[Alejandria] Enfermeria de la ciudad

Caminaba con total tranquilidad por las calles de Alejandría, se hacía de noche, la bella y plateada luz de la luna mostraba todo su esplendor en medio del oscuro firmamento, donde podían notarse unas cuantas estrellas, las curiosas constelaciones que siempre me había gustado mirar. Aunque permanecía andando sin rumbo porque la verdad era que ni siquiera yo tenía una idea de donde empezar a buscar a esa mujer que tanto se mostraba en mi mente, de nombre Selene, que no recordaba ni siquiera quien era en mi vida. Solo en eso se centraban mis pensamientos.

De pronto después de tanto caminar me topé con un edificio, no era muy grande que digamos, pero no lo había visto antes, al menos no recordaba nada de aquel sitio. Pero vi que a un lado había un viejo cartel de madera que decía: "Enfermería", no sabía que haría allí dentro, pero me parecía que iba a encontrar a alguien que me de algún tipo de información acerca de la persona que estaba buscando. Entonces empujé la puerta con delicadeza y me adentré en el lugar. No había nadie, entonces decidí seguir caminando por el pasillo hacia el fondo. Vi a un hombre de cabello negro y otro que estaba mal herido, parecían quemaduras, quien sabe. Pero me acerqué al de cabellos negro que parecía sano.

-Quizás el pueda darme algo de información- Pensaba mientras me acercaba a paso lento, con algo de timidez pero sabía que debía preguntarle. Me acerqué y toqué el hombro del hombre llamado Strife -por supuesto que yo no sabía su nombre- para que se de cuenta de mi presencia y dije a continuación.

-Disculpe, me preguntaba si tal vez usted podría ayudarme... necesito una información y no se por donde comenzar a buscar...- Decía con esa voz dulce y amable que me caracterizaba para ver que me respondía. Me quedé allí parada esperando una respuesta del joven.

Después de caminar algo aturdido por los mareos por las calles de Alejandría empecé a notar que se encontraban muchas personas en ella pero me extrañaba ya que de los recuerdos que poseo al venir con mi primo Hang no recuerdo que siempre hubiera tantas personas no me imaginaba el porque de esa razón solo seguía caminando para encontrar un enfermería para tomar algo de medicina y luego continuar mi búsqueda.

Finalmente después de todo lo que he recorrido pude encontrar una enfermería mientras que mis malestares parecían empeorar empuje la puerta mientras intentaba no perder el equilibrio, no encontré a nadie, entonces me fui adentrando en el lugar mientras me recargaba en la pared, Guren se encontraba a mi lado siguiéndome, al adentrarnos mas empecé a escuchar voces…

Al entrar mire que se encontraban varias personas adentro pero me quede callado ya que el doctor se encontraba revisando a un hombre que parecía se había quemado el brazo, pero puse una mano en mi boca evitando vomitar mientras sentía como un sudor frio caía de mi frente además de que Guren comenzó a hacer ruido porque se encontraba preocupado, me imagine que me debería de ver pésimo para que el se viera tan impaciente, con mi malestar y todo me agache para acariciarlo y decirle en voz baja.-No te preocupes tanto yo estoy mejor que el hombre que se encuentra en la camilla yo aun puedo esperar un poco.-pero sentí como perdía el equilibrio otra vez y mejor me senté a esperar que el doctor acabara con el hombre que revisaba mientras observaba a una joven de cabellos dorados y otro hombre de cabellos negros.

En aquel tiempo que esperaba la respuesta del joven, vi entrar a otro chico descompuesto, aunque no le presté mucha atención, puesto que solo venía por una información que quizás encuentre o quizás no, pero al menos debía intentarlo, era la única forma de informarme acerca de aquella mujer que resonaba en mi mente y de parte de mi pasado, o eso creía.

De pronto el chico de cabellos negros respondió a mi pregunta, según él no iba a poder decirme mucho, pero igualmente lo intentaría, quizás alguna información me de, o al menos alguno de los que estaban allí sabría algo. Decidí comunicarle lo que tenía en mente, con una voz suave y algo tímida.

-Pues verá...- Empecé -Quisiera saber algo de información acerca de una mujer... en realidad no se quien es, pero su nombre está en mi mente y debo encontrarla para aclarar algunas dudas que tengo.- Movía las manos explicando lo primero que se me ocurría, luego de una pequeña pausa continué -Su nombre es Selene. Quería saber si alguno de ustedes la conoce o me puede dar alguna información acerca de ella, por lo menos donde puedo encontrarla, o si sabe de alguien cercano a ella que pueda ayudarme...- Concluí con esas ultimas palabras, no estaba segura de si ellos podían ayudarme, pero sino, no sabía a quien más recurrir para buscar información. Estaba... como decirlo, desesperada, o más bien ansiosa por encontrarla ya que tenía un ligero presentimiento de que ella podía saber acerca de mí, podría ayudarme. Entonces permanecí quieta a la espera de una respuesta, positiva o negativa, pero al menos que me guíe un poco porque sentía que estaba parada sobre la nada, sin saber acerca de lo que buscaba.

