[1º Fecha] Aspros vs Khrysis

Aspros de Geminis vs Khrysis Berseker Apocalypse


ESCENARIO - CAMINOS ENTRE LOS CORALES





MODERADOR





Datos de Aspros




Def. 5

HP - 5000

Defensa - Otra Dimensión
(Si tu cosmo supera los 45 puedes devolverle completamente el ataque a tu enemigo por el agujero de gusano, pero no podrás atacar. El enemigo lo recibirá con el mismo rango de ataque que lo mandó y los mismos efectos.)

AD - Ilusión Demoniaca (1000)
(Quien reciba este ataque deberá disminuir su defensa en -5 por tres turnos.)

AM - Estallido Dimensional (1500)
(Quien reciba este ataque deberá descontar -150 de HP el resto del combate por las heridas. Si tu cosmo pasa los 40, tu ataque causará que se deba descontar -250 de HP.)

AF - Explosión de Núcleo (2000)
(El que reciba esta tecnica deberá disminuir -250 de HP hasta el final del combate por las heridas. Si tu cosmo pasa los 45 eliminarás por completo el bonus de defensa de tu enemigo)

Datos de Khrysis




Def. 5

HP - 5000

Defensa - Fire Wall
(Si utilizas esta tecnica efectivamente puedes agregar 4 de cosmo en tu contra ataque.)

AD - Patada flamígera (1000)
(Quien reciba este ataque deberá disminuir -100 de HP hasta finalizar el combate por las quemaduras)

AM - Circulo ígneo (1500)
(Por las quemaduras se deberá disminuir en -200 el HP hasta el final del combate.)

AF - Nube de cenizas (2000)
(Quien reciba esta técnica por el intenso calor deberá disminuir en -2 su bonus de armadura y -300 de HP el resto del combate.)

¿Cual es tu propósito una vez me “mates”? Pregunté con voz calmada mientras extendía mi mano derecha y de este modo, una esfera de Cosmos dorado se extendía rápidamente para dispersar las llamas y alejarlas de mi posición, haciendo que estas empezaran a quemar la enorme negrura del limbo dimensional en el que nos encontrábamos. Al principio te subestimé...pero ahora solo puedo sentir lástima por las pobres ovejas descarriadas como tu. Sin foco, sin concentración y sin centro…literalmente, una cucaracha sin cabeza que se retuerce hasta morir. En tu caso, lo mejor que te puede pasar es abandonar o conseguirte un cerebro. Completé chasqueando los dedos para abrir un portal dimensional a un centímetro de distancia del círculo de flamas que había a mis pies, haciendo que este las consumiera sin falta alguna…de hecho, utilicé ese mismo truco para agrandar la abertura espacio-temporal y hacer que esta se retorciera hasta dividir el “cielo” del limbo en dos y como una aspiradora, hiciera que lo restante del fuego se fuera por allí en un mar de planetas, galaxias y espacio condensado que se amalgamaban unos sobre otros.

Con tan débiles intentos nunca lograrás acabar conmigo, lo siento. comenté por lo bajo esbozando una fugaz sonrisa demencial, dejando que varios mechones frontales me cubrieran los ojos e impidieran que el Berserker notara los rasgos demoníacos que de pronto habían aparecido en tez…no, no debía empezar a mostrar aquella faceta, no por los momentos…sin embargo, no pude dejar de reírme por lo bajo en forma siniestra. Aquella situación me daba risa de una forma macabra…ciertamente, no duraría mucho con mi “seriedad” a flote.

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HP: 2600 – 300 = 2300

El berseker no pudo resistir mostrar una sonrisa burlona ante la pregunta que le planteaba el caballero de Géminis. Lógico, un caballero de oro jamás podría comprender el placer y la satisfacción que tenia un guerrero de Ares al ver a un enemigo derrotado y rogando piedad. Seria algo que nunca podrían entender los de su clase. Observó la forma en la que Aspros evitaba su ataque flamígero, utilizando una vez más sus poderes extraños para llevarse los fuegos del infierno a otro lugar.

Khrysis estaba complacido de ver que su ataque anterior había causado algunas complicaciones en el caballero de Géminis; aunque el peliazul no lo reconociera aún estaba sufriendo las quemaduras en su cuerpo. Eso era suficiente para que el berseker se sintiera animado.

