[Isla de Creta] Costas

Tercer post de seis - Ataque debil - especializacion en:

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Los rayos de sol empezaban a fastidiarle, por lo que coloco su brazo sobre su cara para tratar taparlos, pero aun asi empezaba a sentirse incomodo y de cierta forma mojado, Talos sentía que estaba acostado sobre un piso muy rugoso como si fuese hecho de muchas piedrecillas. Abrio los ojos con dificultad, en principio no veía nada, la luz del sol era tan intensa que sus ojos tuvieron que acostumbrarse en unos cuantos minutos, se levanto con dificultad, su cuerpo pesaba, de hecho le fastidiaba la armadura de general romano, observo a su alrededor y se dio cuenta que el piso era arena… y que estaba en una costa tirado, el mar el cual antes se encontraba violento y peligroso era cristalino y calmado, un cangrejo pasaba sin notar la presencia del general romano, Talos se dio cuenta que tenia mucho cabello sobre su rostro, era extraño, pero su antes corto y grisáceo cabello ahora era largo, igual que como había estado cuando arribo a Roma, miro su reflejo en las aguas del mar, no se parecía en nada a aquel orgulloso general que había visto antes, algo en el empezaba a cambiar, dado que la pechera hecha de un metal resistente le fastidiaba, se la quito, mostrando aquel musculoso y bien formado torso, con una que otro leve cicatriz producto de aquel rudo y peligroso entrenamiento que se llevaba en el ejercito de Roma, quedándose tan solo con la falda de su uniforme del ejercito y las sandalias, también se había retirado las protecciones de los brazos, al parecer no las necesitaba.

Se metió al mar, el agua estaba fresca para un dia tan caluroso como este, el era una clase de persona que no se preocupaba por disfrutar las cosas insignificantes y a la vez, sentía que su mirada se perdia en el agua que intentaba recoger en la palma de su mano pero escapaba como muchas cosas en su vida, perdia sus recuerdos y su verdadero ser, pero ¿Por qué?, luego de quitarse la arena del cuerpo salió del mar y decidió caminar para buscar a alguien o ayuda, no sabia en que lugar se encontraba, si en una isla desierta o tal vez para su suerte hubiese caído en una de las islas del archipiélago griego, sea lo que sea debia encontrar a alguien, el sol brillaba intensamente pero por su ubicación en el cielo apenas era de mañana, sus huellas se quedaban en la arena, pero luego observaba que el viento, de alguna extraña forma les ocultaba, tal vez ese seria el fin de un general que había luchado tanto por alcanzar la gloria? No lo sabia o que quizá alcanzaría la gloria de alguna manera… recordó los últimos momentos antes de naufragar y perder la conciencia… eran tonto, pero se estaba pareciendo a ese otro yo que había visto antes y había enfrentado.


Sigio caminando hasta cuando encontro el lindero del bosque con la playa, tenia un poco de sed asi que subio a una palmera y bajo un fruto el cual le sirvio de alimento momentanio y tambien para refrescarse, tenia hambre, sed y cansancio, quiza si encontraba a alguien en aquella isla pudiera ayudarle, tan solo necesitaba tener suerte y que aquellas peronas fuesen amistosas con el, no deseaba pelear con nadie en esos momentos.