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Arribo al coliseo
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Arribo al coliseo
Eran mas o menos las tres de la tarde, el calor del mediodia ya habia bajado un poco, el clima no era tan sofocante, Ada caminaba por las calles de la ciudad al lado de Night, no deseaba preguntarle por donde quedaba el coliseo asi que disimuladamente preguntaba a los mercaderes el camino para llegar, La estructura es totalmente imponente, a su alrededor el movimiento de las personas y el ruido era la verdadera escencia del lugar, el sonido de las espadas, provenientes de las practicas de los gladiadores, eran como musica para los oidos de Ada, su apariencia asustaba un poco a los habitantes de Roma y las mujeres murmuraban a sus espaldas, y les respondia con una mirada sumamente intimidante para que estas saliesen corriendo asustadas.
Llegaron hasta la entrada principal del coliseo, debian dirigirse a los encargados del coliseo, los que negociaban los gladiadores, traian las bestian y preparaban todo el espectaculo para la ciudad.
Ada se detuvo antes de ingresar y miro de reojo a Night - Entra o se va? -
Llegaron hasta la entrada principal del coliseo, debian dirigirse a los encargados del coliseo, los que negociaban los gladiadores, traian las bestian y preparaban todo el espectaculo para la ciudad.
Ada se detuvo antes de ingresar y miro de reojo a Night - Entra o se va? -
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
El hombre caminaba detrás de la chica, realmente era algo difícil por su estado actual. Su cuerpo estaba bien, pero su cabeza todavía estaba dando vueltas en algún lugar. El golpe le había movido algo más que las ideas, eso se distinguía a distancia.
Pero todavía con la carga en su cabeza podía andar, por supuesto que chocó con algunas personas durante el camino pero se mantenía dentro del área de Ada, sin perderla de vista. Después de unos minutos el embote se había desvanecido, dejo de ver doble y ya no le dolía al parpadear.
Y hasta ese instante se dio cuenta de lo que había dicho y hecho. Sí, el podía luchar como todo un guerrero, pero el lío era que para hacerlo necesitaba estar concentrado en ello. Después de todo lo que había pasado sus pensamientos estaban dispersos, no podía mantener la mente en algo en específico.
En fin, ya era muy tarde para retractarse. Él era un hombre que nunca retiraba sus palabras tras decirlas, y esa no iba a ser ninguna excepción. No notó como su compañera de aventura se detenía a preguntar la ubicación del Coliseo, él se limitó a seguirle la pista como un cachorro perdido.
Cuando estaban frente a la magnifica estructura en las que se llevaban a cabo los combates sangrientos entre gladiadores para entretenimiento del pueblo romano el chico dudo por una milésima de segundo. Pero cuando Ada le pregunto si continuaría con su suicidio todos esos peros desaparecieron.
-No hace falta que preguntes, te voy a demostrar de lo que estoy hecho.- dijo mientras se internaba en el Coliseo, devolviendole la mirada y dejando atrás a la mujer, ahora era su turno para seguirle el paso.
Pero todavía con la carga en su cabeza podía andar, por supuesto que chocó con algunas personas durante el camino pero se mantenía dentro del área de Ada, sin perderla de vista. Después de unos minutos el embote se había desvanecido, dejo de ver doble y ya no le dolía al parpadear.
Y hasta ese instante se dio cuenta de lo que había dicho y hecho. Sí, el podía luchar como todo un guerrero, pero el lío era que para hacerlo necesitaba estar concentrado en ello. Después de todo lo que había pasado sus pensamientos estaban dispersos, no podía mantener la mente en algo en específico.
En fin, ya era muy tarde para retractarse. Él era un hombre que nunca retiraba sus palabras tras decirlas, y esa no iba a ser ninguna excepción. No notó como su compañera de aventura se detenía a preguntar la ubicación del Coliseo, él se limitó a seguirle la pista como un cachorro perdido.
Cuando estaban frente a la magnifica estructura en las que se llevaban a cabo los combates sangrientos entre gladiadores para entretenimiento del pueblo romano el chico dudo por una milésima de segundo. Pero cuando Ada le pregunto si continuaría con su suicidio todos esos peros desaparecieron.
-No hace falta que preguntes, te voy a demostrar de lo que estoy hecho.- dijo mientras se internaba en el Coliseo, devolviendole la mirada y dejando atrás a la mujer, ahora era su turno para seguirle el paso.
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
Ada sonrio para si misma, el enclenje joven ahora queria demostrar que era todo un fiero guerrero? Ada no pudo soportar la risa, era algo que tenia que ver... aunque el espiritu del joven... en el fondo queria demostrar que era mas y capaz... igual la fuerza de un verdadero guerrero no es solo la mente o el cuerpo es la union de los dos en total armonia, que trabajen en equipo para explotar al maximo el potencial del guerrero y asi nunca conocer la derrota... fue algo que aprendio en Esparta, y es algo que aprende aun dia a dia... los limites de un guerrero estan dados por si mismo, el se los impone el los puede romper.
Ada siguio a Night, habia un peculiar olor en el coliseo, era el olor a la muerte, inconsientemente Ada, se relamia los labios mientras caminaba como si una sed de sangre le dominara, a lo lejos de los pasillos veia a musculosos hombres, que preparaban armas que entrenaban que hablaban entre si, era un ambiente parecido al cual habia crecido y del cual habia escapado, pero que no podia dejar a un lado.
La apariencia de Ada, aunque de lejos podria ser una joven delgaa, debil en realiad encerraba a una fuerte guerrera que no temia a nada ni a nadie solo esperaba un reto para superar y para aprender, no sabia hacer otra cosa mas que luchar asi que si queria sobrevivir debia ganarse la vida y que mejor lugar que el coliseo.
- Ya estamos con el encargado? - Pregunto mientras hacia crujir sus dedos
Ada siguio a Night, habia un peculiar olor en el coliseo, era el olor a la muerte, inconsientemente Ada, se relamia los labios mientras caminaba como si una sed de sangre le dominara, a lo lejos de los pasillos veia a musculosos hombres, que preparaban armas que entrenaban que hablaban entre si, era un ambiente parecido al cual habia crecido y del cual habia escapado, pero que no podia dejar a un lado.
La apariencia de Ada, aunque de lejos podria ser una joven delgaa, debil en realiad encerraba a una fuerte guerrera que no temia a nada ni a nadie solo esperaba un reto para superar y para aprender, no sabia hacer otra cosa mas que luchar asi que si queria sobrevivir debia ganarse la vida y que mejor lugar que el coliseo.
- Ya estamos con el encargado? - Pregunto mientras hacia crujir sus dedos
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
Mientras caminaba no pudo evitar percatarse del arco iris de aromas que flotaban en el aire, olor a sangre, sudor, armas, combate... Todos esos elementos le abrían las puertas a un nuevo escenario ajeno a él. Había estado antes en el coliseo, pero siempre como un espectador y no siendo parte del espectáculo. Cualquiera podría asegurarle que le faltaban un par de tornillos si era tan osado como para entrar en un lugar tan riesgoso, pues ciertamente él no tenía tipo de guerrero.
Pero si alguien le dijera eso él le contestaría que el contenido va más allá de las apariencias, pues aunque quizá su cuerpo lucia esbelto y débil en su interior habitaba un verdadero guerrero, sólo que sus apariciones eran muy escasas. Aunque no pensaba hacer la misma demostración de habilidades que hizo hace un rato, él tenía en mente despertar esa capacidad combativa de la que sabia era poseedor.
Al ver las armas recordó vagamente uno de los entrenamientos que había tenido junto a Magnus, su padre adoptivo lo había instruido bien. Ahora se iba a ver si esas prácticas dieron frutos o sólo fueron una perdida de valioso tiempo que pudo haber sido invertido en algo más productivo.
-Este lugar te trae recuerdos? Puedo ver por la expresión de tu rostro que ya estás muy familiarizada con este ambiente.- preguntó él, aunque era una pregunta bastante estúpida pues ella le había dicho que su única función y lo único que sabia hacer era pelear, así que preguntar algo como eso era redundante. Pero aún así quiso hacerlo, nadie lo detenía. No escuchó lo que Ada dijo, estaba distraido con los cuerpos musculosos que pasaban tan cerca de él mientras se adentraba.
-Y... ¿Qué debo hacer? Yo no tengo experiencia en este tipo de cosas. Sólo he mirado de lejos un par de veces. Ilústrame, tú eres la guerrera aquí.- le dijo a la mujer. Tenía sus dudas y no se las iba a guardar, prefería tener la mente sin nubarrones antes de ejecutar cualquier acción. Pero tal vez dirigirse a su compañera era hablarle a la pared, pues podría ser que no tuviera intenciones de volverlo a ayudar.
Pero si alguien le dijera eso él le contestaría que el contenido va más allá de las apariencias, pues aunque quizá su cuerpo lucia esbelto y débil en su interior habitaba un verdadero guerrero, sólo que sus apariciones eran muy escasas. Aunque no pensaba hacer la misma demostración de habilidades que hizo hace un rato, él tenía en mente despertar esa capacidad combativa de la que sabia era poseedor.
Al ver las armas recordó vagamente uno de los entrenamientos que había tenido junto a Magnus, su padre adoptivo lo había instruido bien. Ahora se iba a ver si esas prácticas dieron frutos o sólo fueron una perdida de valioso tiempo que pudo haber sido invertido en algo más productivo.
-Este lugar te trae recuerdos? Puedo ver por la expresión de tu rostro que ya estás muy familiarizada con este ambiente.- preguntó él, aunque era una pregunta bastante estúpida pues ella le había dicho que su única función y lo único que sabia hacer era pelear, así que preguntar algo como eso era redundante. Pero aún así quiso hacerlo, nadie lo detenía. No escuchó lo que Ada dijo, estaba distraido con los cuerpos musculosos que pasaban tan cerca de él mientras se adentraba.
-Y... ¿Qué debo hacer? Yo no tengo experiencia en este tipo de cosas. Sólo he mirado de lejos un par de veces. Ilústrame, tú eres la guerrera aquí.- le dijo a la mujer. Tenía sus dudas y no se las iba a guardar, prefería tener la mente sin nubarrones antes de ejecutar cualquier acción. Pero tal vez dirigirse a su compañera era hablarle a la pared, pues podría ser que no tuviera intenciones de volverlo a ayudar.
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
Ada estaba perdida en sus pensamientos recordando su niez su entrenamiento en Esparta todo, aunque el recuerdo de su padre le hacia hervir las venas, esta vez se encontraba sumamente calmada.
- Digamos que me recuerda un poco a Esparta - Contesto mientras observaba a su alrededor, respiro profundamente dejando atras esos viejos recuerdos y se concentro en lo que venia a buscar
- Y se suponia que usted era el lider? - sonrio levemente - Bueno, en Esparta los combates entre los gladiadores eran sumamente diferentes a lo que son aca en Roma, las pelea hasta la muerte entre los guerreros era para demostrar su poder y cuanto habia progresado en su entrenamiento de soldado espartano mas no para divertir a un pueblo ignorante que no conoce el arte de la guerra - Ada suspiro - Debe haber un organizador de la arena,busquemoslo... aunque, aun me pregunto si debemos ser esclavos o maleantes para poder ingresar -
Ada ahora tomo el liderazgo y siguio adelante, preguntando a unos gladiadores, por uno de los organizadores de la arena, uno de ellos le indico que le encontrarian en uno de los encargados de organizar los combates en el coliseo.
El hombre al que buscaban era un poco viejo y gordo, tenia una cicatriz en la cara y le altaba un ojo, aquel hombre se encontraba riendo con unos gladiadores cuando Ada y night se acercaron a el, su nombre era Denas, miro extrañado a la chica y al joven.
- Denas? es usted? -
- Asi es... que buscan niños?, se perdieron y necesitan saber cual es la salida? jajajajaja - estallo en una carcajada, la risa del hombre sonaba como la de un cerdo, mientras que Ada miraba con desprecio a aquel sujeto.