-No espero que un Santo de Athena me entienda. La razón por la que mi deseo de matarte es tan grande es debido a que esto es... una práctica para mí: eres el primer dorado al que enfrento, por lo que contigo podré confirmar si es algo fácil o no vencer a la elite del Santuario de Athena. En otras palabras, sólo me estoy entrenando para futuros retos.-

Dijo, acercándose un poco a Aspros. Las llamas que danzaban continuamente alrededor de sus pies se disipaban en medio de la oscuridad, alumbrando el camino de Khrysis que era el que las hacía arde con pasión, buscando al otro hombre en el abismo. El muchacho se detuvo muy cerca del Santo, y sacando provecho de poder estar tan cerca le robó un beso, en los labios, y luego se relamió, sólo para probar ese sabor.

-Ahora quiero probar tu sangre.- musitó sonriendo perversamente, como una especie de loco al que le excitaba la idea de ver la sangre fluir sin control. Antes de alejarse, el chico pateó el rostro de Aspros con su pierna izquierda, la cual se encontraba revestida con llamas.

El gesto, la expresión y la actitud del Berserker era bastante particular. Ni hablar de cuando se había acercado para posar sus labios sobre los míos y de este modo, dar un ligero y fugaz beso totalmente sorpresivo. Incluso en aquella situación ni siquiera me había movido un solo centímetro, tan solo esperé a que el chiquillo actuara y así pude ver todos los movimientos que realizaba, lo cual se traducía por supuesto, en una patada cubierta de flamas dirigida directamente hacia mi rostro. Ni siquiera me molesté en evadirla ya que el golpe nunca iba a llegar.

Así sucedió. La extremidad del Berserker había sido detenida por una barrera de Cosmos dorado semejante a la superficie de una laguna con ondas causadas por una piedra recién lanzada sobre ella, brillante e impenetrable… un truco simple pero efectivo contra aquellos tipos de ataques. Abriendo de nuevo los ojos y posando los mechones rebeldes en su lugar, tan solo levanté el brazo derecho mientras señalaba hacia la enorme verja que conectaba aquel limbo con el espacio-tiempo amontonados sobre sí mismos en la forma de galaxias, estrellas, planetas, soles y franjas que representaban millones de años luz de recorrido. Con mi cabello agitándose ligeramente por la fuerza gravitatoria que expedía aquella disrupción, le dije al pelirrojo con una voz calmada acompañada de una ligera sonrisa complacida.

Que chico tan atrevido…pero tus modales dejan mucho que desear. Debo admitirlo, esa actitud de rebeldía muestra que has mejorado un poco respecto a lo que te he visto antes. Y tal cual me lo pediste, te mostraré algo digno…considéralo un premio a tu valor. comenté mientras las delgadas y finas líneas luminosas del portal hacia otra dimensión se retorcían y pasaban de ser rectas paralelas para convertirse en una masa que palpitaba con gran energía, comprimiendo a los demás elementos que tuvieran la mala fortuna de acercarse. Pero esto claro, es equivalente a lo que has hecho. No es todo…pero será suficiente para ti. completé, mientras movía mi brazo para señalarlo…de pronto, aquella masa energética descargó toda su potencia explosiva sobre el Berserker en un estallido de luces que en lo mínimo, cegarían a toda una ciudad en cuestión de instantes.

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HP: 2300 – 300 = 2000

Daño: 2000 – 500 (25%) = 1500
Efecto: (El que reciba esta tecnica deberá disminuir -250 de HP hasta el final del combate por las heridas. Si tu cosmo pasa los 45 eliminarás por completo el bonus de defensa de tu enemigo)

La reacción de Aspros no era la esperada por Khrysis, pues se mantuvo calmo y en su centro, sin perturbarse por aquella ligera muestra de afecto. Por lo que había fallado, pues con eso quería sacarlo de quicio como él lo había estado haciendo durante todo la pelea con el joven berseker. El caballero dorado parecía que por fin se iba a tomar las cosas con seriedad, tal y como Khrysis le había estado suplicando desde el momento en el que comenzaron con ese enfrentamiento cuyo ganador aún no se había decidido. El pelirrojo esbozó una sonrisa mientras las llamas de su cuerpo volvían a él, acrecentándose y volviéndose más y más peligrosas.

