Villa Romana de Cambre [Habitación de Mauritius]

por Mauritius Sáb Sep 11, 2010 10:00 pm

Finas telas de seda, traidas desde regiones del lino, sillas de las finas maderas, esto es lo que en verdad me caracteriza a mi, al gran Mariatus, este es mi pequeño mundo perfecto, donde los detalles tienen su propia importancia, piezas coleccionadas en distintos puntos del imperio, pinturas, oro e incluso en el fondo, sin duda, mi cama, lugar me acobijo y descanzo, ese sin duda debe de ser uno de los principales lugares, ahi donde mis pesamientos cesan y mis sueños sobrevuelan.

Los candelabros le dan un pequeño toque a misticismo, alumbrando a toda la habitacion y luciendolas por lo mismo, eh aqui mi pequeño lugar de descanzo, donde solo la mujer mas especial para mi duerme aqui, ella solo podra estar aqui cuando ya la ame demasiado, solo por diversion no lo sera.

Rodeado de las mejores piezas de construccion y de sabiduria, a lado de mi cama, esta un pequeño estante donde tengo lo primodial, mi dinero y otros objetos, el dinero guardado en un pequeño escondirijo, dificil de percebir a silmple vista, y con una convinacion de mecanismos que solo yo se, por eso mismo, admiren lacayos...

por Mauritius Dom Sep 12, 2010 5:19 pm

Bajo el resguardo de la noche, nos fuimos vistiendo en el rio, poco a poco, salimos a la superficie un poco mojados, despues de haber estado un rato acariciandonos, nuestros cuerpo estaban ya sumamente calientes, por las caricias y la exitacion de ambos, no podiamos perder mas tiempo, estabamos ambos casi seguros de lo que queriamos esa noche, tan solo era entregarse el uno al otro, sin miedos ni tapujos, libres como solo podiamos serlo.

La tome de la mano, y comenzamos a caminar despacio, mientras lo hacia, besaba levemente sus labios, y jugueteaba con su lengua, levemente besaba su cuello, me gustaba demasiado besarlo, tu piel, con una textura sin igual, y por su puesto sus senos, que comenzan a ser mi punto de atencion sin dejar de besarla, llegabamos lentamente a las calles de las villas, ligeramente escodian los caminos de piedra, la maleza que hiba cayendo seca, pero la luna nos cobijaba, e iluminaba cada vez mas su cuerpo, ese cuerpo que me enloquecia completamente, ya queria que estuviera en mi cuarto para poderla hacer mia.

Camine hasta llegar a unos escasos metros de la puerta del recinto, donde estaba ya esperandonos el mozo, que resguardaba la casa.

Crixius, buenas noches, sube a mi habitacion, el vino que tenemos en nuestros apocentos, y un poco de fruta, pero vamos muevete que esto es importante, ah y despues de eso, no quiero ser molestado, no importa quien sea, me entendiste?

El mozo solo atino a decir que si con la cabeza y se retiro rapidamente a buscar lo que habia pedido, y de inmediatamente, hice pasar a lady, mi querido amor por la casa, para que viera un poco de mi recinto, que atravez del tiempo podia vivir ahi, los muebles de finas maderas, y los cuadros era lo que mas resaltaban, suavemente la lleve hacia escaleras que daban al segundo piso, donde ahi se encontraba lo que pronto seria nuestro refugio.

Abri la puerta, y dentro ya estaba el vino y las frutas que habia pedido, pedi a lady que pasara primero, y cerre la puerta, nadie deberia de molestar, ya lo habia ordenado, tome una silla y le pedi a lady que se sentara.

Bebe un poco de vino si quieres, mientras yo encendere la chimenea.- me aleje un poco, a unos metros, y ante mi estaba la chimenea, con suficiente leña para poder arder todo lo que sobrara de noche, golpetee unas piedras, y rocie un poco de alcohol, y comenzo a arder, ya estaba todo listo, comenze a acercarme a lady, y la comenze a besar, empezando de nuevo con ese juego lujurioso que habiamos empezado en el rio, bese levemente sus labios y mis manos comenzaros a dispersarse, uno a sus senos, y otro a su entrepierna.

