Portón Principal

por Artorius Sáb Nov 13, 2010 7:46 pm

Recuerdo del primer mensaje :

Finalmente luego de haber buscado los materiales necesarias para la misión encargada por la mismísima Diva. Nuevamente me encontraba en las calles Romanas, iba a paso lento pues no tenia razones de apuro. Aun sabiendo que esto tal vez molestaría a Nia, aun guardaba aquella mascara en una pequeña mochila que se encontraba amarrada a su mochila. Al suspirar se notaba aquel frió aliento que salia de su garganta, aquel viento que hacia elevar algunas hojas a su caminar. Mantenía aun las manos entre las fundas de sus bolsillos, su fría mirada se reflejaba ante la luz de la Luna.

Aun se preguntaba que hacia en este exacto momento aquella joven de cabellos rosados, seguía algo impactado por la noticia la cual se trataba de secuestrar a su hermana gemela la cual se encontraba "Perdida" Ya faltaba poco para que llegase a la entrada del palacio Romano, su caminar comenzó a acelerarse. Pisaba charcos y a su pasar solo dejaba tierra aplanada por las huellas de sus pies. Algunas frases cursis salían de su boca mientras decía con sus labios.

- No tengo una sola parte de mi cuerpo, por lo menos enfrente, que no tenga cicatrices; no hay arma, que se use de cerca, o que se lance desde lejos, de la cual no lleve la marca. No es hermoso vivir con valor y morir dejando tras de si fama imperecedera . -

Finalmente había llegado, había llegado ante los Portones principales a la entrada del palacio del Cesar. Lugar donde se encontraría con su compañera de misión. Solo se recostó ante aquellos rejones, esperando la llegada de aquella fina dama

por Dandy Dom Mar 06, 2011 9:26 pm

Helena estaba a punto de responderle a Dandy cuando se soltó de sus brazos y salió corriendo a ayudar a una chica rubia que iba a caerse del caballo, Dandy corrió detrás de Helena también a ayudar a la muchacha, pero Helena ya la había tomado en sus brazos, así que el rubio solo llevó el caballo junto con los otros y lo ató fuertemente.

Cuando Dandy regresó con Helena y la chica que se había desmayado, Helena le pidió a Dandy que buscara un trapo humedo para la muchacha. Dandy tomó un trapo de su mochila y corrió a humedecerlo a un depósito cercano de agua y lo llevó corriendo.

-¿Quién será esta muchacha y que le habrá ocurrido.- Pensó Dandy.

Ahora, la chica parecía volver en sí, pues abría los ojos pesadamente, seguro le molestaba la fuerte luz solar de aquellas horas de la mañana. Helena parecía más calmada ya por la salud de la muchacha.

En la mente de Dandy se agolpaban ideas de cosas que pudieron haberle pasado a la muchacha, pues Roma era un lugar peligroso, habían muchos ladrones, asesinos y violadores y alguno de ellos pudo haber lastimado a la chica.

-¿Crees que esta bien hermana?- Preguntó Dandy a Helena, mientras el rubio se acercaba a su mochila y sacaba de ellas unas frutas que les habían sobrado a el y a su hermana y que pensaba ofrecerle a la muchacha, que seguramente necesitaría recuperar fuerzas...Pero había algo que inquietaba a Dandy, la muchacha que acababa de llegar también irradiaba una gran fuerza, muy parecida a la de Helena....¿Qué será esto...? Se preguntaba...

por Helena Dom Mar 06, 2011 9:48 pm

Helena observó con alegría como su interlocutora ahora estaba despierta, se sentía feliz de que esa joven que tanto se parecía a ella aunque no supiera porqué, ahora se encontrara mucho mejor, y es que no era para más, puesto que ella la salvó de caerse y ganarse horrenda contusión en la cabeza como consecuencia de esa caída.

-No te muevas demasiado, estás algo confundida porque te has desmayado y no tienes fuerzas, seguro que no te has ni alimentado lo suficiente.

Helena se puso de pie y tomó una fruta, no la morada que tenía para su amor platónico, sino una fruta de color rojo, una que ella sabía era muy dulce y restauraba las energías de quien la consumiera; aún esperaba por la ayuda de su hermano, se tardaba un poco según su criterio de mujer desesperada, pero eso era porque como lo dije estaba desesperada, en el fondo sabía que Dandy llegaría en el momento correcto a ayudarla.

-Te desmayaste, gritaste el nombre del señor Fye y te desmayaste.- Helena se puso otra vez a la altura de la joven rubia y le extendió la fruta roja para que la comiera, puso mucho trabajo y cuidado en no mostrar alguna emoción cuando ella hablara de Fye, bien sabía que no pudo ocultar nada de lo que ya era evidente con su voz; la misma energía que ella percibía en Dandy también la percibía en ella era como si algo los uniera. ¿Quizá ella era una amona como ella? NO lo sabía.

-Gracias hermano está bien y e eso es bueno tenía miedo de que algo malo se pudiera suceder.- Helena miró a su hermano y luego volvió a mirar a la joven, luego de suspirar unos segundos la amazona de Abel se aventuró a decir:

-El señor Fye está dentro del palacio, me ha dicho que lo espere hasta que salga y bueno pues como escuché que lo andas buscando, si deseas puedes esperarle aquí con nosotros.

