos ya que al estar sembrando por el ejercicio se juntaban el calor corporal y el calor normal del día.

Me recargue en una pared para seguirlo pensando, además no tenia de que avergonzarme ya que por el mismo trabajo de campo no tenía un cuerpo flácido ni esquelético, lo único que parecería extraño seria mi piel que era prácticamente pálida, y sin importar cuánto estuviese en el sol no se bronceaba ni un poco, eso me parecía extraño ya que todos tenían una piel bronceada a causa del sol mientras que yo seguía igual de blanco.

Pero eso ya no me era extraño sino más bien normal después de descubrir el quien era en verdad, ya que después de todo un espectro tenía que ser algo pálido o por lo menos eso pensaba en esos momentos.-Regresa a ser tu mismo…-Me decía a mi mismo mientras me daba unos cuanto golpes en la frente ya que por unos instantes regresaba a ser un joven con corazón humano y no alguien despiadado durante mis delirios note que se encontraba una tienda de ropa cerca.

Me acerque al puesto para poder mirar algo que me gustara y lo pudiera usar ya que le había dado mi camisa a la joven que ayude, mire una camisa negra que tenía el borde de las mangas una pequeña franja dorada, la tome ya que me había gustado y me la puse mientras que de mis bolsillos sacaba el oro para pagarla.-GraAquí tiene-Gracias que le vaya bien…-No respondí a sus palabras solo salí de allí y me aleje.

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