- Veo que esto va a ser una perdida de tiempo - le dijo a night - Bueno ya ya... venimos a divertirnos... -
- Los combates en la arena son en unos dias, no hare combates para un par de chiquillos - interrumpio a Ada
- Y quien dijo que queriamos ver? Queremos luchar con un par de sus gladiadores -
- JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA - ahora le dio un ataque de total risa mientras se burlaba de los dos jovenes
Ada miro a night - Y bien... ya me esta desesperando -
- Digamos que me recuerda un poco a Esparta - Contesto mientras observaba a su alrededor, respiro profundamente dejando atras esos viejos recuerdos y se concentro en lo que venia a buscar
- Y se suponia que usted era el lider? - sonrio levemente - Bueno, en Esparta los combates entre los gladiadores eran sumamente diferentes a lo que son aca en Roma, las pelea hasta la muerte entre los guerreros era para demostrar su poder y cuanto habia progresado en su entrenamiento de soldado espartano mas no para divertir a un pueblo ignorante que no conoce el arte de la guerra - Ada suspiro - Debe haber un organizador de la arena,busquemoslo... aunque, aun me pregunto si debemos ser esclavos o maleantes para poder ingresar -
Ada ahora tomo el liderazgo y siguio adelante, preguntando a unos gladiadores, por uno de los organizadores de la arena, uno de ellos le indico que le encontrarian en uno de los encargados de organizar los combates en el coliseo.
El hombre al que buscaban era un poco viejo y gordo, tenia una cicatriz en la cara y le altaba un ojo, aquel hombre se encontraba riendo con unos gladiadores cuando Ada y night se acercaron a el, su nombre era Denas, miro extrañado a la chica y al joven.
- Denas? es usted? -
- Asi es... que buscan niños?, se perdieron y necesitan saber cual es la salida? jajajajaja - estallo en una carcajada, la risa del hombre sonaba como la de un cerdo, mientras que Ada miraba con desprecio a aquel sujeto.
- Veo que esto va a ser una perdida de tiempo - le dijo a night - Bueno ya ya... venimos a divertirnos... -
- Los combates en la arena son en unos dias, no hare combates para un par de chiquillos - interrumpio a Ada
- Y quien dijo que queriamos ver? Queremos luchar con un par de sus gladiadores -
- JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA - ahora le dio un ataque de total risa mientras se burlaba de los dos jovenes
Ada miro a night - Y bien... ya me esta desesperando -
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
-Yo nunca dije que tomaría el liderazgo, no pongas palabras en mi boca.- aclaró mientras seguía observando los interiores del Coliseo romano. El aspecto general del lugar se veía descuidado y con apariencia desordenada, sin ni un sólo toque femenino a la vista. Los gladiadores se veían imponentes, pero no eran nada que él no pudiera controlar.
-Oh, ya veo. Entonces quiero que me enseñes ese "Arte de la guerra", vamos, cambia la percepción que un chico como yo tiene de este tipo de actividades con tu gran sabiduría.- le dijo, aunque era difícil saber si sus palabras estaban limpias o si guardaban un dejo de sarcasmo.
-Eso quiero saber.-
El muchacho no se apartaba de Ada ni un centímetro, lo último que deseaba era perderse en aquel lugar que apenas estaba conociendo. Las cosas eran diferentes en la parte interna a lo que se podía ver desde las gradas. Ambos jóvenes llegaron con un hombre que tenia la fachada de ser el organizador de la arena.
Ada le pregunto al que parecía estár a cargo y éste les respondió diciendo que no pensaba organizar todo sólo para servir como diversión a un par de niños. El chico ladeo la cabeza, ya estaba harto de que lo trataran como un niño, no podía aguantar oír eso tan repetidas veces el mismo día.
Al escuchar la carcajada del organizador no pudo evitar preparar los puños, ni siquiera conocía al sujeto en cuestión pero aún así quería romperle la mandíbula en miles de pedacitos. El joven no pudo contenerse por más tiempo, una vez más había dejado que su cuerpo cediera ante el impulso, soltando un golpe directo al rostro de su oponente, haciendo que sus nudillos se incrustaran en la boca del avejentado, propiciando que el hombre quedara tirado en el piso sin que Night le diera la posibilidad de frenar el impacto. El cuerpo hizo un sonido todavía más fuerte que el del pandillero al que había hecho caer en el Tíber debido a la complexión robusta del caballero.
-Vaya. Al final no eras tan duro como yo pensé. Y bueno, si yo soy un niñito y te pude aplastar fácilmente, ¿entonces tú qué eres?-
Dijo mientras estiraba los dedos de la mano que había utilizado para tumbar al hombre. -¿Qué dices ahora? Te sigue pareciendo que no podemos pelear con algunos de tus gladiadores? O es que tienes miedo de que ellos acaben igual...-
Dijo mientras ponía su pie sobre el pecho del hombre para que éste no pudiera volver a levantarse, ejerciendo presión para torturarlo más de la cuenta.
-Oh, ya veo. Entonces quiero que me enseñes ese "Arte de la guerra", vamos, cambia la percepción que un chico como yo tiene de este tipo de actividades con tu gran sabiduría.- le dijo, aunque era difícil saber si sus palabras estaban limpias o si guardaban un dejo de sarcasmo.
-Eso quiero saber.-
El muchacho no se apartaba de Ada ni un centímetro, lo último que deseaba era perderse en aquel lugar que apenas estaba conociendo. Las cosas eran diferentes en la parte interna a lo que se podía ver desde las gradas. Ambos jóvenes llegaron con un hombre que tenia la fachada de ser el organizador de la arena.
Ada le pregunto al que parecía estár a cargo y éste les respondió diciendo que no pensaba organizar todo sólo para servir como diversión a un par de niños. El chico ladeo la cabeza, ya estaba harto de que lo trataran como un niño, no podía aguantar oír eso tan repetidas veces el mismo día.
Al escuchar la carcajada del organizador no pudo evitar preparar los puños, ni siquiera conocía al sujeto en cuestión pero aún así quería romperle la mandíbula en miles de pedacitos. El joven no pudo contenerse por más tiempo, una vez más había dejado que su cuerpo cediera ante el impulso, soltando un golpe directo al rostro de su oponente, haciendo que sus nudillos se incrustaran en la boca del avejentado, propiciando que el hombre quedara tirado en el piso sin que Night le diera la posibilidad de frenar el impacto. El cuerpo hizo un sonido todavía más fuerte que el del pandillero al que había hecho caer en el Tíber debido a la complexión robusta del caballero.
-Vaya. Al final no eras tan duro como yo pensé. Y bueno, si yo soy un niñito y te pude aplastar fácilmente, ¿entonces tú qué eres?-
Dijo mientras estiraba los dedos de la mano que había utilizado para tumbar al hombre. -¿Qué dices ahora? Te sigue pareciendo que no podemos pelear con algunos de tus gladiadores? O es que tienes miedo de que ellos acaben igual...-
Dijo mientras ponía su pie sobre el pecho del hombre para que éste no pudiera volver a levantarse, ejerciendo presión para torturarlo más de la cuenta.
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
Ada habia sentiro una rafaga de brisa cuando vio tumbado en el piso al organizador de la arena, el hombre que antes se carcajeaba de ella y de su acompañante se quejaba del inmenso dolor que le producia el golpe que.... ¿Nigth? le habia propiciado
"Maldito se me adelanto" sonreia para sus adentros, mientras el joven que no habia soportado las burlas del organizador ahora estaba usando un poco de "persuacion" con el hombre.
Claro la escena no habia sido pasada por alto por los que se encontraban cerca, quienes alertados se dirigieron rapidamente contra los dos jovenes rodeandoles
- Señor Denas!, esta bien?!-
- Chiquillos insolentes! -
- Estan locos! -
- Malditos se arrepentiran!-
Era lo que exclamaban los hombres alrededor de Ada y Nigth, eran mas pero parecia no preocuparle a la joven, Denas paso su mano por su rostro, la sangre de su nariz brotaba y su enojo era evidente
- MALDITO MOCOSO QUITESE!!!!! - un gladiador empujo a Night, mientras que otros dos ayudaban a levantarse al organizador mientras le acercaban una toalla para que contuviese la hemorragia y para limpiar su rostro.
Los hombres a su alrededor solo esperaban la orden para atacar, de esa no saldrian vivos los dos muchachos, pero Denas se mantuvo unos instantes en silencio y a pesar del dolor una frivola sonrisa se dibujo en su rostro
- Llevenlos al centro del coliseo... si los mocosos quieren pelear... eso tendran! - los gladiadores alrededor de Genas sonreian... sabian que se divertirian con los muchachos... ademas si entraron en busqueda de pelea no tendran ningun problema cuando les preguntes por que aparecieron muertos en el coliseo... o simplemente que hayan desaparecido en sus instalaciones.
Ada no decia absolutamente nada, sus ojos demoestraban que se divertia viendo las acciones a su alrededor, lo esperaba y no sentia el mas minimo miedo por lo que podia pasar no expresaba eso.
Los muchachos fueron conducidos por unos pasillos subterraneos solamente alumbrados por la debil luz de algunas antorchas, era un lugar con un olor fuerte y un ambiente humedo, desagradable mientras se acostumbraba, los chicos fueron conducidos hasta una plataforma la cual era elevadiza, lo mas seguro para entrar a la arena, Genas estaba muy confiado, sonriente por que disfrutaria el espectaculo de ver a ese despreciable niño muerto, y asi se vengaria por el golpe que le habia propinado
- Seran elevados a la gran arena del coliseo... ja... - se contuvo el comentario mientras se alejaba en cuestion de minutos todo estaria listo para lo que venian a buscar finalmente les seria dado
- Y bien... alguna espectativa para este combate? - Ada rompio el silencio que habia mantenido por algunos minutos
"Maldito se me adelanto" sonreia para sus adentros, mientras el joven que no habia soportado las burlas del organizador ahora estaba usando un poco de "persuacion" con el hombre.
Claro la escena no habia sido pasada por alto por los que se encontraban cerca, quienes alertados se dirigieron rapidamente contra los dos jovenes rodeandoles
- Señor Denas!, esta bien?!-
- Chiquillos insolentes! -
- Estan locos! -
- Malditos se arrepentiran!-
Era lo que exclamaban los hombres alrededor de Ada y Nigth, eran mas pero parecia no preocuparle a la joven, Denas paso su mano por su rostro, la sangre de su nariz brotaba y su enojo era evidente
- MALDITO MOCOSO QUITESE!!!!! - un gladiador empujo a Night, mientras que otros dos ayudaban a levantarse al organizador mientras le acercaban una toalla para que contuviese la hemorragia y para limpiar su rostro.
Los hombres a su alrededor solo esperaban la orden para atacar, de esa no saldrian vivos los dos muchachos, pero Denas se mantuvo unos instantes en silencio y a pesar del dolor una frivola sonrisa se dibujo en su rostro
- Llevenlos al centro del coliseo... si los mocosos quieren pelear... eso tendran! - los gladiadores alrededor de Genas sonreian... sabian que se divertirian con los muchachos... ademas si entraron en busqueda de pelea no tendran ningun problema cuando les preguntes por que aparecieron muertos en el coliseo... o simplemente que hayan desaparecido en sus instalaciones.
Ada no decia absolutamente nada, sus ojos demoestraban que se divertia viendo las acciones a su alrededor, lo esperaba y no sentia el mas minimo miedo por lo que podia pasar no expresaba eso.