Una vez dicho esto Helena miró nuevamente a su hermano y esperó la respuesta de la joven, no podía creer que ahora no podría estar a solas con Fye porque ahora había aparecido esa chica, ahora estaba más que dicho, ese amor era imposible inaccequible para ella, jamás en la vida iba a tenerlo eso ya estaba puesto por el destino.

-Dandy creo que no le daré la canasta...

por Alexandra Lun Mar 07, 2011 9:09 pm

La chica observaba todo a su alrededor y aun su cabeza le dolia un poco, pues todo regresaba a su mente, el caballo, el amo fye y que ella se habia desmayado, sin embargo pudo notar como su alegria en sus ojos, de que ella ya hubiera despertado. Ahora que pensaba, no se habia golpeado la cabeza y al parecer eso habia sido gracias a la rapida ayuda que habia recibido por parte de la joven que se parecia a ella y hasta ese momento se habia fijado de aquel detalle.

La dama rubia, escucho lo que le decia su salvadora, por asi decirlo, y ahora que lo recordaba, ya eran dos dias que no probado bocado alguno, a decir verdad no lo recordaba ya. Mientras trataba de recordar que dia habia comido, vio como la otra rubia se ponia de pie y tomaba una fruta, una de color rojo, mientras le seguia explicando lo sucedido a la joven de orbes celestes, para luego ponerse a la altura de ella, extendia la fruta para que la comiera, y asi lo hizo, sin dudarlo un poco toma aquella fruta y comenzo a comerla despacio, sin embargo noto algo cuando le dijo que ella habia gritado el nombre de su amo Fye.

Ella no era muy tonta y se púdo dar cuenta que al igual que ella, la joven que teni afrente a ella, sentia algo por su amo, ademas de que percibia una energia muy similar a la de ella en el joven que le llamaba hermano la rubia, y de la otra chica, podia sentir algo mas fuerte, tambien seria una amazona, aun no lo definía bien.

Ya al haber comido un poco de la fruta, su semblante comenzo a cambiar, y tambien el estado de la chica cambiaba, ella misma lo sentia, lo que le faltaba su cuerpo era alimento, asi que con una sonrisa le pudo contestar a la dama

- Muchas gracias... (hizo una pausa y prosiguio)...en verdad no sabia que me habia pasado, pero ahora que me lo dice muchas gracias por haberme salvado de tremenda caida, ademas, ahora que lo mencionas, venia buscando ami Amo Fye, pues yo soy una de sus sirvientas de cabecera del señor Fye, mi nombre es Alexandra.....lamento no haberme presentado antes jejejeje.....y creo que tendre que esperar aqui al señor Fye.... jejeje-dijo la chica con una sonrisa mientras se terminaba la fruta y se reincorporaba lentamente.

por Helena Mar Mar 08, 2011 10:57 am

Helena observó detenidamente a la joven que se encontraba ahí acostada, aunque le costara creerlo era realmente fuera lo normal encontrar a una joven muy parecida a ella, el mismo color de cabello, pero con tono diferente, el mismo color de piel, emanaban las misma energía, por lo menos no tenían el mismo color de ojos, pero lo que sí tenían igual y era más raro aún, era la presencia del mismo amo, la joven por parte de las leyes humanas y Helena por parte de las leyes divinas, después de todo era su amazona; a pesar de eso no le extrañaría tampoco que esa chica fuera una amazona, después de todo sentía en ella aquella energía que se le hacía totalmente familiar en relación a su hermano y ella.

-Mucho gusto linda, mi nombre es Helena y no te preocupes, no podrías presentarte porque te encontrabas en un estado malo para ello, pero ahora estás bien querida no te pongas mal.

Helena suspiró y miró al cielo, estaba feliz porque esa joven estaba bien, pero también se sentía algo frustrada de que no pudiera estar a solas otros pocos segundso con Fye; pensó que talvez las cosas eran así y ahora tenía algo peor de qué ocuparse, y era el hecho de que tuviera una ropa de sirvienta parecida a la de ella, el problema principal de que Helena no fuera sirvienta, era que esa chica seguro se conocía todo lo que había en esa casa, y rápidamente sabría de su engaño, esperaba que ella no dijera nada, porque sino eso dificultaría las cosas con su hermano y lo que menos quería era que su hermano desconfiara de ela y se pusiera mal, porque la verdad era que ella le tenía mucho aprecio a ese joven.

por Dandy Miér Mar 09, 2011 5:55 pm

Las palabras de Helena sorprendieron grandemente a Dandy: "Creo que ya no le daré la canasta"...

Dandy sabía de el cariño y la devoción que su hermana le profesaba al señor Fye y por eso se sorprendió al escuchar aquello, estaba a punto de responderle cuando la muchacha que se había desmayado regresaba en sí. Helena le tendió una fruta, la cual la muchacha comió ávidamente; mientras sus ojos recorrían la cara de Helena y Dandy.

Dandy podía notar ahora la energía que emanaba de ambas, eran muy parecidas, aunque Dandy no sabía como explicarlo podía sentirlo. Ambas muchachas eran muy parecidas físicamente y también en aquella aura misteriosa.

