[Pueblo en las montañas] - Plataforma en el risco

6to Post Defensa – Especialización

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Bien, ya había logrado hacer lo que el anciano me había indicado incluso mejor de lo que yo mismo me hubiera esperado en primer lugar. Pero las cosas habían empeorado mucho antes de que mi cerebro lo hubiera procesado…en primera, unos cinco cuchillos se dirigían hacia mi a una velocidad en la que evadirlos sería totalmente imposible y segundo, no estaba seguro de poder repetir la proeza que había logrado unos pocos momentos antes, pero si no hacía algo podía considerarme un queso recién hecho, por lo cual tan solo intenté sentir aquel impulso interno que había experimentado antes...cosa que curiosamente logré sin demasiada dificultad y además, fue mucho más fácil y con más intensidad que nunca.

Ah! con una expresión más confiada que antes, posé un pie por detrás mientras que el otro se ubicaba más adelante y usando mi mano derecha para dar un manotón fluido, aparentemente logré repetir el mismo fenómeno que antes: lograr que varias ondas creadas con mi energía interior modificaran el aire para crear una barrera que simplemente desvió los cuchillos en un último momento, absorbiendo el impacto y dejando que estos rebotaran y cayeran al piso como si nunca hubieran sido lanzados precisamente para clavarse en mi delgado cuerpo. Hey...no es tan difícil. murmuré con algo de sorpresa, viéndome la mano enguantada y sintiendo un ligero hormigueo que no resultaba demasiado molesto.

Así es como se hace enano! Solo falta forzarlo un poco más, sigamos! dijo el anciano con fuerza, lanzando una ronda más de cuchillos pero con una diferencia…estos iban mucho más rápido que todos los anteriores y hasta se podía escuchar el vacío que dejaban al cortar el aire. Obviamente, aquel último embate por parte del viejo no iba apoyado en una fuerza convencional sino que parecía que había hecho lo mismo que con la piedra en el lago…los había cargado de aquella energía extraña que se denominaba casma…mosco…o algo así, no lo recordaba bien y realmente, no era el momento de detenerse a pensar en definiciones teniendo una barricada de filosos instrumentos pensados para matar dirigiéndose directamente a mi para volverme un queso.

... sin más que agregar y concentrándome totalmente hice que mis ojos se fijaran en aquellos pedazos de metal, cada centímetro que ocupaban, cada una de sus trayectorias y de pronto lo pude ver: la diminutas ondas del ambiente que rodeaban a los cuchillos, vibrando en una danza casi imperceptible…ahí fue que descubrí la forma precisa de cómo hacer que el ataque fuera bloqueado, ya había descubierto como era que había hecho antes que los proyectiles fueran repelidos. Moviendo el brazo derecho y centrando la energía (cuyo nombre seguía sin recordar) lo flexioné y así modifiqué las ondas que se encontraban en las proximidades de los filosos pedazos de metal, distorsionando la presión de aire para lograr que todo el impulso fuera absorbido y así, estos chocaran, rebotando y de allí al suelo. Había repetido el proceso una tercera vez pero con una gran diferencia por medio: esta vez estaba plenamente consciente de lo que había logrado y mejor aún, sabía como hacerlo si se alzaba la necesidad de repetirlo varias veces más. Creo que ya le tomé el truco…entonces, eso es todo?

Por ahora, sí. Se me acabaron los cuchillos para lanzar y me da pereza recogerlos…además, creo que ya le tomaste el hilo al proceso, no? respondió el viejo mientras mostraba los dientes con una sonrisa algo escalofriante…escalofriante, pero sincera. Por lo visto estaba más que complacido con el extraño resultado en el cual había concluido aquella particular sesión forzada (muy forzada, de hecho) de “entrenamiento”. Y ya me dio hambre, a ti no? Vamos enano…regresemos, te invito a comer.