Me gusta cuando tus labios rozan mi felicidad y mis caricias llegan a tu amor, cuando el cielo se refleja en tu mirada y me acunas en tu regazo de placer....me gusta cuando me amas y yo te doy todo.

por Lady Dom Sep 12, 2010 6:05 pm

Entramos al recinto tomados de la mano. Tras darle órdenes a uno de sus sirvientes Mauritius me llevó a pasear para que conociera todo el lugar, pues aquel quizás fuese mi futuro hogar. ¿Quién sabía lo que podía pasar en el futuro? Por el momento sólo me importaba pasar el tiempo con ese apuesto joven y disfrutar cada segundo de su presencia.

Él me hizo pasar a la habitación y me invitó a sentarme en una silla. Le hice caso al mismo tiempo que observaba atentamente todo a mi alrededor. Aquel cuarto era un confortable y elegante lugar, sin mencionar lo lujoso, muy diferente a los sitios que yo solía transcurrir. Ya todo estaba listo; había frutas y una bebida. Tomé la copa que el chico me ofecía y bebí un sorbo de ese dulce y delicioso vino mientras él se encargaba de encender la chimenea.

Entonces volvió hacia mí y besó mis labios. Yo correspondí aquel beso y le permití explorar mi cuerpo con sus manos, que no tardaron en escabullirse entre mis piernas y tomar mis senos, haciendo que un débil gemido escapara de mis labios. Se sentía realmente bien y no iba a detenerlo. Allí nadie molestaría y podríamos terminar lo que habíamos empezado en el río. Dejé la copa en la mesilla como pude y me aferré a la espalda de Mauritius, deleitándome con ese beso apasionado.

Pronto decidí dar el siguiente paso: desabroché lentamente la parte superior de la vestimenta del joven para acariciar su terso y definido pecho. Sus palabras me hicieron sonrojar y entonces me separé levemente de sus labios.

Yo disfruto cada caricia tuya. Quiero que esta noche sea inolvidable para ambos, porque yo te amo... te amo tanto...

Me paré de la silla de inmediato y terminé de quitar la parte superior del atuendo de él, dejando finalmente su atractivo torso al desnudo. Me agaché para poner en contacto mis labios con su vientre, subiendo lentamente en un camino de besos humedos hasta su pecho, disfrutando cada segundo el dulce sabor de su blanca piel. Era agradable. Me puse de pie nuevamente y lo besé en los labios, jugueteando atrevidamente con mi lengua en su boca. Mis manos recorrían la espalda de él, descendiendo lentamente por todo su cuerpo hasta llegar a a parte posterior, justo entre sus piernas. Me adentré en su pantalón y con delicadeza comencé a palpar lo que había allí esperando por mí.

Esto es algo que siempre recordaré. Por favor, no permitas que me vaya de tu lado Mauritius.

Y volví a besar sus labios. Faltaba mucho para que aquella noche acabara y pasarían muchas cosas desde ese momento en adelante, nos amaríamos con intensidad.

por Mauritius Dom Sep 12, 2010 9:39 pm

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por Lady Lun Sep 13, 2010 8:32 am

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por Mauritius Lun Sep 13, 2010 7:20 pm

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por Lady Mar Sep 14, 2010 9:19 am

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por Mauritius Mar Sep 14, 2010 9:30 pm

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por Lady Miér Sep 15, 2010 8:42 am

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por Mauritius Miér Sep 15, 2010 12:35 pm

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por Lady Jue Sep 16, 2010 8:04 am

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por Mauritius Jue Sep 16, 2010 4:19 pm

La luz del sol comenzaba a entrar por las peuqñeas dendijas de la ventana, unos toquidos comenzaron a resonar en mi puerta, parecia como si se tratase de algo urgente, aun desnudo me levante poco a poco, dejado aun dormida a mi lady, camine unos pasos, y quien tocaba era mi dama de llaves, que al verme desnudo no pudo dejar de sonrojarse, lo note, pero a mi me parecia natural, estaba en mi casa y podia hacer lo que yo quisiera.