Ambas mujeres hablaban muy seriamente, Dandy vió en los ojos de la recién llegada la gratitud hacia Helena por haberla ayudado, pero prefirió mantenerse un poco alejado por respeto a la privacidad de ambas. La muchacha se levantó mientras decía su nombre: Alexandra.

Dandy se acercó un poco y tomando de la mano a la muchacha, se inclinó y besó su mano.

-Mucho gusto señorita Alexandra, mi nombre es Dandy.-

Dandy volteó a ver a Helena que ahora estaba de pie junto a ellos, como buscando su aprobación de hermana mayor. Realmente en unos pocos momentos, Dandy sentía mucho cariño y admiración por su nueva hermana, Helena parecía absorta en sus pensamientos...

Dandy pensó en preguntar sobre la misteriosa energía que sentía dentro de si, y que sentía al rededor de las dos muchachas; pero no se atrevió pues le parecía que aquel no era un buen momento para preguntar ese tipo de cosas. Y queriendo iniciar conversación, preguntó a Alexandra:

-Y digame señorita Alexandra...¿qué la trae por aquí? ¿es sirvienta del señor Fye?-

por Alexandra Lun Mar 14, 2011 1:11 am

La dama al reincorposarse pudo darse cuenta que la dama que habia sido su salvadora, era demasido parecida a ella, desde el cabello rubio, pero en color distinto, la tez nivea, la misma aura; dando la unica diferencia entre ellas era el color de sus ojos, sin embargo, sintio algo extraño, pues pareciera que la dama era una amazona, tal y como Alexandra habia descubierto en las montañas, por lo que, solo dejo en seco su pensamiento, para poder escuchar la presentacion de la otra joven.

Tal pareciera que se llamaba Helena y le decia que no podia presentarse dado que ella se encontraba desmatada, asi que solo la ojiceleste se limito a sonreir timidamente, mientras trataba de recordar su rostro, pues, al verla vestida como sirvienta, penso que seria de la villa, pero tantos años que habia estado en ella que conocia a todos los trabajadores y no era de ahi, pero dejo pasr aquello, ´puesto que no era le momento para preguntar eso.

Enseguida el joven que estaba con Helena se presento mientras se inclinaba y besaba su mano, eso ruborizo de pena al adama, pues jamas habian hecho eso hacia ella, pues ella era una sirvienta y no le era permitido aquelo, pero luego se tranquilizo y escuchando la pregunta del joven llamado Dandy, respondio con una sonrisa

- Bueno en realidad yo venia por asunto muy importante para el señor Fye, pues es un recado que debo comunicarle enseguida, pero dado que se encuentra dentro, tendre que esperar y si...yo soy una sirvienta del amo Fye, de hecho soy su sirvienta principal por asi decirse, pues me encargo de todo lo que tenga que ver con la estancia del amo en la vila....y vosotos quien sois, pues no los habia visto por aqui.....

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por Helena Lun Mar 14, 2011 12:21 pm

La joven de cabellos rubios escuchó las palabras de su hermano y las de la joven, si bien era cierto su estafa de la sirvienta de Fye había resultado con algunos, aquella mujer que estaba frente a ella no había sido capaz de creerse tal cuento por completo, pero la verdad no era que todo estuviera perdido, sabía claramente que si se ponía las pilas podría hacer que su mentira fuera bien formulada; y es que la verdad era que no podía ir por ahí revelando que su amor platónico, su querido Fye, era el dios de la luz, y líder del templo de la corona, eso no era aceptable para una amazona como ella.

-Dandy querido hermanito, pienso que esta adorable señorita necesita algo de agua. ¿Podrías por favor encargarte de conseguir una poca? Si la tuvieras cerca sería mucho mejor.

Helena se puso de pie y acomodó un poco uno de los caballos que se había desalineado y parecía estarle alejando de ella. Una vez que la joven terminó esa faena se acercó al caballo favorito de Fye y le acarició la cabeza y el lomo con una expresión muy dulce; el caballo obviamente no reaccionó ante ella con miedo o frustración, sino que la reconoció como su igual, como si la conociera desde hace mucho tiempo, justo esa sensación era bastante tranquilizadora para ella, porque la verdad se estaba quedando sin opciones para contestar.

-¿Con que eres la que se encarga de la estancia del señor Fye? Interesante labor... Más porque cuando entré a trabajar hace sólo unos días la jefa de las sirvientas me dijo que yo haría ese trabajo, porque según ella la otra sirvienta no hacía nada, pero la verdad es que yo me hacía la idea de que iba más bien a turnarme los días con esa persona; esa señora es muy exigente, y también es bastante molesta, no deja que uno haga solo su trabajo, critica demasiado. No me parece que tu no hagas tu trabajo, a mí me parece que eres muy responsable con él.

Helena suspiró y pensó que eso podría responder la pregunta de la joven Alexandra, después de todo cuando estuvo en esa casa lo único que pudo hacer fue casi trabajar como sirvienta, unos la mandaban a la cocina para que hiciera algo, otros la mandaron a llevar sábanas, y así muchos la hicieron trabajar tanto que la joven mujer al no poder ver a su amado hombre al final del día sintió que había perdido mucho tiempo en ese lugar.