El fuego de Khrysis no era para nada convencional, pues estaba directamente conectado al berseker, por lo que cualquier emoción del guerrero se manifestaría en su fuego. El chico se estaba entreteniendo muchísimo con el espectáculo visual que el Géminis le estaba ofreciendo a la vista, invocando a todos esos planetas, estrellas, soles y de más objetos titilantes. Un resplandor que molesto su vista consumió la oscuridad, absorbiendo a Khrysis, mas no logró dañarlo.

El astuto Berseker uso una capa de ese fuego tan especial para que el ataque de Aspros fuera como una leve brisa que golpeaba su rostro. Si eso era lo mejor que Aspros podía hacerle, ahora él le parecía decepcionante y comenzaba a sentir lastima por su adversario. -¿Ahora debo ser yo el que sienta lastima por ti?- dijo después de soltar una carcajada. Había evadido el golpe, pero eso no significaba que hubiera ganado el combate todavía.

Después de que la luz cegadora se fuera, la oscuridad regresó a sus ojos. Pero podía ver al caballero gracias a los destellos dorados de su armadura. El muchacho, algo molesto por la pobre muestra de habilidades del peliazul, se acercó otra vez, y teniendo el atrevimiento, volvió a besar los labios de Aspros, pero con una ligera diferencia: mordiendo el labio inferior con fuerza para abrir una abertura pequeña para succionar algo de sangre. Al sentir el líquido vital salir, el chico comenzó a besar la herida con más pasión: sólo así calmaría su lujuria de sangre, probando unas gotas. –Delicioso… Con esto perdono la mediocridad de tu ataque.-

Berserker...¿de verdad creías que eso era todo lo que podía hacer mi técnica? ¿De verdad creías que el poder de los Caballeros Dorados era tan simple? ¿De verdad pensaste que MI poder era tan simple? ¡Craso error! comenté con sorna dejando que el chiquillo hiciera lo que quisiera, después de todo eso no afectaba en nada…un beso, dos besos, una mordida…cosa de insectos ignorantes que pensaban que tales expresiones corporales eran de algún valor…como si de verdad eso fuera suficiente como para hacerme enojar o mover sentimientos en mi cerebro, no, para nada.

En un instante la energía que supuestamente el chiquillo había evitado se revolvió para materializarse de nuevo en varias partículas de luces que se movieron a una velocidad sorprendente, danzando a nuestro alrededor para fusionarse con las flamas que despedía el Berserker con tanto enojo que lo dominaba. En cuestión de segundos las partículas crecieron en tamaño para volverse unas esferas del tamaño de mi puño, volviendo a rodearnos y de un momento a otro se elevaron, chocando con tremenda potencia y de esa forma, hacer que una lluvia de agujas luminosas cayeran sobre el pelirrojo atraídas por la energía que este emanaba…el acto de fusionarse con las llamas no había tenido más propósito que aquel de poder identificar a la víctima para así alcanzarlo donde fuera que esta se encontrara.

De verdad chiquillo…ahora das más pena que nunca. murmuré por lo bajo mientras intentaba contener una sonrisa demoníaca de escapar y expresarse como unas carcajadas descontroladas…pero no, no era el momento ni el lugar, debía contenerme tan solo un poco.

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HP: 2000 – 300 = 1700
Daño: 2000 / 2 = 1000 – 500 (50%) = 500

-Hagamos de cuenta como si me importara...- dijo mientras se reponía. El ataque del Santo de Géminis lo había tomado desprevenido, causándole algo de daño, pero no el suficiente para dejarlo fuera de combate. Sólo había producido ligeros rasguños, poco profundos y que no demorarían en dejar de ser una molestia. Pudo haberlo evitado, pero no quiso hacerlo: El Caballero de Géminis no había podido golpearlo ni una vez, por lo que recibió ese ataque para sentir en carne propia el ataque de un dorado. El cual dejo mucho que desear. El pelirrojo se paró con la espalda recta, sin mostrar la menor seña de debilidad ante el oponente. Aspros no lo iba a ver caído, si alguien iba a ganar ese combate tenia que ser él. Y en cuanto lo hiciera llevaría la cabeza de ese dorado como un trofeo. La verdad era que las palabras del caballero ya le daban lo mismo, entraban por un oído y salían por el otro.