Si? que se te ofrece? dije mientras comenzaba a estirar un poco el cuerpo, mostrando un poco mi abdomen marcado, y haciendo que ella comenzase a sonrojar aun mas.

Este..le...le ... man..dan es..ta.. car..carta.. me dijo mientras levemente sus manos comenzaron a temblar mientras la estiraba para que yo la pudiera tomar.

Tome suavemente la carta que tenia un seño extraño, cuando lo denote bien, era de uno de los reyes o mensajeros de egipto, de alguna manera tenia que ser importante, lo tome y lo lei, sin duda tenia que ir al senado.

Yeterni, ven, tienes que vestirme vamos... dije mientras la deje pasar, ella asumio su papel, y fue a buscar mi toga, mientras me la ponia sentia un leve temblor en sus acciones, y denote que estaba nerviosa tan solo por mi presencia, termino rapido, me puse mis sandalias, y me dirigi a la cama, le di un beso a lady en sus labios, y lleve una mano a sus cabellos, mientras le susurraba.

Puedes quedarte el tiempo que desees, justo ahora tengo una salida importante al senado, si me esperas en la tarde, podremos seguir amandonos...

Y segui besando, y jugueteando contra su sexo sobre las sabandas, me separe y dispuse a partir, pero ante mi estaba yeterni,mi ama de llaves y mi esclava, solo le pude decir. Cuida bien de lady, ella sera como tu señora ahora, mientras el tiempo que yo lo decida, tienes que hacer lo que ella te pida. Dije y sali de mi habitacion directo a ir hacia el senado.

por Lady Jue Sep 16, 2010 5:28 pm

Narracion / Hablo / Yeterni

Los intensos rayos de sol de la mañana comenzaban a iluminar mi delicado rostro, lo que me obligo a abrir de a poco mis ojos, cubriendome con mi brazo de la luz, elevandolo levemente sobre mis ojos. Miré hacia al lado, y no vi a Mauritius, tal vez tuvo que irse temprano, quien sabe. Me sente en la cama, sin importar que este desnuda, estaba descubierto desde mi cintura hacia arriba puesto que al sentarme, la sabana se deslizó. Tome mi vestido que estaba a un lado de la cama, me levanté y me vestí rápidamente.

Al salir de la habitacion, vi a una joven que al parecer era una esclava o algo asi, entonces me acerque a ella y apoyé una manos sobre su hombro para que se percate de mi presencia. La joven me miro y se sobresalto un poco, pero al intante me hablo.

-ha Señorita Lady. Debe de estar buscando a Mauritius, él tuvo que atender un asunto muy importante, se fue hace algunas horas. Me dejo encargado de que cumpla cualquier orden que usted me dé.

-ha de acuerdo. ¿Sabes que? Ahora mismo debo ir a la banca puesto que estas bolsas de oro comienzan a extorbarme... Quisiera que me acompañes...ya que no conozco estas villas y no se el camino...

-De acuerdo señorita, ahora mismo vamos...

La mujer fue hacia la puerta principal y la abrio, invitandome a salir, a lo que accedi y sali afuera. Mientras disfrutaba del aire libre y de los maravillosos paisajes de la villa, la esclava fue en busca de un carruaje el cual trajo frente a mi, con unos hermosos corceles que parecian esta muy bien cuidados. Me invito a subir y ya marchamos por los cminos de la villa.

por Lady Sáb Sep 18, 2010 5:38 pm

Pasaron varios minutos, el viaje desde la banca hasta la villa se había hecho bastante largo y aburrido, puesto que Yeterni no dirigía ni una sola palabra hacia mi, y yo estaba con mucho sueño, a poco y cerraba los ojos mientras venía apoyada en el muro del carruaje, mientras veía por la ventanilla hacia afuera, observando el bello paisaje que en los alrededores de mi hogar no podía ver, puesto que en aquel distrito pobre al otro lado del tiber no tenían muy buena vista a mi manera de pensar. De pronto veo que se detiene el carruaje y escucho la vos de aquella esclava que me habia traido de vuelta.