-Mi hermano aún no consigue trabajo ahí, recién me ha pedido que yo le ayude a conseguir uno, la verdad no sé cómo hacerlo, pero estoy segura que podré cumplir los deseos de mi hermano.

Helena miró a Dandy con mucha ternura y le sonrió, no quería decepcionar a ese hombre que tan alegremente había decidido ayudarla y protegerla como si fueran hermanos, no le importaba si tenía que morir en el intento, ella lograría que su hermano fuera feliz, y que más que todo permaneciera a su lado, aunque un presentimiento hermoso le decía que el, por la misma energía que emanaba, daba los indicios de ser verdaderamente otro de los guerreros de Abel, por lo menos Helena deseaba fervientemente eso.

por Fye Miér Mar 16, 2011 3:49 pm

Despues de unas horas viviendo en un mundo que no era el suyo, Fye al fin salia por las grandes puertas del palacio romano dejando dentro a mi hermano, por el momento seria mejor dejarlo dentro ya que si lo sacaba sin que nadie se diera cuenta las consecuencias podrian ser aun peores. Al salir por la puerta vi el lugar donde estaba mi caballo, aquella chica llamada Helena habia esperado todas esas horas con mi caballo como le dije que hiciera. Su obedencia era algo ejemplar.

Junto a ella habia un chico de cabello castaño y recogido en una larga trenza y la otra de las personas era alguien a la que estaba esperando ver hace mucho, era Alexandra, su fiel sirviente a quien junto con su hermano Armand habia mandando en busca de mi hermana. Esperaba que los resultados de su viaje fueran satisfactorios.

Comence a bajar la escaleras de la entrada con lentitud hasta colocarme justamente detras de donde estaba Helena, pude escuchar su conversacion con Alexandra, estaban hablando sobre cosas algo delicadas y sin que yo hubiera dicho todavia nada. Antes de que terminara quise hablar yo ya que las palabras de Helena podrian crear alguna confusion de Alexandra.

Alexandra es una gran sirvienta y siempre me ha servido con fidelidad, estoy bastante complacido con su trabajo y nunca me quejaria de ellos, no por nada lleva años sirviendome. Tendre que tener unas serias palabras con la jefa de las sirvientas al hablar mal de mi sirvienta personal.

Ahora comenzaba a entender mas quien era esa chica llamaba Helena que habia encontrado antes en la puerta de Diva. Hace unos dias la jefa de la sirvienta le comento que habia contratado nuevo personal, seguro que una de esas personas se trataba de Helena, aunque habia algo mas, parecia que conociera a Helana de un tiempo algo mas atras.

Helana era tu nombre cierto? Pienso que nos conocemos de algo. En fin, asi que entraste a trabajar a la villa, espero un gran trabajo por tu parte. Ya que Alexandra tiene mucha experiencia en la villa sera mejor que aprendas de ella.

El otro chico aun no sabia quien era y por eso solo me habia dirigido a las chicas, esperando aver aclarado sus confusiones. Pero era momento de hablar de asuntos serios asi que se acerco hacia Alexandra para hablar con ella a su lado, pero permaneciendo aun cerca de Helena y el otro chico.

Y bien Alexandra, como te fue tu viaje? Encontraste lo que te pedi que buscaras?

No le hablo totalmente con claridad a Alenxandra pues no podia dejar que todos se enteraran de la desaparicion de Sophia. Aunque mas bien.. debia decir secuestro. Pero seguro que Alexandra entenderia mi modo de hablar y sabria responder correctamente, por algo habia estado conmigo por tantos años.

por Alexandra Miér Mar 16, 2011 7:59 pm

Alexandra miraba como Helena le decia a al chico llamado Dandy que fuera por un poco de agua para ella, es decir, alexandra, por lo que este salio de ahi y dejo a las chicas solas. Helena se acomodaba su pelo y se acercaba al caballo de se amo y lo acariciaba; Ella esperaba a que este no le reconociera, pero fue todo lo contrario, pues tan solo se quedo quito, sintiendo como le acariciaba la cabeza y su lomo del corcel que mas le gustaba a su amo Fye. Mientras le contestaba a la pregunta que habia formulado dla rubia de ojos celestes, anteriormente, explicandole que ella apenas acababa de entrar a la villa y que efectuaria la misma labor que ella, servirle a su amo Fye, por lo que le extraño mucho eso, pues la jefa le dijo a la otra chica que ella no hacia del todo bien su trabajo, por lo que un brillo de enojo se podia ver, como podia decir eso aquella persona a la cual le habia hecho un fin de quehaceres para demostrar el potencial que tenia.......como podria decir esooo??', pensaba la chica mientras escuchaba a la otra, pero al menos ella no pensaba como aquella mujer que desacreditaba su trabajo, por lo que sonrio, pues tambien le mencionaba que el chico Dandy era su hermano y buscaba trabajo ahi mismo, péro no sabia como poder conseguirlo, por lo que al fin respondio la chica, pues se dio cuenta de la mirada de hermandad y ternura que tenia sobre el chico.