El muchacho miró a Aspros antes de hacer cualquier cosa. Con su lengua repasó sus labios, probando el sabor que había dejado la sangre del guerrero dorado. Cada vez que relamía sentía un deseo incontenible por despedazar al santo y así poder tener acceso a sus entrañas, y bañar su armadura con la sangre de uno de los mejores en el ejército de la Diosa Athena. Khrysis soltó una carcajada mientras colocaba la mano sobre su boca para callar su enérgica risa: -Tú eres mucha palabrería y poca acción, si soy tan patético elimíname de una vez, doradito.- el chico sonrió para su adversario mientras se cruzaba de brazos.-Oye, si te lo pido con insistencia me dejarías ver que hay debajo de esa armadura?... Hahahahahahahaha!!, olvídalo. No sé en qué estoy pensando.- decía mientras bajaba un poco la mirada, apartándola de los ojos de Aspros y pasando a otras partes, con lujuria…

No te acabo por lo que te comenté antes, Berserker. Me das lástima...y si te das cuenta, hasta ahora has mejorado un poco; vas dejando segundo a segundo aquella patética faceta de niño perdedor. Pero sueles recaer en lo mismo. comenté como adición final ante la última frase del soldado del dios de la Guerra Violenta y Sanguinaria. Aunque es curioso...se supone que ustedes los Berserker son los hijos de Ares…no las prostitutas de Afrodita.

Sin dejarle tiempo al chiquillo a que respondiera o que siquiera moviera un músculo, los haces luminosos que lo habían atacado antes volvían a reformarse a nuestro alrededor, creando un enorme anillo dorado que destellaba más y más conforme su velocidad aumentaba. Ahora se podía diferenciar perfectamente la negrura del limbo dimensional en el que nos encontrábamos de aquella verja que doblaba el tiempo-espacio encima de nosotros y además, las delgadas líneas de cosmos comprimido que nos rodeaban… y por ningún lado se vislumbraban las llamas que había recién formado el Berserker, algo importante ya que mi energía las habían consumido totalmente.

Ahora...continuemos. Comprobarás de primera mano como la energía no desaparece así como así, sino que se transforma…gracias por darme suficiente material para que mi técnica continúe funcionando, Berserker pelirrojo cuyo nombre desconozco. ahora, a una velocidad inconcebible los haces de luz se habían expandido y cambiado de dirección: todos se habían levantado cuales serpientes rodeando por cada flanco al enemigo para reunirse en un mismo punto ubicado encima de la cabeza del chico y explotar con una fuerza abrumadora.

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HP: 1700 - 300 = 1400
Daño: 2000 / 2 = 1000
Efecto: (El que reciba esta tecnica deberá disminuir -250 de HP hasta el final del combate por las heridas. Si tu cosmo pasa los 45 eliminarás por completo el bonus de defensa de tu enemigo)

Desde su posición veía que Aspros estaba tramando algo, pero no entendía muy bien qué podría ser. Aún no comprendía cuál era el modo de operar que tenía ese tipo; primero lo provocaba impulsándolo a querer descuartizarlo con su espada, y luego moderaba su poder para causar el daño más mínimo en el cuerpo de Khrysis en lugar de desatar toda la potencia. El muchacho asomó una sonrisa en la comisura de sus labios ante el comentario del Géminis. Estaba por contestar cuando sintió que estaba apunto de ser atacado. Vio que aquellos haces eran la herramienta que el caballero de oro trataba de usar para aniquilarlo.

Podía percibir que era un golpe poderoso, no podía negar que ese nuevo ataque que había sido invocado por el peliazul lo hacía sentir un escalofrío que recorría su espina dorsal. Pero como buen berseker que era no iba a demostrar pánico, y mucho menos expondría debilidad. Khrysis cerró los ojos en un movimiento repentino mientras abría los brazos y esperaba recibir el ataque de Aspros. No veía por dónde venían dirigidos los rayos creados por la energía de Aspros, pero había dejado de sentir el calor de sus llamas, como si hubieran sido devoradas de alguna forma.