Los muchachos fueron conducidos por unos pasillos subterraneos solamente alumbrados por la debil luz de algunas antorchas, era un lugar con un olor fuerte y un ambiente humedo, desagradable mientras se acostumbraba, los chicos fueron conducidos hasta una plataforma la cual era elevadiza, lo mas seguro para entrar a la arena, Genas estaba muy confiado, sonriente por que disfrutaria el espectaculo de ver a ese despreciable niño muerto, y asi se vengaria por el golpe que le habia propinado
- Seran elevados a la gran arena del coliseo... ja... - se contuvo el comentario mientras se alejaba en cuestion de minutos todo estaria listo para lo que venian a buscar finalmente les seria dado
- Y bien... alguna espectativa para este combate? - Ada rompio el silencio que habia mantenido por algunos minutos
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
El chico se miraba mucho más decidido que cuando puso el primer pie en la entrada del Coliseo, ese pequeño contratiempo había sido la manera perfecta de alentarlo para querer romperle un par de huesos a cualquiera que le pusieran enfrente para combatir. Un hombre llegó y lo empujó así como si nada, haciendo que Night estuviera apunto de perder la estabilidad, pero pudo poner un pie adelante para mantenerse arriba.
A sus oídos llegaron las quejas de los hombres que se habían congregado a su alrededor. Night volvió a esbozar una sonrisa amistosa en su rostro, pero por la expresión de sus orbes carmesí se podía saber que el joven estaba verdaderamente furioso por el breve intercambio de palabras que tuvieron con Sema.
-No es problema mio que el Señor Sema sea un perdedor...- musitó mientras azotaba a los hombres derredor con sus ojos rojos como la sangre. La mirada del joven, penetrante y amenazadora no era algo que pudiera pasarse por alto. Se estaba buscando problemas, o mejor dicho estaba intentando atraerlos hacia él. Quería ver cuál era el nivel de pelea que poseían aquellos gladiadores, ver si en verdad tenían capacidades de lucha o, confirmar de una vez por todas que sólo eran músculos con cabeza.
Por la forma en la que su compañera contemplaba la situación se estaba divirtiendo bastante, pero quizá no tanto como él. Siempre le pareció divertido el modo en el que solían reaccionar las personas como Sema.
Los muchachos fueron llevados por un pasillo subterráneo, el lugar estaba hundido en una profunda oscuridad que sólo era disipada por la luz que producían unas antorchas en las paredes. Era emocionante, se preguntaba si podía agarrarle el gusto a ese tipo de practicas al salir victorioso de su primer combate en el coliseo Romano.
-Ninguna... Pero promete ser interesante. Supongo.- dijo en respuesta al comentario de Ada mientras se preparaba para subir. En su mano izquierda empuñaba una espada y en la derecha un escudo, los había tomado en la oscuridad.
A sus oídos llegaron las quejas de los hombres que se habían congregado a su alrededor. Night volvió a esbozar una sonrisa amistosa en su rostro, pero por la expresión de sus orbes carmesí se podía saber que el joven estaba verdaderamente furioso por el breve intercambio de palabras que tuvieron con Sema.
-No es problema mio que el Señor Sema sea un perdedor...- musitó mientras azotaba a los hombres derredor con sus ojos rojos como la sangre. La mirada del joven, penetrante y amenazadora no era algo que pudiera pasarse por alto. Se estaba buscando problemas, o mejor dicho estaba intentando atraerlos hacia él. Quería ver cuál era el nivel de pelea que poseían aquellos gladiadores, ver si en verdad tenían capacidades de lucha o, confirmar de una vez por todas que sólo eran músculos con cabeza.
Por la forma en la que su compañera contemplaba la situación se estaba divirtiendo bastante, pero quizá no tanto como él. Siempre le pareció divertido el modo en el que solían reaccionar las personas como Sema.
Los muchachos fueron llevados por un pasillo subterráneo, el lugar estaba hundido en una profunda oscuridad que sólo era disipada por la luz que producían unas antorchas en las paredes. Era emocionante, se preguntaba si podía agarrarle el gusto a ese tipo de practicas al salir victorioso de su primer combate en el coliseo Romano.
-Ninguna... Pero promete ser interesante. Supongo.- dijo en respuesta al comentario de Ada mientras se preparaba para subir. En su mano izquierda empuñaba una espada y en la derecha un escudo, los había tomado en la oscuridad.
Última edición por Night el Mar Dic 14, 2010 8:31 pm, editado 2 veces
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
La oscuridad se acabo cuando los rayos de luz entraron por todo el lugar mientras el techo se abria y la plataforma subia lentamente, unos instantes de ceguera absoluta acompañaron a Ada mientras sus ojos se acostumbraban nuevamente a la luz del sol, la suave brisa levantaba poco a poco la arena, el sol fijo en el cielo era como un imponente espectador que calentaba el ambiente, todo a su alrededor se tornaba seco, arido, Ada observo la imponente arena, era muy grande mas de lo que esperaba, se sentia de cierto modo a gusto... se relamia los labios con cierta emocion esperando a lo que iba a suceder.... era simplemente imponente, la estructura del coliseo las gradas... Ada sentia como si el sonido de un publico que le ovacionara, era algo que no sentia desde el dia... en que se habia encargado de su padre...
En una de las gradas se encontraba Genas, con una risa de satisfaccion y seguridad, acompañado de un par de guardias, esperando que los dos jovenes no sobrevivieran de las sorpresas que les tenia preparadas, con un leve gesto de su cabeza, del suelo aparecieron un par de gladiadores, con su armadura armados con espadas y escudos. Aa habia notado que Night habia tomado un par de armas, pero ella no habia tomado absolutamente nada, no las necesitaba (o eso pensaba) se quito su tunica, su aspecto era imponenete, parecida a un gladiador, sus largos cabellos rojos brillaban con los rayos del sol, dandole un tinte a la sangre, esxtendio sus brazos adornador por unas marcas como si fuesen fuego e hizo crujir sus dedos, estaba lista para lo que venia.
Los dos enemigos rodearon a los jovenes uno de los gladiadores poseia una red y una espada y tenia su cabeza protegida por un yelmo que no dejaba ver su rostro, el otro gladiador empuñaba una espada y un escudo, su armadura parecia mas pesada y que le brindaba mas proteccion, daban vueltas alrededor de los dos jovenes esperando el momento perfecto para atacar.
En una de las gradas se encontraba Genas, con una risa de satisfaccion y seguridad, acompañado de un par de guardias, esperando que los dos jovenes no sobrevivieran de las sorpresas que les tenia preparadas, con un leve gesto de su cabeza, del suelo aparecieron un par de gladiadores, con su armadura armados con espadas y escudos. Aa habia notado que Night habia tomado un par de armas, pero ella no habia tomado absolutamente nada, no las necesitaba (o eso pensaba) se quito su tunica, su aspecto era imponenete, parecida a un gladiador, sus largos cabellos rojos brillaban con los rayos del sol, dandole un tinte a la sangre, esxtendio sus brazos adornador por unas marcas como si fuesen fuego e hizo crujir sus dedos, estaba lista para lo que venia.
Los dos enemigos rodearon a los jovenes uno de los gladiadores poseia una red y una espada y tenia su cabeza protegida por un yelmo que no dejaba ver su rostro, el otro gladiador empuñaba una espada y un escudo, su armadura parecia mas pesada y que le brindaba mas proteccion, daban vueltas alrededor de los dos jovenes esperando el momento perfecto para atacar.
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
Night tenía una extraña mezcla entre adrenalina y nerviosismo. Por un lado había sido absorbido por su deseo de lucha y el de demostrar que podía ser el mejor guerrero, pero ya no sabia si se lo quería probar a Ada o a sí mismo. Miró la espada que tenia en la mano, ya había olvidado lo que se sentía portar un arma. Poseer esa espada le brindaba una sensación de seguridad, como si nada pudiera volver a tocarlo nunca, protegido por el filo de aquella pieza.
Esa seguridad que le transmitía el objeto era impresionante, de pronto sentía que era capaz de despedazar a todos los tipos que se le pusieran enfrente. -Pidan su número. Ninguno saldrá aquí con todas las partes de su cuerpo en su lugar.- dijo con una sonrisa perversa, cargada de malicia y con un tono tétrico. De pronto se estaba transformando en otra persona, un ser sanguinario que jamás quiso dejar escapar de su jaula.
Pero ya era muy tarde para darse la vuelta y cruzar las puertas del Coliseo como si nada, desde las gradas podía ver la burla en la cara de Sema, quien sonreía como un imbécil que tenia todas las de ganar. -Ja! ¡Para la mala suerte de ese tipo tan asqueroso, esas sonrisas no se le ven nada bien!- masculló a modo de burla hacia el que quería verlo muerto.
Los gladiadores estaban esperándolo, a él y a Ada quien se encontraba a su lado. Parecían unos perros que intentaban abalanzarse sobre un trozo de carne fresca, pero no lo tendrían fácil, no, eso era definitivo. -¿Les gusto? Dejen de estarme lanzando miraditas y comiencen a pelear, par de animales estúpidos!- dijo para encender el fuego. Uno de los matones de Sema, el que parecía carecer de cordura por la expresión rabiosa de su cara, recibió el insulto del chico y ahora pretendía cumplir con las órdenes del organizador. Aniquilar al mocoso.
Night miro de reojo a Ada, podía ver que él estaba bien equipado para la batalla pero ella no. Podría tratarse de una imprudencia, pero ella sabia lo que estaba haciendo. El hombre que tenia el ojo sobre Night desde el comienzo de la batalla decidió cerrarle la boca al joven de una vez, o al menos eso parecía por la forma atrabancada en la que el guerrero se lanzaba sobre él.
Levantó su espada con todas las intenciones de herirlo, pero antes de que la espada lo tocara Night pudo colocar su escudo para que el arma no lo rozara si quiera. -Si esto es lo mejor que puedes hacer no me sirves ni para calentar.- dijo mientras lo empujaba con su escudo de forma violenta para apartar la espada y luego aprovecharse de la corta distancia que había entre ambos para propinarle un buen corte en su brazo, una de las secciones que no estaban cubiertas por la armadura. -Aún quieres jugar conmigo, perro desagradable?.-
Esa seguridad que le transmitía el objeto era impresionante, de pronto sentía que era capaz de despedazar a todos los tipos que se le pusieran enfrente. -Pidan su número. Ninguno saldrá aquí con todas las partes de su cuerpo en su lugar.- dijo con una sonrisa perversa, cargada de malicia y con un tono tétrico. De pronto se estaba transformando en otra persona, un ser sanguinario que jamás quiso dejar escapar de su jaula.
Pero ya era muy tarde para darse la vuelta y cruzar las puertas del Coliseo como si nada, desde las gradas podía ver la burla en la cara de Sema, quien sonreía como un imbécil que tenia todas las de ganar. -Ja! ¡Para la mala suerte de ese tipo tan asqueroso, esas sonrisas no se le ven nada bien!- masculló a modo de burla hacia el que quería verlo muerto.
Los gladiadores estaban esperándolo, a él y a Ada quien se encontraba a su lado. Parecían unos perros que intentaban abalanzarse sobre un trozo de carne fresca, pero no lo tendrían fácil, no, eso era definitivo. -¿Les gusto? Dejen de estarme lanzando miraditas y comiencen a pelear, par de animales estúpidos!- dijo para encender el fuego. Uno de los matones de Sema, el que parecía carecer de cordura por la expresión rabiosa de su cara, recibió el insulto del chico y ahora pretendía cumplir con las órdenes del organizador. Aniquilar al mocoso.
Night miro de reojo a Ada, podía ver que él estaba bien equipado para la batalla pero ella no. Podría tratarse de una imprudencia, pero ella sabia lo que estaba haciendo. El hombre que tenia el ojo sobre Night desde el comienzo de la batalla decidió cerrarle la boca al joven de una vez, o al menos eso parecía por la forma atrabancada en la que el guerrero se lanzaba sobre él.