-Oh! entiendo....es por eso que no sabia de dicha situacion, pues hace dias estuve tuvo otras cosas que hacer que hicieron que no estuviera en la villa....pero bueno, que se le ha de hacer aquella mujer jejeje...siempre ha sido asi, desde que llegue jejej asi que no te preocupes, suele ser asi la mayoria de las veces....tendras que acostumbrarte a su caracter jejeje y bueno, con tu hermano dandy...no lo se... espero poder hablar con el amo Fye y tal vez le puedas pedir que le de un trabajo a Dandy no? -

la chica de cabellera dorada le sonrio, y se preparaba para seguir hablando cuando escucho una voz muy familiar....Era su amo Fye....al fin habia salido del palacio del Cesar y se encontraba detras de Helena, por loque podia verlo de frente perfectamente. Y lo que mas le impresionaba no era verlo, pues hacia dias que no lo hacia, sino que la defendia por decirlo de esa forma, pues hablaba perfectamente de ella, eso hizo que casi gritara de emocion y le agradeciera por aquella palabras a su amo, pero lo reprimio, pues su amo aun o terminaba de hablar, pues despues de hablar de ella, se diriguio a Helena. El tal vez que dijo su amo de que ya se conociera causo intriga en la dama, pero no la dio a demostrar, pero de nuevo se sintio feliz, puesto que su amo le decia que Helena que si queria aprender algo de la villa, debia hacerlo de ella, pues tenia mas experiencia.

Sin embargo, al termino de esto el amo se acerco a ella, ero sin alejarse tanto de Helena y Dandy, y le pregunto de como le habia ido en el viaje?...si habia encontrado lo que le habia pedido?. esto realmente se referia a la busqueda de su hermana, pero sabia que solo habia dicho eso, pues conocia que el amo no se expondria a decir todo frente a las personas, por loq ue al instante comprendio el sentido de sus palabras y le respondio

- La mayoria salio bien, hubo un poco de dias nublados, pero di con su pedido, solo que hubo una situacion que se resolvio de diferente forma..-esperaba que hubiera entendido el sentido de sus palabras y que pronto pudiera decirle que paso en realidad, por lo que mirando a su amo, espero a que este le respondiera algo.....notando que Helena no habia dicho palabra alguna cuando llego el amo.....

por Dandy Jue Mar 17, 2011 5:31 pm

Helena le había pedido a Dandy que fuera por un poco de agua para la señorita Alexandra, que realmente parecía necesitar algo que beber.

Tranquilamente, Dandy fue hasta una fuente cercana y llenó un pequeño contenedor, y mientras regresaba, observó que las dos mujeres hablaban muy unidas la una a la otra, Dandy pensó que aquello era porque hablaban sobre cosas secretas, talvez de los asuntos del señor Fye.

Cuando Dandy estaba a unos cuantos pasos de ellas, una gran energía como la que había sentido antes en Helena y Alexandra hizo su aparición, pero esta era mucho más poderosa, y parecía salir del Palacio del Cesar, así que Dandy dirigió su mirada hacia ese lugar, grande fue su sorpresa al ver aparecer al señor Fye, que bajaba por las gradas y se dirigía hacia ellos.

El señor Fye habló y se dirigió a Alexandra, Helena se apartó un poco..pero Dandy no sabía que hacer. En ese momento había olvidado todo lo que había pensado decirle al señor Fye cuando se lo encontrara para pedirle trabajo.

De momento, el señor Fye hablaba con Alexandra; estaban un poco separados de donde se encontraba Dandy y su hermana Helena, queriendo dar ánimos a su hermana y a el mismo, Dandy se acercó a Helena y le tomó la mano.

-Vamos hermana, este es el momento...- Le dijo al oído.

Helena no se movía, Dandy alarmado por eso y pensando que podía perder su oportunidad, así que esperó un momento a que el señor Fye hablara con Alexandra y con paso firme se acercó al señor Fye, y haciendo una gran reverencia, dijo:

-Gran señor Fye, es un honor para mí al fin conocerle. Hace mucho tiempo formé parte del ejército romano, luchando ferozmente por nuestro imperio. Entre soldados se comenta mucho de su gran poder, de sus altos valores humanos y de su inteligencia.

Como ya hace varios meses que ha terminado la guerra y no teniendo oficio más que el de soldado, decidí acudir a vuestra presencia, para rogarle humildemente me contrate, puedo serle de mucha utilidad señor, pues puede confiar en mí, y le prometo que haré hasta lo imposible por lograr sus objetivos y cumplir con lo que usted me ordene.

Tanto mi hermana Helena como yo, seremos sus fieles servidores señor Fye. Dijo señalando a su hermana con la mano...

Esperaba que el señor Fye lo contratara, ya que los soldados romanos eran muy versátiles debido a la variedad de entrenamientos que recibían en el ejército, y Dandy sabía que podía ser de mucha ayuda a alguien tan importante como el señor Fye.

por Helena Jue Mar 17, 2011 8:08 pm

Helena estaba tranquila hablando con Alexandra, no pudo evitar sonreír al escuchar que ella decía que esa jefa de las sirvientas era así y que no se preocupara, la verdad era que esa señora se veía así al estar sometida a tanta presión todos los días, puesto que no era fácil la labor que desempeñaba todos los días. Una energía enorme de pronto inundó aquel lugar, alguien más había llegado a ese lugar, y Helena lo reconoció como su deidad, ese ser al que tanto estaba esperando con ansias, al que tantos deseos tenía de ver aunque fuera sólo unos segundos.