Tras terminar de impactar los golpes de la energía sobre su cuerpo, abrió los ojos, sintiendo ardor en su piel, y miró al dorado mientras mostraba una expresión positiva en el rostro. Estaba herido, pero aún podía levantarse y combatir. -Anda, no importa el número de veces que me ataques, yo seguiré perseverando hasta el final. Y mi nombre es Apocalypse, el Berseker de la destrucción total.- le dijo, tratando de no parecer afectado por la técnica del Géminiano.

Apocalypse, eh? Creo que ese nombre suena más bien a un ser mitológico…más que al de un humano común y corriente que porta una Armadura para proteger a un dios…eso quiere decir que directamente estoy hablando con el espíritu que habita ese pedazo de metal rojo. Interesante, aunque creo que en parte, también me interesaría hablar con el chiquillo pelirrojo original…sabes que se siente ser consumido por algo ajeno al propio ser es algo bastante curioso. No te parece así Apocalypse? comenté con voz calmada mientras mi enorme melena azulada se mecía con las últimas ondas de choque que eran disparadas por la explosión que había afectado al Berserker directamente hacía tan solo unos segundos atrás.

Por encima nuestro, aquella abertura espacio-temporal que había abierto seguía retorciéndose y acumulando más y más masa en un solo punto. Ya había consumido todo el poder de ataque de la primera ráfaga…pero eso no implicaba que los embates continuados dejarían de venir uno tras otro…tal vez tardaran un poco más en formarse que otras veces pero al menos eran ataques que eventualmente llegarían después de pasar por un proceso de condensación y acumulación, para finalmente estallar sobre el enemigo. Aunque aquel limbo era la escena de una batalla realmente peligrosa, la calma que ahora proyectaban los combatientes mostraba otra cosa.

Bien Berserker de la Destrucción, continúa mostrándome esa decisión de no ceder. completé mientras mis cabellos se agitaban con fuerza: otro ráfaga de energía se dirigía al pelirrojo para estallar nuevamente y seguir causando daño. Si la voluntad de Apocalypse era tan fuerte como decía ser, aquello no sería un reto.

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Daño: 2000 / 2 = 1000 + 250 (Cosmos) = 1250
HP: 1400 – 300 = 1100

El hombre de era el portador del alma del berseker Apocalypse se mantenía firme, sin caer a pesar de los poderosos ataques del dorado. Pues estaba empecinado en no ser él primero en caer en esa batalla. El único que podría traer la ruina del otro tenia que ser obligatoriamente el Señor de la destrucción total. Las ondas de energía creadas por Aspros seguían condensándose para convertirse en poderosas emisiones que impactarían contra su cuerpo. La armadura estaba manifestando daños, que no eran muy pronunciados pero si comenzaban a volverse más notorios.

Aunque a Khrysis nada de eso parecía importarle en lo absoluto, él era feliz sintiendo dolor, como todo un masoquista, pues consideraba que el dolor era uno de los elementos indispensables en una pelea. El poder emitido era tal que ondeaba los cortos cabellos del berseker, como si se tratara de una brisa que se hacía cada vez más presente. Sus ojos brillaban, siendo como una extraña llama en su interior que estaba siendo visible en el exterior.

-Él y yo ya somos uno mismo, él está aquí, él sigue aquí. Técnicamente yo no lo controlo, simplemente formo una sola entidad con este niño. La mayoría del tiempo estoy ausente y sólo aparezco en el momento decisivo de la batalla. No soy como el resto, supongo.-

No tenía miedo de morir, y tampoco había interés en ganar, sólo quería destruir a ese caballero dorado. Le importaba poco perecer él tambien, pues en sí lo que siempre deseó fue extinguir la vida de un dorado, no había más que eso.

-Por supuesto...- masculló, mientras una mirada que denotaba sadismo acechaba al Caballero de oro.

El negro absoluto del limbo interdimensional en el que nos encontrábamos el Berserker Apocalypse y yo seguía ondulando indiferentemente a las explosiones que me ocupaba de usar para atacar al chiquillo pelirrojo y a las llamas que este empleaba para contraatacarme. Por encima de todo estaba aquella brecha dimensional que por supuesto seguía acumulando poco a poco energía para volver a intentar un embate directo contra el soldado de Ares…por los instantes parecía que no había suficientes reservas para otro estallido cósmico.