-Hemos llegado, señorita Lady.-

-De acuerdo, ve a estacionar el carruaje, iré a la habitación de Mauritius a descansar un poco. Cuando acabes traedme por favor algo de beber, de preferencia agua fría y algunas frutas frescas.-

Me baje del móvil y me dirigí directo a la habitación nuevamente. Cerré la puerta con cuidado y me dejé caer en la cama, aquella cama en la que hace poco tiempo había estado con Mauritius, lo había amado. Me dediqué a pensar en él todo ese tiempo, mientras mi mirada permanecía perdida en la nada, con mi rostro dirigido al techo, mientras esperaba a mi amante, quien había salido hace no mucho tiempo.

De pronto vi entrar a Yeterni con algunas frutas y una jarra junto a una copa color plateada en una vandeja tambien de ese color. La dejó en una mesilla que estaba al lado de la cama, y sin decir palabras se marchó. Entonces tomé la jarra y me serví un poco de agua, sentándome en la cama y bebiendo del líquido, mientras pensaba en Mauritius.

Pasaron unos minutos hasta que sentí unos golpes seguidos en la puerta, por lo que me levanté sobresaltada, me dirigí hasta allí y la abrí despacio, allí vi que había un joven, y supuse que debía ser un esclavo, por lo que con la voz fuerte dije:

-¿Quien eres? ¿Que quieres aquí para haber interrumpido mi descanso?-

-Disculpe señorita Lady, me ha enviado el señor Mauritius...- dijo con voz temblorosa.

-¿Mauritius?-

-Si, dijo que le comunique que debe de prepararse, porque quizar tengan visitas, y quiere que se compre de las mejores prendas para lucir elegante para la ocasión... Dijo el señor Mauritius que le diga a Yeterni que le dé el oro a usted, ella sabe donde está, y que no se preocupe por el presio, el señor quiere que sea algo excepcional...-

-¿Que? De acuerdo, acompañame al mercado...-

-Si, señorita...-

Salimos de la habitacion directo hacia el carruaje. No sabia muy bien quien sería ese invitado pero tenía que lucir elegante para aquella ocasion, entonces planeaba ir al mercado.

por Lady Mar Sep 28, 2010 3:37 pm

Ya era un poco más del mediodía, estaba sumamente cansada, ya era la segunda vez que volvía del mercado, ¿Quien me manda a viajar tanto? La realidad era que no tenía ya ganas de salir de esa habitación, por lo menos no hasta que llegase Mauritius, con aquel invitado que había enviado a comunicarme con aquel insignificante esclavo. Pero bueno era cierto que al lado de aquel senador quería llegar a vivir millones de aventuras y viajar mucho, por lo menos era lo que pensaba siempre.

Luego de un suspiro de cansancio, bajé un pie del carruaje para luego descender con mi cuerpo completo, no dije nada a la persona que lo conducía, en mi rostro se veía el agotamiento que llevaba ya de hace un par de horas, por eso nadie de los allí presntes quiso hablarme, igualmente tampoco pretendí que lo hicieran. A paso rápido y sin pensarlo me adentré en la casa, caminando directo por el pasillo para llegar a la habitación de Mauritius. Las ventanas abiertas dejaban pasar el fresco aire que volvaba y hacía danzar las puntas de mi vestido. Eso me hizo recordar que debía cambiarme de vestimentas ya que seguía con aquellas que poseían la mancha de vino de aquel momento en la sobajera cuando me encontraba con Manigoldo.

Tras unos pocos segundos llegué al fondo, tome con una mano la manija y la giré de a poco para abrir la puerta, entré en la habitación, había un aire distinto al del pasillo, estaba algo frío. Cerré la puerta de madera y me adentré en el cuarto. Dejé el vestido nuevo que había comprado, en una pequeña mesilla que estaba en un rincón, y lentamente me saque la ropa que tenía, los pequeños rayos del sol iluminaban por completo mi perfecta figura, mientras me inclinaba un poco para colocarme las nuevas ropas que había traído. Al acabar, tomé el anterior vestido y lo coloqué sobre la cama, para luego sentarme en una silla y tomar con una mano alguna fruta, y comer un poco, mientras seguía esperando.