Un escalofrío recorrió la espalda de Helena, era algo extraño porque aunque ella había estado esperando este momento horas atrás, ya no estaba tan segura de que haberse quedado en ese lugar era bueno, pero las cosas no estaban sino empezando, ya que en conjunto con su miedo se unía ahora la situación de que Fye había escuchado lo que decía acerca de la jefa de las sirvientas, además el sólo saber de la posible sanción a esa pobre mujer sólo porque ella no sabía quedarse callada. Una reverencia por parte de la joven de cabellos rubios se presentó ante el romano de porte gallardo, y luego de escuchar aquello que decía acerca de que aprendiera de Alexandra, la amazona de Abel dijo:

-¿De algo?... Yo creo que no... ¡No por favor no haga eso!- Helena se asustó un poco porque su voz salió bastante alta, estaba bastante asustada pero es que no se había percatado de su tono al momento de dirigirse a Fye.- Por favor no le valla a decir nada, puede ser que ella habló mal, pero es que esa pobre mujer siempre se ve sometida a mucha presión, yo no creí ni una sola palabra de lo que decía es sólo que ella es muy estricta yo...

Helena se quedó en silencio porque pensó que estaba metiendo los pies en un lodazal tremendo sin posibilidades de salir bien librada del mismo, la verdad era que el señor Fye estaba ocupado en otras cosas para que ella lo molestara con cosas insignificantes, y era por eso que había decidido que los regalos que le tenía no iba a dárselos, el era un hombre de la alta sociedad, su "basura" no era nada extraordinario ni nada que podría servirle a ese hombre; una acción por parte de su hermano quien ya había llegado de cumplir su labor, hizo que la mujer de cabellos rubios palideciera y sintiera que su mundo se iba encima, ya que después de todo su hermano le había dicho algo acerca de su oportunidad para pedirle el trabajo, pero ella no esperaba que fuera así tan de repente cuando el señor Fye tenía algo importante de qué hablar con su sirvienta.

-Dandy no...

Helena no pudo decir nada, ahora estaba bastante preocupada, no sabía qué hacer, no conocía ni una faceta violenta de Fye para con los sirvientes, pero tampoco sabía cómo iba a reaccionar el con ese atrevimiento por parte de su hermano, por lo que al final Helena decidió tratar de ayudar a Dandy empezando a decir:

-Etto... Lamento si esto es repentino... Mi hermano no tiene la culpa si lo ha importunado no sea duro con él, si alguien debe ser castigado aquí debo ser yo señor.

Helena caminó lentamente para ponerse a la misma distancia en la que estaba Dandy, aún estaba sintiéndose rara por lo que estaba sucediendo, ya había cometido dos imprudencias enormes, y ahora esta era la tercera, estaba con miedo, Fye no podía permitir que sus sirvientes fueran insubordinados, eso era inaceptable en la sociedad romana.

-Cielos no sé que hacer... Primero le causo problemas, le robo un beso, luego le hablo en un tono feo y ahora esto... Qué horror! No puede ser no habrá regalo en el mundo que arregle esto, ya no le daré nada estará muy enojado para recibir lo que quiero darle.... Cielos estoy tan nerviosa...

Narro/ Hablo/ Pienso

por Fye Mar Mar 22, 2011 11:50 am

La respuesta de Alexandra era tal y lo que esperaba, hablo de una manera en que yo pudiera entenderlo, pero no sabia si tenia que estar feliz o preocupado por que al decirme que habia encontrado lo que yo le habia pedido que buscara significaba que habia encontrado a Sophia y que no estaba mal ni herida pues sino la reaccion de Alexandra hubiera sido mas inmediata. Pero me preocupaba eso de que una situacion se hubiera resuelto de una manera diferente, algo me decia que Sophia aun no estaba de vuelta..

Cuando volvieramos a la villa Alexandra me deberia explicar todo lo que habia pasado, a la vez que tambien tenia que intentar solucionar el asunto de Gelum y seguir en la busqueda de ese poder oculto en mi interior.

Deberas explicarme bien como se resolvio ese asunto una vez que estemos de vuelta en la villa, Alexandra...

De pronto la voz de Helena se alzo por encima de todas las demas, casi gritaba que por favor no le dijera nada y ni tampoco lo hiciera nada a la jefa de las sirvientas por haber hablado mal de su fiel Alexandra, y aunque lo consideraba un problema menor entre todos los que tenia pues le tendria que dedicar unas palabras a aquella vieja mujer.

Despues de ella la que hablo fue el chico de la trenza, se presento como un antiguo soldado que habia estado en la legion romana. Y ahora como hermano de Helena venia a pedir trabajo en mi villa, estaba intentando por todos los medios comprar mi simpatia y convencerme de que debia aceptarlo diciendo que tenia muchas habilidades que podia dar uso para cualquier cosa que yo necesitara.

Dandy te llamas cierto...?