Escuchaba atentamente las palabras de joven de cabellos negros, me sorprendí cuando me dijo que aquella tal Selene era la emperatriz de Egipto. Recordaba muy poco acerca de ella, pero aquella información era algo que ni siquiera se presentaba en mi mente, ni en un recuerdo borroso, nada de eso, simplemente tenía su nombre y su rostro en aquella imagen de mi cerebro.

-¿La emperatriz de Egipto?- Me decía en mi mente, trataba de recordar pero era imposible, cada cosa de mi pasado se había borrado, no había nada que me hiciera recordar -Al menos ya se quien es, pero sigo parada en el mismo lugar, debería encontrar a alguien más cercano de ella que me diga el lugar exacto en donde se encuentra...- Pensaba mientras oía las últimas palabras del muchacho, que me decía que podía encontrarla en el palacio, pero no era seguro que me dejaran entrar. A lo que contesté con un tono inseguro -Gracias... supongo. Es una buena información para empezar...- Esbocé una sonrisa luego de mis palabras, aunque no era muy buena información por lo menos era algo útil, seguiría vagando por Egipto, pero sabiendo a quien buscar. Entonces vi que el joven se dirigía a la salida, lo seguí, pues también debía salir de allí.

Caminaba a paso muy lento sumida en mis pensamientos, aunque no fuera mucho, pero pensaba el siguiente lugar a donde me podría dirigir. Sería difícil encontrar a alguien del que a penas tienes información y no sabes quien fue en tu vida, pero no podía rendirme, ya que aunque no lo sabía, era mi hermana, a la que alguna vez quise tanto y ella a mi, y debía reencontrarme con ella cuanto antes, solo el destino sabría que hacer con nuestras vidas. Salí de la enfermería en marcha por la ciudad nuevamente, sin tener un destino fijo.

Mira con curiosidad a al hombre y a la joven que se encontraban delante de mi mientras seguía sentado esperando a que el doctor acabara de atender al hombre que se encontraba en la camilla, escuchaba como la joven le preguntaba al hombre de cabellos negros que si conocía a una persona que ella se encontraba buscando, pero al escuchar que a la persona que se encontraba buscando era la reina de Egipto me sorprendí un poco pero como a mi no me concernía eso solo esperaba al doctor.

Al terminar con el hombre de pelo castaño se acerco para decirme que fuera a que me atendiera el doctor.-Ha si gracias…-Me acerque a la camilla donde se encontraba al doctor para que me revisara.-Doctor aunque parezca grave solo me encuentro algo mareado y con nauseas es todo.-el doctor se me quedo viendo con extrañeza pero después solo me dio algo de tomar como un tipo de te diciéndome que con eso en poco tiempo me sentiría mejor, me levante de la camilla.-muchas gracias por las medicina. sonreí al decir esto mientras me acercaba a la puerta para seguir mi camino.

Pero por alguna razón sentí que el hombre de cabellos cafés me podría decir algo sobre mi primo, me acerque a el antes de que se fuera detrás de su compañero.-Disculpe por molestar pero me encuentro buscando a alguien y quisiera saber si usted no conoce a un joven llamado Hang…Mire la reacción del hombre que parecía extrañado por mi pregunta pero parecía que si lo conocía.-Haaa…si lo conoce me podría decir donde esta y si sabe que es lo que hace?...mi nombre es Arone y soy su primo.-Como presentía que lo conocía solo caminaba junto a el mientras esperaba su respuesta y Guren subía mi hombro.

Sabia que mi presentimiento no fallaría ese hombre si conocía a Hang pero no sabia a donde se dirigió con certeza ya que primero fue al palacio de aquí, luego dirigiéndose a la salida, por un momento perdí la esperanza de poder encontrarlo pero escuche algo que dijo el hombre que me llamo la atención.-El Fayum?...-había una gran posibilidad de que lo pudiera encontrar en ese lugar ya que se encontraba viviendo en ese lugar, si no lo encontraba a el tal vez podría encontrar a mis demás familiares y decirme donde encontrarlo.

Mire como acaricio un momento a Guren, se me hiso extraño que se dejara acariciar por un extraño si que lo mordiera quizás porque no era mala persona, ya que si lo hubiera sido no dejaría que se acercara, solo asentí con la cabeza para entender que si le daría sus saludos, pero ahora estaba pensando si regresar a Roma o buscar un lugar donde pasar la noche.

Con que El Fayum ha?.-donde debo de dirigirme a Roma para avisar de mi búsqueda o ir directamente a ese lugar donde tal vez se pueda encontrar y resolver las dudas que tengo acerca de estos extraños presentimientos, será mejor regresar a Roma en el primer barco para avisar y poder buscar con tranquilidad, salí de la enfermería para encontrar un lugar donde pasar la noche o un barco para salir de Alejandría, al salir a las calles sentía como corría un viento helado por el lugar, pero Guren en mi hombro me brindaba calor mientras nos dirigíamos a la costa.

Pero antes de seguir el camino me detuve porque recordé algo que ocurrió en el barco al tener ese sueño quien abra sido ese hombre que vi por que dijo que me acompaña desde ese día...¿que día y ´porque?...también porque me recordara a Guren que tendrá que ver con el o con migo, y con el futuro que esta por venir, porque abra dicho que me preocupase mas por en presente que por el futuro…seguí mi camino con esas dudas…