Levantó su espada con todas las intenciones de herirlo, pero antes de que la espada lo tocara Night pudo colocar su escudo para que el arma no lo rozara si quiera. -Si esto es lo mejor que puedes hacer no me sirves ni para calentar.- dijo mientras lo empujaba con su escudo de forma violenta para apartar la espada y luego aprovecharse de la corta distancia que había entre ambos para propinarle un buen corte en su brazo, una de las secciones que no estaban cubiertas por la armadura. -Aún quieres jugar conmigo, perro desagradable?.-
Última edición por Night el Mar Dic 14, 2010 8:32 pm, editado 1 vez
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
El mundo alrededor de Ada desaparecio, solo existia ella y su contendiente, aque gladiador con la extraña mascara que empuñaba una espada en su mano derecha y una red en su mano derecha, la mirada despreocupada de la joven habia cambiado, ahora estaba totalmente fija en su contrincante, empezaron a caminar, alejandose de los otros dos que ya combatian, la respiracion de Ada era mas lenta, conforme a sus movimientos, analizaba a su oponente, olia su miedo, su confianza, su sed de sangre, en un instante los dos se detuvieron, una suave brisa levanto un poco de arena e hizo que los rojizos cabellos de Ada revolotearan un poco.
Los dos, al mismo tiempo, arremetieron el uno contra el otro, pareceria un suicidio que la joven sin armas se enfrentara a aquel gladiador, pero no lo veia necesario, el gladiador ataco primero, mando un espadazo con todas sus fuerzas hacia la mujer, esta lo esquivo a pocos centimetros, unos cabellos cortado calleron sobre la arena, nuevamente levanto su espada, arremetia con brutal fuerza y agilidad, Ada esquivaba los ataques, bajando su cabeza, ladeando su cuerpo, saltando, era una embestida brutal, pero que aun no le habia causado daño
- Solo sabe esquivar! - exclamo el gladiador en tono burlon
- Claro que no! - respondio con una sonrisa Ada
Ada aprovecho el descuido del Gladiador, con todas sus fuerzas le mando un puño al estomago, este fue contundente, hizo que el hombre diese unos pasos hacia atras y tuviese que apoyarse en su espada para recuperar el aire, pero Ada no le dio tiempo para reaccionar, una fuerte patada que acerto en su mandibula lo hizo volar y lo mando unos metros atras, el hombre estaba tumbado en el piso escupiendo sangre por la boca, y un par de dientes, se levanto, enardecido, totalmente enojado y furioso.
- Perra desgraciada!!!!!!!!!!! - exclamo el hombre con enojo
Ada aun sonreia y volvia a concentrarse, esperando las arremetidas de aquel hombre con la espada, ora vez habia encontrado su defensa baja, Ada apoyo sus manos en el piso, bajo su cuerpo, usando sus piernas tumbo al hombre haciendole perder el equilibrio golpeando las piernas de el, habia caido nuevamente al piso y Ada se acercaba para terminar todo, pero el gladiador usaria todos los medios, absolutamente todos... para vencer.
Tomando un puñado de arena, y esperando que Ada estuviese lo suficientemente cerca se lo mando a los ojos dejandola ciega unos instantes, paorcecho y le mando la red de acero encima, Ada cayo al piso, desorientada y recuperando la vista, mientras aquel gladiador reunia fuerzas para acabar con ese pobre cordero aprisionado
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
El chico podía apreciar claramente la mirada de rabia que el Gladiador pretendía usar para intimidarlo, pero a él eso no le atemorizaba ni un poco. El hombre al que le tocaba enfrentarse le recordaba vagamente a un mastodonte con el que tuvo una pelea de practica en el pasado, según recordaba fue una lección sobre como empuñar y utilizar una espada. Si su memoria no le estaba jugando una mala pasada, aquel día había invalidado a un chico de por vida.
Lamentablemente, aquel hombre tendría que transitar el mismo camino que su compañero de entrenamientos. El joven ladeó la cabeza para que ésta diera hacia las gradas, quería ver cuál era el sentimiento que embargaba el rostro de su enemigo, ver si estaba frustrado por que ninguno de sus hombres pudo cortarle ni un sólo cabello.
Podría estar apresurando los hechos, pero para él ese combate ya tenia a un campeón bien definido. Ese inútil que se le había arrojado como un salvaje resulto ser nada más que una simple diversión mientras esperaba a que Sema le mostrara a su mejor gladiador, quería comenzar a cortar carne de calidad y no la de esos rivales que parecían ser tan poca cosa.
Night estaba más que confiado en sí mismo, casi podría tachársele de arrogante al ni siquiera dedicar un poco de tiempo a observar las acciones de su oponente y estar enteramente concentrado en ufanarse por el sufrimiento ajeno.
-Ningún chiquillo me va a hacer quedar como un inútil ¡Muere!- dijo, esas habían sido las únicas palabras que escuchó de su oponente en todo el transcurso de la batalla.
El gladiador arremetió como una bestia estúpida contra Night, pero el habilidoso joven pudo verlo venir y antes de que éste pudiera rasguñarlo con la espada, se movió ligeramente hacia la izquierda, evitando así el contacto directo con el arma y por lo tanto neutralizando el posible daño.
-Creo que es mi turno...- musitó con una sonrisa, pues el gladiador había dejado un hueco en su defensa. Mientras se concentraba en su ataque fallido el joven saco lo mejor de la situación y aprovecho para patearlo en la cara, logrando que el casco que protegía la cabeza del hombre saliera rodando, y cuando tuvo al enemigo a su merced regreso su pierna y uso su espada en un movimiento contiguo para rebanarle la oreja. La sangre del gladiador maquilló el rostro del Night, era como una prueba que confirmaba que no era un niño debilucho. De pronto el hombre de Sema se encontraba muriendo de dolor frente a sus ojos. -Te haces llamar un Gladiador? Sólo es una oreja, ya superalo... - le dijo sin sentir compasión algún, tratando de obligarlo a levantarse y siguiera batallando contra él.
Lamentablemente, aquel hombre tendría que transitar el mismo camino que su compañero de entrenamientos. El joven ladeó la cabeza para que ésta diera hacia las gradas, quería ver cuál era el sentimiento que embargaba el rostro de su enemigo, ver si estaba frustrado por que ninguno de sus hombres pudo cortarle ni un sólo cabello.
Podría estar apresurando los hechos, pero para él ese combate ya tenia a un campeón bien definido. Ese inútil que se le había arrojado como un salvaje resulto ser nada más que una simple diversión mientras esperaba a que Sema le mostrara a su mejor gladiador, quería comenzar a cortar carne de calidad y no la de esos rivales que parecían ser tan poca cosa.
Night estaba más que confiado en sí mismo, casi podría tachársele de arrogante al ni siquiera dedicar un poco de tiempo a observar las acciones de su oponente y estar enteramente concentrado en ufanarse por el sufrimiento ajeno.
-Ningún chiquillo me va a hacer quedar como un inútil ¡Muere!- dijo, esas habían sido las únicas palabras que escuchó de su oponente en todo el transcurso de la batalla.
El gladiador arremetió como una bestia estúpida contra Night, pero el habilidoso joven pudo verlo venir y antes de que éste pudiera rasguñarlo con la espada, se movió ligeramente hacia la izquierda, evitando así el contacto directo con el arma y por lo tanto neutralizando el posible daño.
-Creo que es mi turno...- musitó con una sonrisa, pues el gladiador había dejado un hueco en su defensa. Mientras se concentraba en su ataque fallido el joven saco lo mejor de la situación y aprovecho para patearlo en la cara, logrando que el casco que protegía la cabeza del hombre saliera rodando, y cuando tuvo al enemigo a su merced regreso su pierna y uso su espada en un movimiento contiguo para rebanarle la oreja. La sangre del gladiador maquilló el rostro del Night, era como una prueba que confirmaba que no era un niño debilucho. De pronto el hombre de Sema se encontraba muriendo de dolor frente a sus ojos. -Te haces llamar un Gladiador? Sólo es una oreja, ya superalo... - le dijo sin sentir compasión algún, tratando de obligarlo a levantarse y siguiera batallando contra él.
Última edición por Night el Mar Dic 14, 2010 8:33 pm, editado 1 vez
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
En un instante el gladiador que tenia enfrente se desaparecio ante mis ojos, asi mismo como el piso el coliseo todo, habia perdido por instantes la vista, sentia como si mis ojos me ardieran y pequeñas sucieades estuviesen en estos
- maldito bastardo - fue lo unico que pense... los gladiadores eran habiles, pero mas que nada sucios y tramposos, aque hombre me habia lanzado un puñado de arena cuando ya triunfar, me acercaba a darle el golpe final... pero acaso eso me sorprendia? Claro que no, tras años de entrenamiento en Esparta, me habia enseñado a esperar cualquier cosa, cualquier treta cualquier truco, tal vez baje la guardia, un poco, un leve error mas no mortal, pero habia otra cosa a favor de mi contrincante, la red metalica que llevaba consigo, aquel hombre no dudo ni un segundo en lanzarmela, obviamente cai al piso, atrapada por aquel objeto.
Para muchos aquella desventaja significaba la muerte, para mi solo un obstaculo mas para sobrepasar, aquel hombre se habia recuperado del golpe que le habia dado, aunque segia escupiendo sangre ya que le habia roto la mandibula, el hombre se acercaba con el deseo de total venganza hacia mi, habia recuperado mi vista y ahora le veia venir, realmente aquella red era un problema, el gladiador levanto su espada y con todas fuerzas arremetio contra mi, en el piso lo unico que podia hacer era girar y eso hize, gire hacia la derecha mientras aquella espada se queaba incrustada en el piso de la arena, intente romper la red en los pocos segundos que me daba el gladiador pero esto al parecer era imposible, debia hallar la forma de quitarmela de encima pero al girar en el piso solo habia causado que esta en mi pies se enredara mas.
Una gota de sudor caia por mi frente, el sol y el calor de la arena hacian que me sintiese aun mas incomoda alli atrapada, el gladiador nuevamente emprendio contra mi pero esta fue mas astuto, mando una patada a mi estomago la cual no pude esquivar y me dejo aun mas indefensa de lo que ya estaba, la espada esta vez no fallaria... pero asi lo hizo, nunca seria capaz de rendirme ante las adversidades... habia estado en situaciones peores y no caeria esta vez no, un calor inmenso senti en mi espalda, el roce de la espada habia hecho una ligera herida nada para preocuparse, pero si no me liberaba rapido podria ser peor, la espada habia sido capaz de cortar aquella red, lo senti cuando gire mi brazo para sentir cuan profunda habia sido la cortadura, levante mis piernas y empuje a aque gladiador dandole un golpe en el estomago, era el momento de aprovechar la fuerza del enemigo a mi favor.
Tome la red entre mis manos y la puse frente a mi, extendiendole lo mas que podia, nuevamente el gladiador ataco, esta vez no tocaria su espada mi cuerpo, nunca mas, otra vez usando mis piernas para protegerme del enemigo permiti que este mandara el ataque de su espada, pero use mis piernas para mandarle hacia atras lo suficiente para no herrirme, pero tambien para que no perdiese fuerza y cortase aquella red.
mi oponente sabia que era lo que hacia, embistio rapidamente hacia mi, pero era demasiado tarde, ya me habia escapado de aquella trampa mortal, tome la red entre mis manos, mi prision seria mi nueva arma, el gladiador empuño l espada con sus dos manos y mando un fuerte espadazo contra mi, pero poseia aquella red la cual habia envuelto entre mis manos y la use para parar el ataque de aquella espada, esta se detuvo antes de tocar mi hombro, luego use toda mi fuerza para alejarle de mi, sentia como la sangre me hervia como algo palpitaba en mi... como si un nuevo yo deseara despedazar a aquel hombre
- maldito bastardo - fue lo unico que pense... los gladiadores eran habiles, pero mas que nada sucios y tramposos, aque hombre me habia lanzado un puñado de arena cuando ya triunfar, me acercaba a darle el golpe final... pero acaso eso me sorprendia? Claro que no, tras años de entrenamiento en Esparta, me habia enseñado a esperar cualquier cosa, cualquier treta cualquier truco, tal vez baje la guardia, un poco, un leve error mas no mortal, pero habia otra cosa a favor de mi contrincante, la red metalica que llevaba consigo, aquel hombre no dudo ni un segundo en lanzarmela, obviamente cai al piso, atrapada por aquel objeto.