Se lo habia escuchado de Helena pues el no habia dicho su nombre, estaba hablando de una manera muy elegante y respetuosa a mi persona. Queria asegurarse que lo contratara. Lo mire de arriba a abajo fijandome en que si que era un hombre que estaba en forma, sus musculos lo denotaban, aunque no todo debia ser fuerza bruta para ser un buen soldado.

Pensaba en como se estaba poniendo las cosas, y que todo cada vez se volvia mas peligroso y necesitaba soldados fuertes y leales a mi lado, ya no me bastaba solo con tener sirvientes que fueran capaces de limpiar y hacer tareas de la casa, ahora necesitaba tambien bastantes guerreros.

Muy bien, seras aceptado en la villa, pero en el caso en que me falles tambien sera despedida Helena, sera una prueba de tu fidelidad....

Entrar en la villa no era tan facil, y si queria entrar debia saber que esto era serio y que no cualquiera entraba dentro de la familia. Ahora me fui en direccion a mi caballo y lo cogi por las riendas para hacerlo andar detras mia. Helena lo habia cuidado bien.. la mire a ella que estaba algo extraña, en su rostro se podia ver la preocupacion.

Ahora iremos todos a la villa.

por Dandy Mar Mar 22, 2011 3:03 pm

Dandy no había podido evitar que su hermana Helena hablara, al ver que ella se había adelantado y empezaba a hablarle al sñoer Fye se quedó petrificado.

El señor Fye volteó a ver a Helena, mientras ella casi llorando le pedía que no se enojara y que perdonara a Dandy que no sabía como hablarle a alguien tan importante como el señor Fye.

El señor Fye escuchó lo que decía Helena, y luego habló en un tono que a Dandy se le antojó de amistad y privado a Alexandra y mientras empezaba a caminar hacia los caballos, el señor Fye observó fijamente a Dandy, parecía estarlo examinando para ver si podía formar parte de sus servidores.

El señor Fye le dijo a Dandy que estaba contratado, pero que si le fallaba, el y Helena iban a ser despedidos inmediatamente.

Dandy volteó a ver a Helena y le respondió al señor Fye:

-Claro señor, seremos los mas fieles servidores que haya tenido.-

-Ahora iremos todos a la villa.- Dijo el señor Fye subiendose en su caballo.

Alexandra también subió a su caballo, al igual que Helena. Dandy no tenía cabalgadura, así que iba a pie, caminando junto al corcel de su hermana, mientras avanzaban, Dandy le dijo a Helena:

-Hermana, te prometo que no fallaré, ni al señor Fye ni a tí. Puedes confiar en que si es necesario morir por cumplir mi misión que es que tu seas muy feliz, soy capaz de hacerlo...

Dandy iba confiado en que no fallaría, a pesar de los problemas que pudiera pasar, saía que su inteligencia, su fuerza y las habilidades que había adquirido en el ejercito romano le ayudarían grandemente en esa nueva etapa de su vida.

por Alexandra Vie Mar 25, 2011 1:45 am

La chica de cabellera rubia miraba a su amo, y por su mente pasaba que si le habia entendido bien su forma de hablar a lo que el le habia preguntado, pues agradecia a los dioses que su cara fuera neutra, eso para ella era señal que iba bien, mientras veia como Helena y Dandy se acercaban y se alejaban un poco para que hablaran mejor, pero sabia ella que eso no iba a ser posible en el lugar y como supuso, escucho las palabras de su amo, que le pedia que le explicara como se habia solucionado el problema una vez que estuvieran en la villa, cosa que pensaba hacer, puesto que tenia que hacerlo, pero ahora no era el momento mas idoneo, por lo que con una sonrisa le respondio

- Claro amo!... Por supuesto que lo hare, cuente con ello.. -

la dama se quedo callada y escucho las palabras de Helena, su salvadora y de Dandy, su hermano de Helena, en realidad se podia definir a Helena como una mujer muy valiente, ademas de Dandy, pues pararse frente a su amo y pedirle trabajo con ese porte y esa humildad hacia el, era punto favorable para ellos aunque su amo no lo demostrase, pues no a cualquier persona que le pedia trabajar le daba el puesto, bueno, como era obvio les habia puesto algunas condiciones, pero en realidad no eran muy difíciles y en muestra de su agradecimiento les ofreceria su ayuda, pues le habia caido muy bien ambos.

Eso sin contar el como habia dicho Helena que no habia creido alguna palabra de lo que habia dicho aquella jefa, pero ella sabia que era asi, por lo que solo sonrio agradecida hacia ella. Ademas ellos ya habia ganado una parte, por lo que de a partir de ahora en adelante cumplirían, bueno eso al menos pensaba la chica, pues sentia que ellos eran especiales, y que Helena tal vez seria una amazona y Dandy un caballero de Abel, como ella, tenia fe en eso.

Asi el amo se dispuso a decir que todos irian de regreso a la villa, cosa que alegro al a chica y sin mas siguio a su amo, a tomar su caballo, pues el ya se habia subido en el suyo, que cuidaba Helena. Sonrio y se monto rapido en el, para luego mirar a Helena y acercarse a ella susurrándole en el oido.