Así que eres uno solo con el pelirrojo…eso si es una novedad para la información que tengo de ustedes los Berserkers…según los escritos que se encuentran en la biblioteca del Santuario ustedes se encargan de poseer el cuerpo del humano que más se asemeja a su “huella” mental para así poder emplear al máximo todo su potencial en batalla y así servir a su dios de forma más…eficiente. Pero si lo que dices es cierto, entonces debe ser que tu capacidad es mucho más alta de lo esperado ya que no solo usas la propia que te caracteriza desde la era del mito sino que de paso, usas la habilidad nata del pequeño pelirrojo…interesante, bastante interesante de hecho. dije en forma casi de monólogo, mientras las luces destellantes de la abertura dimensional lograban crear un resplandor que pudo hacer notar perfectamente las ondas negras que conformaban el piso de aquel lugar tan particular y único. Tu turno, Apocalypse.

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HP: 1100 – 300 = 800

Mientras escuchaba las palabras del dorado un aura de fuego volvió a envolver el cuerpo del chico pelirrojo, invocando nuevamente el poder de los fuegos extraídos del mismísimo averno para calcinar a ese caballero que había tenido la resistencia para no quemarse con la flama más poderosa que su cuerpo podía producir. Eso le decía que no seria una labor sencilla hacer que aquel hombre de larga cabellera fuera consumido por su fuego, pero quería asegurarse de hacerlo. Quería quemar cada uno de esos cabellos azules, y ver como la cara burlona de aquel guerrero de Athena se derretía en su mano. El de cabello rojo subió la mirada para ver la distorsión en el espacio, que el Santo de Géminis usaba para atacar con diferentes manifestaciones de su energía.

Bajo la armadura, compuesta por piezas de metal rojizo, había algunos moretones generados por los múltiples impactos que había recibido en su cuerpo. Las motas de luz habían tenido el poder para hacer más que heridas superficiales. No le molestaban, apenas y los estaba sufriendo. Lo que le enfadaba era que aquel hombre hubiera podido tomarse la libertad de atacarlo tan repetidamente en la misma pelea. Él había permitido que lo atacara algunas veces, pero no esperaba que fueran a causar repercusiones como marcas en su cuerpo. Clavó los ojos sobre el Géminiano y le dijo: -Encantado, pero antes me gustaría saber cuál es el nombre de mi rival en este combate.- el joven apretó los puños mientras preparaba la siguiente ofensiva.

Pequeñas explosiones se podían distinguir sobre la capa de fuego que recubría el cuerpo del muchacho, como si las flamas estuvieran chocando violentamente la una contra la otra. Chispas de fuego comenzaron a flotar alrededor del usuario, envolviendo un poco al Santo y girando alrededor del soldado de Ares, mientras los cabellos rebeldes sobre su rostro eran despejados por el cosmos que brotaba de Khrysis.

Aspros de Géminis es tu servidor, mi estimado Berserker Apocalypse. Debo admitir que a pesar de haber sido molesto en un principio, has resultado ser de lo más interesante…tal vez…tal vez incluso serías capaz de alcanzarme aunque sea por un ínfimo instante. dije con voz calmada mientras la fábrica del tiempo espacio se desvanecía y con calma, el limbo interdimensional en el que habíamos estado luchando por ya largo tiempo se perdía, o mejor dicho, éramos nosotros quienes regresábamos a la Atlántida para de nuevo escuchar las voces de la sirenas cantando, ensordeciéndonos e incitando a la violencia. Aunque realmente a mi no me afectaban en lo más mínimo, mi mente era demasiado superior como para dejarme llevar por pequeños y patéticos caprichos de bien pudieran desviar la atención de otros seres…o mejor dicho, de aquellos seres y basuras que se arrastraban por el lodo cual gusanos moribundos.

Dejando eso de lado, los corales resplandecían y de nuevo el color azulado de aquel valle marino nos sorprendía con su belleza. Por un lado me encontraba yo con la melena azul ondeando al viento y el Berserker con su cabello rojizo corto agitándose ligeramente.

Última oportunidad Apocalypse…dame con todo lo que tengas!

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HP: 800 – 300 = 500