Para muchos aquella desventaja significaba la muerte, para mi solo un obstaculo mas para sobrepasar, aquel hombre se habia recuperado del golpe que le habia dado, aunque segia escupiendo sangre ya que le habia roto la mandibula, el hombre se acercaba con el deseo de total venganza hacia mi, habia recuperado mi vista y ahora le veia venir, realmente aquella red era un problema, el gladiador levanto su espada y con todas fuerzas arremetio contra mi, en el piso lo unico que podia hacer era girar y eso hize, gire hacia la derecha mientras aquella espada se queaba incrustada en el piso de la arena, intente romper la red en los pocos segundos que me daba el gladiador pero esto al parecer era imposible, debia hallar la forma de quitarmela de encima pero al girar en el piso solo habia causado que esta en mi pies se enredara mas.
Una gota de sudor caia por mi frente, el sol y el calor de la arena hacian que me sintiese aun mas incomoda alli atrapada, el gladiador nuevamente emprendio contra mi pero esta fue mas astuto, mando una patada a mi estomago la cual no pude esquivar y me dejo aun mas indefensa de lo que ya estaba, la espada esta vez no fallaria... pero asi lo hizo, nunca seria capaz de rendirme ante las adversidades... habia estado en situaciones peores y no caeria esta vez no, un calor inmenso senti en mi espalda, el roce de la espada habia hecho una ligera herida nada para preocuparse, pero si no me liberaba rapido podria ser peor, la espada habia sido capaz de cortar aquella red, lo senti cuando gire mi brazo para sentir cuan profunda habia sido la cortadura, levante mis piernas y empuje a aque gladiador dandole un golpe en el estomago, era el momento de aprovechar la fuerza del enemigo a mi favor.
Tome la red entre mis manos y la puse frente a mi, extendiendole lo mas que podia, nuevamente el gladiador ataco, esta vez no tocaria su espada mi cuerpo, nunca mas, otra vez usando mis piernas para protegerme del enemigo permiti que este mandara el ataque de su espada, pero use mis piernas para mandarle hacia atras lo suficiente para no herrirme, pero tambien para que no perdiese fuerza y cortase aquella red.
mi oponente sabia que era lo que hacia, embistio rapidamente hacia mi, pero era demasiado tarde, ya me habia escapado de aquella trampa mortal, tome la red entre mis manos, mi prision seria mi nueva arma, el gladiador empuño l espada con sus dos manos y mando un fuerte espadazo contra mi, pero poseia aquella red la cual habia envuelto entre mis manos y la use para parar el ataque de aquella espada, esta se detuvo antes de tocar mi hombro, luego use toda mi fuerza para alejarle de mi, sentia como la sangre me hervia como algo palpitaba en mi... como si un nuevo yo deseara despedazar a aquel hombre
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Re: Arribo al coliseo
Había una gran diferencia entre los dos gladiadores. Mientras que Ada se había elegido un adversario más o menos fuerte a él le había tocado un imbécil que cedía fácilmente ante las provocaciones del enemigo. Un error que le costaría caro si no encontraba el modo de concentrarse en las jugadas de Night antes de que éste lo asesinara. El joven no tenia intenciones de medirse, al final se proponía quedar sólo él en pie mientras esos ingenuos gladiadores terminaban mordiendo el polvo.
-Un consejo. Te sugiero no quitarme los ojos de encima, te puedo sorprender.- dijo mientras observaba al inepto que tenia enfrente, ni siquiera parecía saber como manejar una espada, la había dejado caer, quedando completamente indefenso para el siguiente ataque de Night. El hombre comenzó a reír, a lo que Night tomó como una muestra de que el corte de la espada le había dañado algo más que una oreja. Sabia que ese hombre no estaba en su sano juicio, comenzar a reír cuando era evidente que ganar estaba ya muy lejos de él.
Mientras el joven contemplaba perplejo al gladiador sus pensamientos comenzaron a crear una pequeña distracción en su mente, algo que lo apartaría del combate. Le llamaba la atención el hecho de que todo hubiera sido tan fácil. Algo estaba mal, podía presentirlo.
El gladiador saco ventaja de que Night se encontraba sumergido en sus pensamientos para agarrarlo de la pierna y dejarlo en el suelo, levantando una nube de tierra que había estado presente en el campo desde el inicio del combate. La textura áspera del suelo penetraba las ropas ligeras del muchacho, y un poco de tierra se alojó en el interior de sus parpados. Mientras hacia el esfuerzo por ignorar la irritación en sus ojos el hombre recupero su espada y con ella trato de hacer una cisura en el pecho del joven, pero el chico reacciono a tiempo para usar su escudo y detener el curso de la espada, usando el escudo circular como una barrera que impedía que el cuerpo del Gladiador se le acercara más, estirando los brazos y usando todas las reservas de fuerza con las que contaba para alejarlo. La espada pudo cortar sus ropas, estas eran amplias y por eso sirvieron como una pantalla para que el enemigo se jactara de que le había hecho daño.
Se inclino un poco hacia abajo aún estando en posición defensiva, todavía no se quitaba a ese animal de encima suyo. Con un brazo mantenía el escudo firme mientras que con el otro trataba de hacer que la espada regresara a sus manos.
Al obtener la espada realizo otro ataque rápido en el brazo con el que el hombre sostenía su arma, haciendo que la soltara. Había sido una misión fácil gracias a que al inicio del combate pudo dañarle el brazo izquierdo y eso debilitaba su arsenal de recursos. El Gladiador había sido tan acelerado con sus acciones que no se detuvo a pensar en la posibilidad de quedar completamente desamparado, ahora había perdido la capacidad de usar los dos brazos para manejar armas.
Pero todavía podía pelear con los puños, así que el joven se deshizo también de sus armas. -Te mostrare que no necesito de ninguna ayuda para hacerte trizas.- dijo mientras lanzaba lejos su espada y escudo, y al mismo tiempo se retiraba las partes rasgadas de la ropa, quedando con el torso desnudo.
-perdiste la única oportunidad que tenias para matarme. Tal vez seas muy hábil con el combate con armas, pero veamos como eres en una pelea a puño limpio. -
-¡Dame tu mejor golpe!-
-Un consejo. Te sugiero no quitarme los ojos de encima, te puedo sorprender.- dijo mientras observaba al inepto que tenia enfrente, ni siquiera parecía saber como manejar una espada, la había dejado caer, quedando completamente indefenso para el siguiente ataque de Night. El hombre comenzó a reír, a lo que Night tomó como una muestra de que el corte de la espada le había dañado algo más que una oreja. Sabia que ese hombre no estaba en su sano juicio, comenzar a reír cuando era evidente que ganar estaba ya muy lejos de él.
Mientras el joven contemplaba perplejo al gladiador sus pensamientos comenzaron a crear una pequeña distracción en su mente, algo que lo apartaría del combate. Le llamaba la atención el hecho de que todo hubiera sido tan fácil. Algo estaba mal, podía presentirlo.
El gladiador saco ventaja de que Night se encontraba sumergido en sus pensamientos para agarrarlo de la pierna y dejarlo en el suelo, levantando una nube de tierra que había estado presente en el campo desde el inicio del combate. La textura áspera del suelo penetraba las ropas ligeras del muchacho, y un poco de tierra se alojó en el interior de sus parpados. Mientras hacia el esfuerzo por ignorar la irritación en sus ojos el hombre recupero su espada y con ella trato de hacer una cisura en el pecho del joven, pero el chico reacciono a tiempo para usar su escudo y detener el curso de la espada, usando el escudo circular como una barrera que impedía que el cuerpo del Gladiador se le acercara más, estirando los brazos y usando todas las reservas de fuerza con las que contaba para alejarlo. La espada pudo cortar sus ropas, estas eran amplias y por eso sirvieron como una pantalla para que el enemigo se jactara de que le había hecho daño.
Se inclino un poco hacia abajo aún estando en posición defensiva, todavía no se quitaba a ese animal de encima suyo. Con un brazo mantenía el escudo firme mientras que con el otro trataba de hacer que la espada regresara a sus manos.
Al obtener la espada realizo otro ataque rápido en el brazo con el que el hombre sostenía su arma, haciendo que la soltara. Había sido una misión fácil gracias a que al inicio del combate pudo dañarle el brazo izquierdo y eso debilitaba su arsenal de recursos. El Gladiador había sido tan acelerado con sus acciones que no se detuvo a pensar en la posibilidad de quedar completamente desamparado, ahora había perdido la capacidad de usar los dos brazos para manejar armas.
Pero todavía podía pelear con los puños, así que el joven se deshizo también de sus armas. -Te mostrare que no necesito de ninguna ayuda para hacerte trizas.- dijo mientras lanzaba lejos su espada y escudo, y al mismo tiempo se retiraba las partes rasgadas de la ropa, quedando con el torso desnudo.
-perdiste la única oportunidad que tenias para matarme. Tal vez seas muy hábil con el combate con armas, pero veamos como eres en una pelea a puño limpio. -
-¡Dame tu mejor golpe!-
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Re: Arribo al coliseo
Ada y el gladiador estaban ahi quietos midiendo sus fuerzas, el gladiador con su espada, y Ada reteniendola con la ayuda de la red, los dos se movian algunos centimetros y pareciese que la tierra se undia a sus pies a causa de la anorme fuerza que estos dos poseian y usaban en el combate, la joven denoto que a causa de ello aquella red no duraria mucho, asi que lo mejor seria terminar aquel enfrentamiento.
Era una maniobra arriesgada, pero la joven empezo a soltar poco a poco la red de su mano izquierda pero no lo suficiente para que la espada del gladiador le hiziece daño... usando toda su fuerza trato de empujarle , mientras soltaba completamente la red y daba un salto hacia atras, a causa de tal maniobra el gladiador se fue hacia adelante ya que no habia nada que retuviese su enorme fuerza y clavando la espada en el piso, Ada terminaria las cosas rapido no queria darle mas tiempo a la entretencion de Genas, le dio una fuerte patada al gladiaor en sus piernas lo que le hizo perder el equilibrio y caer al piso, Ada, recogio la espada que habia dejado el hombre, la adrenalina aumentaba el ritmo de los latidos de su corazon, empuño fuertemente el arma con su mano, y en un rapido movimiento, con toda su fuerza, decapito a aquel hombre, el cuerpo de la joven quedo con unos rastros de la sangre del gladiador, sus ojos no demostraban el mas minimo remordimiento, ni asco... tampoco demostraba alegria ni satisfaccion.
- Es extraño, antes cuando peleaba en Esparta, sentia algo de alegria de triunfo cuando era capaz de acabar con mi rival, ahora en este lugar no siento nada, veo a mi rival derrotado, veo como soy nuevamente superior, pero aquella extraña sensacion que me hacia hervir la sangre y desear mas no existe... no le siento... algo me ocurre... algo me hace dudar de mi misma de lo que soy... no lo entiendo esto es... desesperante -
Ada se quedo unos minutos en silencio, quieta sin reaccionar, en su ser algo pasaba algo se habia ido... no era la misma persona, sentia que habia perdido algo... desde el dia en que habia dejado Esparta... era la ganadora si, estaba viva si, pero no era la misma
Era una maniobra arriesgada, pero la joven empezo a soltar poco a poco la red de su mano izquierda pero no lo suficiente para que la espada del gladiador le hiziece daño... usando toda su fuerza trato de empujarle , mientras soltaba completamente la red y daba un salto hacia atras, a causa de tal maniobra el gladiador se fue hacia adelante ya que no habia nada que retuviese su enorme fuerza y clavando la espada en el piso, Ada terminaria las cosas rapido no queria darle mas tiempo a la entretencion de Genas, le dio una fuerte patada al gladiaor en sus piernas lo que le hizo perder el equilibrio y caer al piso, Ada, recogio la espada que habia dejado el hombre, la adrenalina aumentaba el ritmo de los latidos de su corazon, empuño fuertemente el arma con su mano, y en un rapido movimiento, con toda su fuerza, decapito a aquel hombre, el cuerpo de la joven quedo con unos rastros de la sangre del gladiador, sus ojos no demostraban el mas minimo remordimiento, ni asco... tampoco demostraba alegria ni satisfaccion.