por Mauritius Vie Oct 08, 2010 10:38 pm

Llegabamos ya hacia mi recamara, que como loco abri la puerta, levemente comenze a besar a lady, y a acariciarle sobre la ropa, caminaba un poco a la direccion de nuestra cama, donde hace unas horas nos habiamos fusionado, piel con piel, cuerpo a cuerpo, la acoste primero y me encime sobre ella, la segui besando jugueteando con su lengua, y acariciando sus senos por encima de su vestido, me detube depsues de unos segundos, y me acoste a su derecha y me quede observando el techo de nuestra habitacion, meti mi mano por sobre su cintura, seguia acariciandola, poco a poco mi mano subia hasta sus cabellos tan solo para juguetear con ellos , y le daba un beso solo en los labios, me hacia tan feliz estar en su presencia.

Lady, por ti suspiro, por ti vivo, por ti soy capaz de entregar mi vida entera, porque eres la persona ideal para entregarte todo el amor y pasión que se desprende de mi cuerpo.

Segui acariciandole al cabello, de pronto me surgio una necesidad, aunque ya habia visto desnuda su piel en la noche anterior, solo con la luna como testigo, ahora queria verla en todo su esplendor, asi podria ver su piel tersa que tanto me habia gustado.

Amor creo que necesito un baño de espuma estar en el senado, con las discusiones y eso me hace sentir un poco sucio, aceptarias tomar el baño conmigo, de paso quisiera poder admirar de nueva cuenta tu piel, sabes que me gustas demasiado - suavemente me levante de la cama, tendi mi mano hacia donde estaba la suya, asi podria saber si ella me acompañaria - si quieres puedes quedarte en la cama, pero te recomiendo mejor que vengas - sonreí, tenia algo pensado por hacerle.

por Lady Sáb Oct 09, 2010 4:36 pm

Rápidamente entramos en la habitación de Mauritius, en la que hace algunas horas habíamos estado ya juntos. Él abrió la puerta y nos adentramos enseguida, para así cerrar la puerta nuevamente, entonces Mauritius comenzó a besarme, a lo que correspondí jugueteando un poco con nuestras leguas. Subí mis manos y apoyé ambas alrededor de su cuello, rozando mis dedos con sus cabellos. Sintiendo las manos de mi amante recorriendo todo mi cuerpo por sobre mi ropa. Enseguida nos acercamos hasta la cama, y él me soltó para apoyarme sobre las sábanas y así apoyarse sobre mi cuerpo para seguir besándonos. Comencé a disfrutar más y mas ese momento, ya me hacía falta, después de tantas horas sola, un momento de amor y cariño con mi querido Mauritius. Luego se detuvo un momento, parecía algo pensativo, pero luego, volví a sentir sus manos en mi cuerpo, eso me excitaba cada vez más, el tan simple hecho de sentir la calidez de sus dedos acariciando mi cuerpo aunque sobre mi ropa.

De pronto, una propuesta salió de la boca de Mauritius, que preguntaba si deseaba tomar un baño junto a él. Entonces se paró extendiendo su mano, ofreciéndome que lo acompañe. Sonreí y de inmediato tomé su mano entre mis finos dedos y me levanté de la cama. Me paré frente a él y me acerqué, abrazándolo.

-Si, amor mio... me encantaría disfrutar de la calidez de un baño junto a tí... acepto acompañarte...- Dije mientras me separaba de él y le tomaba de la mano nuevamente, dirigiéndome junto a él hacia el baño. Ansiaba volver a disfrutar del estar juntos nuestros cuerpos, dándonos calor el uno al otro.

por Mauritius Dom Nov 07, 2010 2:47 pm

Caminaba como un cuerpo sin alma hacia mi cuarto tratando de poder buscar algo que ahi me reconfortara de alguna manera, pensaba que tal vez lady estaria ahi esperandome como siempre lo habia echo en estos dias, pero algo dentro de mi, me decia que habia hecho algo mal, o tan solo las circunstancias habian provocado todo, me acerque ya a mi dormitorio, y abri la puerta, tan solo percartarme que mis mas temidos pensamientos, se estaban haciendo realidad, ella ya no estaba se habia ido, " tal vez se ha ido a alguna parte," pense, pero mire a mi alrededor y no habia nada, sus ropas no estaban y su propia esencia se habia esfumado, despues de el percance en mi baño talvez le dio miedo y se fue.