- No te preocupes Helena....yo estaré ahi para ayudarles a que se vayan acostumbrando y en todo lo que necesiten..ademas, despues de todo, espero y seamos amigas - le regalo una sonrisa de fraternidad y siguio a su amo, esperando a que Helena y Dandy los siguieran a su siguiente destino, Villa Vallis Mellitus.

por Helena Vie Mar 25, 2011 3:33 pm

Helena sintió que todo el peso que estaba llevando sobre sus hombros se había al fin liberado al escuchar que su hermano no había provocado la ira de su querido amor platónico, después de todo, el era una deidad, y provocar la ira de una deidad era un acto loco que ella no quería realizar por nada del mundo. Con la rapidez de una gacela, la amazona de Abel se movió sigilosamente hacia donde estaba el caballo que era el favorito del señor Fye y casi sin que nadie se diera cuenta, la joven de cabellos rubios tomó la canasta de frutas del lomo del animal y la escondió uniendo sus manos por la espalda, regresando así a su sitio justo antes que su amor platónico se volteara a verla.

-Pero...- Helena no dijo nada porque al final de cuentas sabía que no había sentido en que hablara haciendo quedar mal a su hermano dando a entender que no le confiaba su estabilidad laboral, total ya no importaba nada más ya su plan había funcionado bien, la canasta ya estaba lejos de la vista de Fye y ahora al fin se estaba yendo diciendo que todos tenían que estar en la villa; como una especie de escalofrío Helena, la amazona de Abel sintió la mirada fugaz de su amo, el señor Fye, pero no se alteró en lo más, mínimo, es que ya estaba lo suficientemente alterada como para ponerse más nerviosa aún.

-Estoy segura que no fallarás hermano querido, te quiero tanto que no importa además si cometes un error, porque igual yo puedo esconderlo de alguna manera, jamás dejaría que tú pasaras mal, además yo confío en tí y se que no harás nada que me perjudique.

Helena sonrió a su hermano y siguió escondiendo su canasta mientras observaba como el caballo que había usado Fye antes para poder llegar al palacio era el único que quedaba para que ella pudiera movilizarse, pensaba que tal vez tendría algún problema para poder usarlo de transporte, pero la amazona sabía bien que no tenía más opciones que usarlo sin quejarse. Una voz y un sonido de cascos trajeron a la realidad a la joven mujer de cabellos rubios, quien escuchó a su amiga, la sirvienta Alexandra decirle que esperaba ser amiga de ella y que la ayudaría de ahora en adelante; algo quiso decirle la amazona a aquella chica que lucía casi como ella, pero esta se marchó muy rápido y Helena no tuvo más remedio que acercarse al caballo y subirse para hacer que se empezara a mover lentamente. Algo preocupada por la canasta que tanto se molestaba en ocultar, Helena se la lanzó a su hermano y le dijo en voz alta:

-Dandy toma esta canasta y tenla de ahora en adelante, ya no preguntes nada, ahora me adelanto, creo que como soldado eres bueno para poder subirte al vuelo, y si no lo eres, entonces aprende hoy mismo, porque tendrás que subirte de esa manera.

Una vez dicho esto Helena sonrió y agitó las riendas del caballo para ir detrás de Lin, aún estaba preocupada por los acontecimientos anteriores, pero ninguno más le preocupada como el hecho de que Fye seguro querría descansar unos segundos en su habitación y ella la había hecho un desastre terrible, y ni decir aquello de que en los establos las cosas no estaban mejor que en la habitación de su amor platónico, porque también estaban pintados de hollín, y estaba seguro que todo apuntaría a ella, porque el caballo que usó par ir a ver a su ángel del olimpo había sido sacado de esos establos hechos un reverendo desastre.

-Espero no se de cuenta... Si es así creo que estaré perdida...

Narro/ Hablo/ Pienso

por Dandy Lun Mar 28, 2011 2:29 am

El señor Fye, Helena y Alexandra iban ya montados cada quien en un caballo, Alexandra se había acercado a Helena y había intercambiado unas palabras con ella antes de que montaran sus respectivos caballos, Dandy pudo ver en la cara de su hermana un sentimiento de tranquilidad que no había tenido desde que había hecho su aparición el señor Fye.

-No te preocupes hermana, puedes confiar en mí. No te fallaré...además yo se que podré ganarme la confianza del señor Fye y talvez yo pueda ayudarte en alguna manera.

Luego, Helena le pidió a Dandy que llevara la canasta que le había preparado al señor Fye, Dandy no comprendía porque Helena había decidido no darle aquella canasta a él, pero no preguntó nada, solo comenzó a caminar por detrás de los tres caballos. Pero algo invadía sus pensamientos, algo que no podía sacar muy facilmente de su cabeza....

Realmente todo había salido bien hasta el momento, en un lapso muy corto de tiempo tenía jefe, hermana y una amiga. Tras no conocer a nadie en Roma ahora tenía a esas 3 personas, a las que no conocía muy bien, pero algo en ellos le hacía sentir confianza.

A pesar de todo, Dandy no podía dejar de concentrarse en la extraña energía que emanaba de los tres, la del señor Fye parecía mas grande e intensa que la de las dos mujeres, pero ahora había otra cosa que le preocupaba secretamente....el también sentía aquella energía en su propio cuerpo...si bien con mucha menos intensidad que con las otras 3 personas...-¿que será esto que siento...?- pensaba Dandy.

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