- Es extraño, antes cuando peleaba en Esparta, sentia algo de alegria de triunfo cuando era capaz de acabar con mi rival, ahora en este lugar no siento nada, veo a mi rival derrotado, veo como soy nuevamente superior, pero aquella extraña sensacion que me hacia hervir la sangre y desear mas no existe... no le siento... algo me ocurre... algo me hace dudar de mi misma de lo que soy... no lo entiendo esto es... desesperante -
Ada se quedo unos minutos en silencio, quieta sin reaccionar, en su ser algo pasaba algo se habia ido... no era la misma persona, sentia que habia perdido algo... desde el dia en que habia dejado Esparta... era la ganadora si, estaba viva si, pero no era la misma
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Re: Arribo al coliseo
Night estaba listo para recibir cualquier tipo de golpe que su adversario intentara propinarle, él estaba apunto de demostrar que esa fortaleza de la que tanto hablaba no era imaginaria, que era real y que le serviría para soportar los golpes de un Gladiador de constitución tan corpulenta. Pero él tenía todos los pronósticos a su favor, principalmente porque su cuerpo estaba completamente ileso. Lo único que había logrado hacerle ese hombre durante el enfrentamiento era gastar sus fuerzas, pero además de eso no veía ningún otro efecto desfavorable.
El olor de la sangre sobre su rostro era algo que le hacia evocar esos recuerdos, las memorias de la guerra que vivió con sólo unos años de edad. Quizá no fue algo correcto que un niño tan pequeño presenciara escenas tan fuertes, cualquier otro hubiera quedado traumado para toda la vida. Pero ese no era el caso de Night, que en lugar de tratar de hacer como si todo aquello no hubiera pasado, lo abrazaba para curtirse para la guerra.
Aunque hace unas horas trataba de olvidarse de todo eso ahora estaba repasando lo que vio hace años, buscando la forma más adecuada de exterminar a su rival en la extensa biblioteca de recuerdos amargos, de las imágenes de la matanza, quería reproducir las mismas acciones con ese gladiador, como si lo estuviera volviendo a ver.
El joven cerró los puños y comenzó a correr en dirección al guerrero, golpeándolo de una forma brutal y finalmente derribándolo, como si su mente hubiera abandonado su cuerpo y ahora se dejara llevar por la intensidad del combate. Los golpes del Gladiador eran lentos y pausados, debido a toda la sangre que había perdido sus movimientos eran torpes y poco certeros.
Night continuaba castigando el cuerpo del guerrero, viendo como la sangre salpicaba, salía volando por los aires y terminaba su viaje al caer sobre sus ropas, empapándolas con el color rojo. El joven sentía haber sido poseído de pronto, permitiendo que todo el odio que sentía hacia aquellos soldado invasores de hace trece años se descargara sobre el hombre que tenia enfrente. Antes de que se diera cuenta el corazón del gladiador dejo de latir y un charco de sangre había tomado forma bajo su cuerpo. Se encontraba postrado sobre él, golpeándolo como si fuera un saco viejo.
Despertó al sentir la sensación de dolor en sus nudillos, no sabia cuanto tiempo había pasado, perdió la noción del mismo. Pudieron haber pasado sólo unos segundos o tal vez horas.
Pero no le importaba.
El olor de la sangre sobre su rostro era algo que le hacia evocar esos recuerdos, las memorias de la guerra que vivió con sólo unos años de edad. Quizá no fue algo correcto que un niño tan pequeño presenciara escenas tan fuertes, cualquier otro hubiera quedado traumado para toda la vida. Pero ese no era el caso de Night, que en lugar de tratar de hacer como si todo aquello no hubiera pasado, lo abrazaba para curtirse para la guerra.
Aunque hace unas horas trataba de olvidarse de todo eso ahora estaba repasando lo que vio hace años, buscando la forma más adecuada de exterminar a su rival en la extensa biblioteca de recuerdos amargos, de las imágenes de la matanza, quería reproducir las mismas acciones con ese gladiador, como si lo estuviera volviendo a ver.
El joven cerró los puños y comenzó a correr en dirección al guerrero, golpeándolo de una forma brutal y finalmente derribándolo, como si su mente hubiera abandonado su cuerpo y ahora se dejara llevar por la intensidad del combate. Los golpes del Gladiador eran lentos y pausados, debido a toda la sangre que había perdido sus movimientos eran torpes y poco certeros.
Night continuaba castigando el cuerpo del guerrero, viendo como la sangre salpicaba, salía volando por los aires y terminaba su viaje al caer sobre sus ropas, empapándolas con el color rojo. El joven sentía haber sido poseído de pronto, permitiendo que todo el odio que sentía hacia aquellos soldado invasores de hace trece años se descargara sobre el hombre que tenia enfrente. Antes de que se diera cuenta el corazón del gladiador dejo de latir y un charco de sangre había tomado forma bajo su cuerpo. Se encontraba postrado sobre él, golpeándolo como si fuera un saco viejo.
Despertó al sentir la sensación de dolor en sus nudillos, no sabia cuanto tiempo había pasado, perdió la noción del mismo. Pudieron haber pasado sólo unos segundos o tal vez horas.
Pero no le importaba.
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Re: Arribo al coliseo
Sema no podia creer lo que veia, se restregaba los ojos pensando que era un sueño o mas bien una vil pesadilla, ese par de chicos habia acabado con un par de experimentados gladiadores, la escensa en si era muy tetrica y atemorizante, la mujer parada junto al caaver del gladiador decapitado, con sus vestiduras manchadas de sangre, parecia un muñeco de practicas, por que despues de haber acabado con su oponente se quedo ahi... como una estatua undia en sus pensamientos, tal vez sintiendo remordimiento o algo mas, la sangre que salia del cuello de la victima se dezplazaba por el suelo de la arena y llegaba a la cabeza decapitada, que para evitar mas impacto en los asistentes estaba cubierta por un yelmo, para evitar ver aquella cara de agonia del gladiador muerto.
Muy cerca de aquella escena estaba el muchacho, quien en un ataque de locura golpeaba incesante el cadaver de su adversario, manchandose aun mas con la sangre de este... golpeandole como si fuese un saco de arena para practicas, nuevamente la sangre se extendia por la arena, por mas combates que Sema habia prescenciado era impactante ver como chicos podian lograr todo eso... no eran personas normales, para matar con tal frivoliad a un ser humano, se debia matar a varios seres humanos antes para que el sentimiento de la muerte ya no afectara sus corazones, para el como empresario era ya una gran perdida la muerte de sus hombres, habia pensado en mandar a los leones... pero quiza seria otro desperdicio, una gota de sudor caia por su frente, era un suor frio un sudor de miedo
- Que se larguen! no los quiero aca.... saquenlos y dejenles en paz! - Ordeno el hombre mientras desaparecia por una de las entradas a las gradas del coliseo, ausutado y confuso
Muy cerca de aquella escena estaba el muchacho, quien en un ataque de locura golpeaba incesante el cadaver de su adversario, manchandose aun mas con la sangre de este... golpeandole como si fuese un saco de arena para practicas, nuevamente la sangre se extendia por la arena, por mas combates que Sema habia prescenciado era impactante ver como chicos podian lograr todo eso... no eran personas normales, para matar con tal frivoliad a un ser humano, se debia matar a varios seres humanos antes para que el sentimiento de la muerte ya no afectara sus corazones, para el como empresario era ya una gran perdida la muerte de sus hombres, habia pensado en mandar a los leones... pero quiza seria otro desperdicio, una gota de sudor caia por su frente, era un suor frio un sudor de miedo
- Que se larguen! no los quiero aca.... saquenlos y dejenles en paz! - Ordeno el hombre mientras desaparecia por una de las entradas a las gradas del coliseo, ausutado y confuso
Última edición por Ada el Mar Dic 14, 2010 6:17 pm, editado 1 vez
Ada- Berseker de Ares
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Re: Arribo al coliseo
El jovencito bañado con la sangre de su rival caído en batalla no parecía aceptar que había terminado, el ganó, ya no había nada más por demostrar, pudo vencer al obstáculo puesto por Sema. Su abdomen, bien trabajado y de apariencia aceitosa por el sudor, tenia manchas de sangre por todas partes, como el de una criatura sanguinaria que se divertía viendo como la sangre abandonaba el cuerpo de su adversario derrotado.
Los hombres que trabajaban para Sema aparecieron sorprendiéndolo por la espalda, sujetándolo para expulsarlo del Coliseo Romano al haber asesinado a mano limpia a uno de los mejores combatientes que el Coliseo podía ofrecer. Sin embargo, el chico hacia que el personal de seguridad tuviera dificultades para contenerlo, cuando éstos le ponían sus manos encima él los golpeaba, provocando que dieran pasos hacia atrás para estar a salvo de la furia del chico.
-¿Qué les ocurre? No es más que un niño loco. Dame la cuerda.- dijo uno de ellos para el compañero que tenia a la derecha. Usando una cuerda ataron las manos del joven, impidiendo que pudiera hacer algo por resistirse. Lo habían rodeado de tal forma que no podía ver el resto de la arena, estaba acorralado. Los hombres del Coliseo comenzaron a patearlo, no se atrevían a acercarse cuando estaba libre pero ahora que no podía combatir les parecía gracioso como intentaba defenderse.
No podía alzar su cuerpo, lo tenían de rodillas y con ambos brazos sujetos por cuerdas. Uno de ellos tomo el rostro de Night entre sus manos -Creo que este mocoso seria feliz viviendo con los leones, incluso parece hablar su mismo lenguaje. Llévenselo de aquí, el Señor Sema ordeno que los dejáramos en paz, sólo les permití golpearlo porque él hizo lo mismo. Niño insolente.- dijo mientras veía los ojos del joven y dejaba caer su rostro para que lo desterraran del Coliseo.
-¡No he terminado! ¡Esta no es la última vez, los voy a matar a todos, grupo de cobardes!.- Exclamó aún poseído por el demonio de la guerra mientras era llevado por los hombres hacia la salida.
-Ay, pobrecillo, mírenlo todos, está llorando porque no lo dejamos seguir jugando en la arena. Sólo se las da de duro pero nada más se trata de otro niño miedoso común y silvestre. -
Los hombres que trabajaban para Sema aparecieron sorprendiéndolo por la espalda, sujetándolo para expulsarlo del Coliseo Romano al haber asesinado a mano limpia a uno de los mejores combatientes que el Coliseo podía ofrecer. Sin embargo, el chico hacia que el personal de seguridad tuviera dificultades para contenerlo, cuando éstos le ponían sus manos encima él los golpeaba, provocando que dieran pasos hacia atrás para estar a salvo de la furia del chico.
-¿Qué les ocurre? No es más que un niño loco. Dame la cuerda.- dijo uno de ellos para el compañero que tenia a la derecha. Usando una cuerda ataron las manos del joven, impidiendo que pudiera hacer algo por resistirse. Lo habían rodeado de tal forma que no podía ver el resto de la arena, estaba acorralado. Los hombres del Coliseo comenzaron a patearlo, no se atrevían a acercarse cuando estaba libre pero ahora que no podía combatir les parecía gracioso como intentaba defenderse.