Tendria sus motivos, y por eso no se habia permitido darme una razon o alguna despedida considerable, tan solo se fue, sin decir adios, una lagrima comenzo a salir de mis ojos, mientras me acercaba a un espejo, cuando vi mi reflejo en el, tan solo via mi propio rostro, culminando la ultima lagrima deslizarse sobre mi mejilla, todo cambio dentro de mi, de pronto senti una rabia que venia de lo mas profundo de mi ser, lanze un golpe hacia aquel objeto que me reflejaba, el golpe hizo que se rompiera al instante, todos los pedazos cayeron al suelo, junto con unas cuantas gotas de sangre de mi mano, estaba sangrando pero no me importaba, mire la cama, donde alguna vez estuve con ella, no sentia mas amor, ahora tan solo estaba con vagas ideas, mi mente solo se nublaba.

Camine un poco mas, y me tire sobre mi cama, mirando fijamente al techo, algo estaba cambiando el panorama, que hacia yo, un senador de roma con una mujer que no era de mi categoria, sentia solo repudio a mi mismo por haberlo hecho, asimile que su partida fue para bien, pestañee por ultima vez, antes de quedarme dormido.

por Mauritius Dom Nov 14, 2010 7:45 pm

Me levante de alguna u otra forma no me sentia con animos de estar en cama tan solo por una mujer, estaba demasido dolido era verdad, mi orgullo varonil estaba por los suelos, pero como dijera un dicho, un clavo saca otro clavo, despues del sueño repuse fuerzas, y asi me comenze a levantar, de las sabanas donde alguna vez estuviera ella, aun conservaban su olor, lo cual hacia que me sintiera mucho mas furioso.

¡¡¡YETERNI!!!!¡¡¡YETERNI!!!! Ven aqui ahorita mismo, grite casi al pensar de que ella no llegaria lo mas rapido posible, mi mano comenzo a arrancar toda la sabana, cobijas y almohadas que estaban en la cama, rasgue cada pedazo de tela e incluso rompi las almohadas, mientras que estas desprendian las plumas que ella yacian,hasta que todo el lugar se lleno de estos objetos, dejando una estela de color blanco por el lugar.

La puerta se abrio, era ella, la ama de llaves, la cual se sorprendio al verme asi, cosa que no me importo, sabia que estaba ahorita un poco desquisiado, lo noto ella en mi mirada, no podia transmitir mas que eso, ¿se suponia que asi deberia ser?, me pregunte pero no tenia alguna respuesta, solo camine hacia ella, y no pude mas, necesitaba desquitarme con algo, o alguien este dolor me estaba consumiendo, la tome de su muñeca con mi mano izquierda, y con la derecha, le di una cachetada en la mejilla, el solo sentir el golpe ella se curvo de dolor, e incluso grito, ese fue el sonido que me desperto de mi somnolencia, la mire a los ojos, ella lloraba un poco, sus ojos estaba acuosos, la solté mientras me retiraba.

Manda a quemar todas las telas que fueron tocada por esa mujer, lady, cuando regrese no quiero tener una esencia de ella en esta cada, ¿me entediste?

Salí sin rumbo fijo, talvez ahora tenia que enfrentarme a mi destino, a alguno de mis hermanos talvez, o ta solo verlo como ahora estaba sintiendo.

por Antonina Vie Dic 10, 2010 7:55 pm

Se hace entrega de un mueble de lujo para el señor de la casa... - Gritó Antonina con sus pesadas botas mientras el resto de sus esclavos acomodaban el mueble en la habitación de Mauritius. Tan rapido como llegaron desaparecieron, dejando el mueble ahi para el uso de su dueño.

Villa Romana de Cambre [Habitación de Mauritius] Bambooshelf

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