No podía alzar su cuerpo, lo tenían de rodillas y con ambos brazos sujetos por cuerdas. Uno de ellos tomo el rostro de Night entre sus manos -Creo que este mocoso seria feliz viviendo con los leones, incluso parece hablar su mismo lenguaje. Llévenselo de aquí, el Señor Sema ordeno que los dejáramos en paz, sólo les permití golpearlo porque él hizo lo mismo. Niño insolente.- dijo mientras veía los ojos del joven y dejaba caer su rostro para que lo desterraran del Coliseo.
-¡No he terminado! ¡Esta no es la última vez, los voy a matar a todos, grupo de cobardes!.- Exclamó aún poseído por el demonio de la guerra mientras era llevado por los hombres hacia la salida.
-Ay, pobrecillo, mírenlo todos, está llorando porque no lo dejamos seguir jugando en la arena. Sólo se las da de duro pero nada más se trata de otro niño miedoso común y silvestre. -
Última edición por Night el Mar Dic 14, 2010 8:36 pm, editado 1 vez
Night- General Marino
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Re: Arribo al coliseo
El calor era insoportable por el camino hacia el coliseo, donde mi ahora pupilo se encaminaba para ver lo que seria el luagr de sus glorias, y posiblemente su tumba no habia mas remedio, el lo habia predestinado y no habia marcha atras, tan solo un corte era lo que presendiria de sus servicios por lo tal era de suma importancia llevarlo a que se acoplara de inmediato a su nueva vida, nuevas tretas todo un nuevo comienzo, deberia de cudiarse la espalda dentro de aquel lugar, no confiar en nadie puesto que el que lo hacia pagaba de una manera u otra.
Bien no te quedes atras, al parecer te has quedado un poco observando diversos articulos, bien no lo hagas porque en una de ellas te podrian robar, ahi muchos ladrones por aqui, mas cuando ven a un importante senador en estos lares, las ratas brotan de las coladeras lo mismo que esas ladillas, pero vamos apresura el paso.
Dije mientras visualizaba el coliseo, lugar de imnumerables batallas, mas buenas para mi que para otro, mis gladiadores no me habian dejado mal, todos habian avaratado a los demas, eran los mejores, algunos cubiertos de gloria habia perecido, pero otros con todas sus victorias por delante, habian quedado absueltos de tal peligro, y llevamos conmigo para ser mis soldados guardianes, o solo ser liberados, puesto que ya habian hecho crecer mis arcas, la entrada era grande y en su interior algo se llevaba dentro, unos cuantos cuerpos de los occisos se encontraban tirados por el lugar, bañados de sangre se encontraban otros, y a lo mucho se encontraban golpeando a otro, una mujer entre ellos, tal vez tambien seria una guerrera.
¡¡¡ SUELTENLO!!! dije mientras me acercaba a apuntar con mi dedo indice de mi mano derecha a aquel que tenian apresado, no son dignos de llamarse a ustedes mismos gladiadores, solo por golpear a un desarmado, pero como han visto que les a ganado a sus compañeros no tienes de otra verdad?, dije mientras el grupo que lo sostenia me veian sorprendidos.
Bien no te quedes atras, al parecer te has quedado un poco observando diversos articulos, bien no lo hagas porque en una de ellas te podrian robar, ahi muchos ladrones por aqui, mas cuando ven a un importante senador en estos lares, las ratas brotan de las coladeras lo mismo que esas ladillas, pero vamos apresura el paso.
Dije mientras visualizaba el coliseo, lugar de imnumerables batallas, mas buenas para mi que para otro, mis gladiadores no me habian dejado mal, todos habian avaratado a los demas, eran los mejores, algunos cubiertos de gloria habia perecido, pero otros con todas sus victorias por delante, habian quedado absueltos de tal peligro, y llevamos conmigo para ser mis soldados guardianes, o solo ser liberados, puesto que ya habian hecho crecer mis arcas, la entrada era grande y en su interior algo se llevaba dentro, unos cuantos cuerpos de los occisos se encontraban tirados por el lugar, bañados de sangre se encontraban otros, y a lo mucho se encontraban golpeando a otro, una mujer entre ellos, tal vez tambien seria una guerrera.
¡¡¡ SUELTENLO!!! dije mientras me acercaba a apuntar con mi dedo indice de mi mano derecha a aquel que tenian apresado, no son dignos de llamarse a ustedes mismos gladiadores, solo por golpear a un desarmado, pero como han visto que les a ganado a sus compañeros no tienes de otra verdad?, dije mientras el grupo que lo sostenia me veian sorprendidos.
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Re: Arribo al coliseo
Había mucho calor en Roma, Dahinten no estaba acostumbrado, puesto que la mayor parte de su vida la había vivido en un bosque bastante húmedo y frío...sudaba a chorros, seguía a el senador Mauritus. Al mismo tiempo que lo seguía, Dahinten iba observando concienzudamente lo que sería una especie de teatro para él, el coliseo Romano....muchos no se atrevían a poner un pie ahí, para otros era una forma de entretenimiento, una manera de olvidar sus propios problemas con la desventura o la gloria de otros y de una u otra manera soñar salir victoriosos de la arena donde mucha sangre, sudor y lagrimas habían sido derramados.
El senador le dijo que no se quedara atrás, pues le podrían robar sus cosas. A pesar de las advertencias del senador, Dahinten se sentía seguro de que si alguien intentaba robarle algo, el se podría defender.
Dahinten pensaba en que su futuro y su honor estaban ahi, en un coliseo, sirviendo para el entretenimiento de miles de personas, pero era una buena forma de ganar dinero y honor, tanto para el como para su nuevo jefe, Mauritius.
De pronto, el senador se detuvo y observando fijamente a unos sujetos que golpeaban sin misericordia a otro, les gritó que lo dejaran, pues le parecía que el hombre golpeado les había ganado y al senador no le había gracia que lo atacaran en desventaja numérica.
Con estas palabras, Dahinten se dió cuenta de la alta calidad moral del senador, había pensado siempre que todos los gobernadores romanos eran tiranos y déspotas, pero el senador Mauritius parecía no ser un tipo acostumbrado a todo tipo de lujos, que no había vivido toda su vida así...pero..-pronto lo descubriré- pensó Dahinten.
Por lo pronto se encontraba en el coliseo, que sería como un segundo hogar para él, y eso era lo que importaba.....
El senador le dijo que no se quedara atrás, pues le podrían robar sus cosas. A pesar de las advertencias del senador, Dahinten se sentía seguro de que si alguien intentaba robarle algo, el se podría defender.
Dahinten pensaba en que su futuro y su honor estaban ahi, en un coliseo, sirviendo para el entretenimiento de miles de personas, pero era una buena forma de ganar dinero y honor, tanto para el como para su nuevo jefe, Mauritius.
De pronto, el senador se detuvo y observando fijamente a unos sujetos que golpeaban sin misericordia a otro, les gritó que lo dejaran, pues le parecía que el hombre golpeado les había ganado y al senador no le había gracia que lo atacaran en desventaja numérica.
Con estas palabras, Dahinten se dió cuenta de la alta calidad moral del senador, había pensado siempre que todos los gobernadores romanos eran tiranos y déspotas, pero el senador Mauritius parecía no ser un tipo acostumbrado a todo tipo de lujos, que no había vivido toda su vida así...pero..-pronto lo descubriré- pensó Dahinten.
Por lo pronto se encontraba en el coliseo, que sería como un segundo hogar para él, y eso era lo que importaba.....
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Re: Arribo al coliseo
Ada seguia inmovil, mientras los otros gladiadores se encargaban aun mas de su demente compañero de area, se qudos mirando la sangre que corria por la arena mientras se preguntaba que era lo que le faltaba para dejar de sentirse asi, pero el ruido de los gladiadores y del propio Night le sacaron de su meditacion, Night era como un leon recien capturado, se defendia con todo de sus captores no le importaba si tenia que matar a otra persona, un espiritu deseoso de sangre, demente por el combate salia a flote, Ada recordaba bien cual era esa sensacion, la hbia sentio antes... en innumerables ocasiones pero esta vez, no era asi.
Caminando lentamente seguia observando aquella escena, apreto los puño y cerro fuertemente sus dientes, tomo un gran impulso, y se acerco velozmente hacia Nigth, carogo contra el con la parte derecha de su cuerpo haciendo que su hombro empujase al chico contra la pared del pasillo por donde era la salida del coliseo, llevando consigo a los gladiadores que estaban desprevenidos al escuchar las ordenes de alguien, habian perdido la fuerza para agarrar a aquel muchacho, ya contra la pared, lo tomo del cuello y lo aprisiono contra esta, sus ojos le miraban con cierta determinacion, aun le quedaba mucha fuerza tras el combate, o eso era lo que hacia creer a los demas.
- Ha ganado... la sangre de su rival ha manchado su cuerpo, se ha demostrado que no es un muchacho enclencle, ahora... deje de actuar como el mocoso que no es y acepte su victoria y larguese -
Ada dejo al muchacho y se alejo lo suficiente de el para que no le hiziera daño, lo que habia hecho tal vez haria que Night se enojara aun mas pero lo que deseaba en si es que se calmara, por que ya habia demostrado lo que era realmente, la mujer vio de reojo a los recien llegados, no le importaba quienes fueran, tan solo tenia su atencion puesta en Night
Caminando lentamente seguia observando aquella escena, apreto los puño y cerro fuertemente sus dientes, tomo un gran impulso, y se acerco velozmente hacia Nigth, carogo contra el con la parte derecha de su cuerpo haciendo que su hombro empujase al chico contra la pared del pasillo por donde era la salida del coliseo, llevando consigo a los gladiadores que estaban desprevenidos al escuchar las ordenes de alguien, habian perdido la fuerza para agarrar a aquel muchacho, ya contra la pared, lo tomo del cuello y lo aprisiono contra esta, sus ojos le miraban con cierta determinacion, aun le quedaba mucha fuerza tras el combate, o eso era lo que hacia creer a los demas.
- Ha ganado... la sangre de su rival ha manchado su cuerpo, se ha demostrado que no es un muchacho enclencle, ahora... deje de actuar como el mocoso que no es y acepte su victoria y larguese -
Ada dejo al muchacho y se alejo lo suficiente de el para que no le hiziera daño, lo que habia hecho tal vez haria que Night se enojara aun mas pero lo que deseaba en si es que se calmara, por que ya habia demostrado lo que era realmente, la mujer vio de reojo a los recien llegados, no le importaba quienes fueran, tan solo tenia su atencion puesta en Night
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Re: Arribo al coliseo
El muchacho estaba completamente perdido, ausente del mundo que le rodeaba por esos instantes. Había dejado que el instinto de supervivencia se apoderara completamente de su ser al hacer lo posible por defenderse. ¿Cómo no se iba a enfadar? en primer lugar lo habían apresado como a un animal y en segundo habían abusado de su persona mientras se encontraba herido y vulnerable al serle negado el uso de sus brazos.
Aquellos hombres habían demostrado no ser otra cosa que cobardes, no sólo tenían que atacarlo en gran numero, también lo deshabilitaban para protegerse y lo tumbaban de rodillas para que no pudiera usar sus piernas para responder a los golpes. Posiblemente lo que lo hizo rabiar todavía más es que uno de ellos, en su propia cara, lo denominara como un niño miedoso.
-¡Déjame ir y te demostrare lo que es un niño miedoso!- gritó mientras era llevado al exterior de la imponente estructura. Antes de que los hombres pudieran proseguir con su labor designada, Ada interfirió, estrellando a Night contra la pared. Era claro que Night estaba enojado y buscaba un medio para liberar todo esa ira contenida.
Al estar contra la pared el chico volvió en sí, recuperando la prudencia que había perdido en el Coliseo romano, como si la dura realidad lo hubiera hecho volver a ser una persona civilizada. En ese momento ya no importaba que tan indignado estuviera, tenia que mantener todo eso adentro, guardarlo, pues esa no era la ocasión más conveniente para volverse un demente adicto a la sangre.
Notó como la mujer empezó a hacer distancia, él no tenia idea de si había hecho algo malo que pudiera molestarle. No se enojo, pero tampoco podía quedarse con la boca cerrada mientas la fémina se alejaba de forma despectiva.
-Esto dejo de ser una exhibición hace tiempo. Lo que deje en la arena no tenia nada que ver con probarle algo a alguien, sólo estaba furibundo con la persona incorrecta. De algún modo permití que todo lo malo que hay en mi interior brotara al exterior. Y con esos hombres, ¿Qué podía hacer? Esos tipos me tenían capturado como un animal, no podía irme sin intentar corregirlos por su conducta!- dijo con un tono de voz elevado, lo suficiente para ser escuchado por alguien más aparte de Ada. Debido a toda la conmoción ni siquiera había tenido la amabilidad de agradecer al hombre que pidió que lo liberaran. La sangre seguía nublando su juicio y no lo dejaba percatarse de todo lo que existía en aquel escenario por estar concentrado en desmembrar a los gladiadores, desbaratarlos miembro por miembro y seguir expresando su furia más escondida.
-Pero creo que es verdad lo que dijeron, posiblemente podría convivir con los leones por mi comportamiento.- confesó con los ojos tristes.
Aquellos hombres habían demostrado no ser otra cosa que cobardes, no sólo tenían que atacarlo en gran numero, también lo deshabilitaban para protegerse y lo tumbaban de rodillas para que no pudiera usar sus piernas para responder a los golpes. Posiblemente lo que lo hizo rabiar todavía más es que uno de ellos, en su propia cara, lo denominara como un niño miedoso.
-¡Déjame ir y te demostrare lo que es un niño miedoso!- gritó mientras era llevado al exterior de la imponente estructura. Antes de que los hombres pudieran proseguir con su labor designada, Ada interfirió, estrellando a Night contra la pared. Era claro que Night estaba enojado y buscaba un medio para liberar todo esa ira contenida.
Al estar contra la pared el chico volvió en sí, recuperando la prudencia que había perdido en el Coliseo romano, como si la dura realidad lo hubiera hecho volver a ser una persona civilizada. En ese momento ya no importaba que tan indignado estuviera, tenia que mantener todo eso adentro, guardarlo, pues esa no era la ocasión más conveniente para volverse un demente adicto a la sangre.
Notó como la mujer empezó a hacer distancia, él no tenia idea de si había hecho algo malo que pudiera molestarle. No se enojo, pero tampoco podía quedarse con la boca cerrada mientas la fémina se alejaba de forma despectiva.
-Esto dejo de ser una exhibición hace tiempo. Lo que deje en la arena no tenia nada que ver con probarle algo a alguien, sólo estaba furibundo con la persona incorrecta. De algún modo permití que todo lo malo que hay en mi interior brotara al exterior. Y con esos hombres, ¿Qué podía hacer? Esos tipos me tenían capturado como un animal, no podía irme sin intentar corregirlos por su conducta!- dijo con un tono de voz elevado, lo suficiente para ser escuchado por alguien más aparte de Ada. Debido a toda la conmoción ni siquiera había tenido la amabilidad de agradecer al hombre que pidió que lo liberaran. La sangre seguía nublando su juicio y no lo dejaba percatarse de todo lo que existía en aquel escenario por estar concentrado en desmembrar a los gladiadores, desbaratarlos miembro por miembro y seguir expresando su furia más escondida.
-Pero creo que es verdad lo que dijeron, posiblemente podría convivir con los leones por mi comportamiento.- confesó con los ojos tristes.
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Re: Arribo al coliseo
- Yo no pedi ninguna explicacion -
Fue lo primero que le contesto la mujer al muchacho que al parecer habia reaccionado despues de su intervencion, Ada pensaba que tal vez hubiese pasado lo contrario, la ira y la perdida de autocontrol hubiese llevado a Night a convertirse en un ser que solo buscaria la pelea buscaria destruir todo a su paso hasta calmar sus deseos de sangre, pero cuando ocurre eso, lamentablemente en la mayoria de las ocasiones el unico resaltado es la muerte, Ada no se mostraba superior ni con ganas de reprochar el comportamiento de Night, aunque el no se diese cuenta le estaba haciendo un favor, evitandole la muerte que encontraria si seguia buuscandole la pelea al grupo de glaiadores que recien llegaban.
Suspiro profundamente, y se cruzo de brazos apoyandose en la pared, ahora que el muchacho estaba bien miro a los recien llegados, uno vestia de una forma elegante y el otro al parecer parecia su sirviente o lo que fuera, ya que andaba detras de este, Ada miro al joven de cabellos rubios, no le presto mucha atencion de nuevo y volvio la vista a Night
- Y bueno.... se encuentra bien? - dijo como si le fastidiara decir tales palabras
Fue lo primero que le contesto la mujer al muchacho que al parecer habia reaccionado despues de su intervencion, Ada pensaba que tal vez hubiese pasado lo contrario, la ira y la perdida de autocontrol hubiese llevado a Night a convertirse en un ser que solo buscaria la pelea buscaria destruir todo a su paso hasta calmar sus deseos de sangre, pero cuando ocurre eso, lamentablemente en la mayoria de las ocasiones el unico resaltado es la muerte, Ada no se mostraba superior ni con ganas de reprochar el comportamiento de Night, aunque el no se diese cuenta le estaba haciendo un favor, evitandole la muerte que encontraria si seguia buuscandole la pelea al grupo de glaiadores que recien llegaban.
Suspiro profundamente, y se cruzo de brazos apoyandose en la pared, ahora que el muchacho estaba bien miro a los recien llegados, uno vestia de una forma elegante y el otro al parecer parecia su sirviente o lo que fuera, ya que andaba detras de este, Ada miro al joven de cabellos rubios, no le presto mucha atencion de nuevo y volvio la vista a Night
- Y bueno.... se encuentra bien? - dijo como si le fastidiara decir tales palabras
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Re: Arribo al coliseo
Adentrandome mas y mas al coliseo, se podia distinguir un poco mas lo que fue aquella peleea aun con el rojo carmesi entre las manos de ambos, aun se podia oler la sangre freca derramada en la arena, con el brillo del sol quedaba con un brillo mas dorado, pero aun sin dejar de ser solo eso sangre, mutilaciones en los uerpos ya tirados, ahora no habia ningun impedimento, al parecer eran buenos contendientes, pero lo que mas me sorprendio fue una mujer que habia peleado para poder sobrevivir, era algo extraño ver a una por ahi, pero sin duda alguna habia sido mucho que varios gladiadores que habia visto por esos lares.
Bravo, bravo- dije mientras aplaudia, la funcion habia sido maravillosa por los estragos que s e habia hecho en el lugar, no habia podido verla completa pero en fin los resultados eran lo que importaban ahora, - se ve que tienen futuro como posibles gladiadores, pero por ahora solo los vere como gusanos, a ti mujer, creo que has sabrido sobrevivir sola, espero que sigas asi ,entre todo este lugar de hombres, pero si necesitaras algo no dudes en llamar, al senador Mauritius que ese soy yo. Sonrei, la verdad no me importaba lo que hiciera, solo la queria trabajando para mi, asi como ahora lo hiba a ser Dahinten.
Bueno creo que no puedo decir mucho mas, esto se arregla dentro de este lugar, Dahinten ve con ellos para que te instruyan, que de aqui termina mi labor, tendras que sobrevivir solo aqui, y cuando estes ya listo llega a la villa, que ahi te esperara tu recompensa...
Bravo, bravo- dije mientras aplaudia, la funcion habia sido maravillosa por los estragos que s e habia hecho en el lugar, no habia podido verla completa pero en fin los resultados eran lo que importaban ahora, - se ve que tienen futuro como posibles gladiadores, pero por ahora solo los vere como gusanos, a ti mujer, creo que has sabrido sobrevivir sola, espero que sigas asi ,entre todo este lugar de hombres, pero si necesitaras algo no dudes en llamar, al senador Mauritius que ese soy yo. Sonrei, la verdad no me importaba lo que hiciera, solo la queria trabajando para mi, asi como ahora lo hiba a ser Dahinten.
Bueno creo que no puedo decir mucho mas, esto se arregla dentro de este lugar, Dahinten ve con ellos para que te instruyan, que de aqui termina mi labor, tendras que sobrevivir solo aqui, y cuando estes ya listo llega a la villa, que ahi te esperara tu recompensa...
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Re: Arribo al coliseo
Night se quedo con su cuerpo adherido a la pared tras ver la forma en la que Ada le respondía. Por algún motivo se sentía menos presionado al ver que ésta retornaba hacia él. El chico abrió los ojos sorprendido al oír esas palabras de la boca de Ada. Le preguntaba si se encontraba bien, y eso era un motivo valido para que abriera los ojos redondos como platos. Hasta hace unos minutos él pensaba que era una presencia desagradable para la mujer, pero ahora que ella parecía verse preocupada por su bienestar lo había dejado estupefacto.
-S-Sí, e... estoy bien. Ese gladiador mediocre apenas me toco.- dijo poniendo en evidencia sus nervios. Es que no esperaba eso, pues la información con la que contaba acerca de aquella guerrera lo hacia pensar que ella no era del tipo de persona que se interesa por la suerte de los demás. Aunque las palabras hayan sido forzadas a salir eso no cambiaba su significado.
El chico se quedo en silencio por un segundo, pero el rubio que lo había auxiliado en la arena se apareció en el momento justo. No podía haber un mejor momento para pedir una interrupción, lo habían salvado de quedarse como tonto mientras asimilaba la actitud de Ada.
-Eh, le agradezco mucho el favor que me hizo con esos tipos. No tuve oportunidad de decírselo.- le dijo a la importante figura antes de que se fuera. El joven no podía quitar la vista de la fémina, había quedado pasmado, ya que esperaba a que mientras él hablaba, ella se retirara y no volvieran a encontrarse nunca más. Nada la obligaba a seguir con él, sin embargo lo hacia y eso era algo que lo tenia asombrado.
-¿Por qué no se ha ido? Será que quiere algo más por el favor de hace un rato.- Se preguntó a sí mismo mientras miraba hacia el techo pensativo, no quería incomodar a la mujer con sus miradas y que ésta las malinterpretara como algo más. El hombre rubio había dejado a alguien para que los acompañara, pero él estaba con la cabeza en las nubes como para saludar.
-S-Sí, e... estoy bien. Ese gladiador mediocre apenas me toco.- dijo poniendo en evidencia sus nervios. Es que no esperaba eso, pues la información con la que contaba acerca de aquella guerrera lo hacia pensar que ella no era del tipo de persona que se interesa por la suerte de los demás. Aunque las palabras hayan sido forzadas a salir eso no cambiaba su significado.
El chico se quedo en silencio por un segundo, pero el rubio que lo había auxiliado en la arena se apareció en el momento justo. No podía haber un mejor momento para pedir una interrupción, lo habían salvado de quedarse como tonto mientras asimilaba la actitud de Ada.
-Eh, le agradezco mucho el favor que me hizo con esos tipos. No tuve oportunidad de decírselo.- le dijo a la importante figura antes de que se fuera. El joven no podía quitar la vista de la fémina, había quedado pasmado, ya que esperaba a que mientras él hablaba, ella se retirara y no volvieran a encontrarse nunca más. Nada la obligaba a seguir con él, sin embargo lo hacia y eso era algo que lo tenia asombrado.
-¿Por qué no se ha ido? Será que quiere algo más por el favor de hace un rato.- Se preguntó a sí mismo mientras miraba hacia el techo pensativo, no quería incomodar a la mujer con sus miradas y que ésta las malinterpretara como algo más. El hombre rubio había dejado a alguien para que los acompañara, pero él estaba con la cabeza en las nubes como para saludar.
Última edición por Night el Dom Dic 12, 2010 6:38 pm, editado 1 vez
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