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Riachuelo cerca del Santuario
Recuerdo del primer mensaje :
Después de dejar a Aldebarán y a la joven que al parecer también tenía cosas que hacer camine un largo rato sin rumbo o quizás simplemente me encontraba dando un paseo para encontrarme a mí mismo ya que no sabía con claridad lo que tenía que hacer, lo único que tenía claro en mi mente era el hacerme más fuerte para derrotar a Hang, todo el camino por el bosque había sido tranquilo pero también silencioso, pero dentro de ese inmenso silencio se podía escuchar levemente el ruido de un riachuelo no muy lejano de donde me encontraba caminando.-Como planeas hacerte mas fuerte Arone?.-Escuche las palabras de Guren que me miraba mientras se recargaba en mi hombro derecho.
Sinceramente no lo se…quisas si aprendo a controlar mejor las llamas que crea mis cosmo…-Lo decía con algo de duda ya que no tenia mucha seguridad de lograr crearlas de nuevo ya que cuando lo logre fue porque nuestra vida se encontraba en peligro y por ello pude usarla, mientras que caminaba escuchaba como tronaban las hojas secas que se encontraban regadas por el suelo con cada paso que diera, al mismo tiempo observaba como unas cuantas mas caían de entre las ramas de los grandes arboles pero note que unas que pasaban a un costado mío caían carbonizadas al suelo , al mirar mi hombro observe como Guren con unos cuantos resoplidos las quemaba
Recuerda que a lo que se refiere al fuego en eso te puedo ayudar, e incluso puedo ser el mejor maestro ya que no he dejado de ser el más poderoso espíritu de fuego.-Me quede mirando un rato a Guren quien después de un rato me sonrió.-Si tienes razón por un momento lo había olvidado ya que han pasado mas cosas de las que puedo manejar…-Mire al suelo con una expresión que reflejaba un poco de desesperación.-Si después de todo eres un inútil…-Dijo mientras que me daba un leve golpe con su cola.-Entonces si me quieres enseñar será mejor acercarnos mas al riachuelo que se escucha un poco a lo lejos…
Después de dejar a Aldebarán y a la joven que al parecer también tenía cosas que hacer camine un largo rato sin rumbo o quizás simplemente me encontraba dando un paseo para encontrarme a mí mismo ya que no sabía con claridad lo que tenía que hacer, lo único que tenía claro en mi mente era el hacerme más fuerte para derrotar a Hang, todo el camino por el bosque había sido tranquilo pero también silencioso, pero dentro de ese inmenso silencio se podía escuchar levemente el ruido de un riachuelo no muy lejano de donde me encontraba caminando.-Como planeas hacerte mas fuerte Arone?.-Escuche las palabras de Guren que me miraba mientras se recargaba en mi hombro derecho.
Sinceramente no lo se…quisas si aprendo a controlar mejor las llamas que crea mis cosmo…-Lo decía con algo de duda ya que no tenia mucha seguridad de lograr crearlas de nuevo ya que cuando lo logre fue porque nuestra vida se encontraba en peligro y por ello pude usarla, mientras que caminaba escuchaba como tronaban las hojas secas que se encontraban regadas por el suelo con cada paso que diera, al mismo tiempo observaba como unas cuantas mas caían de entre las ramas de los grandes arboles pero note que unas que pasaban a un costado mío caían carbonizadas al suelo , al mirar mi hombro observe como Guren con unos cuantos resoplidos las quemaba
Recuerda que a lo que se refiere al fuego en eso te puedo ayudar, e incluso puedo ser el mejor maestro ya que no he dejado de ser el más poderoso espíritu de fuego.-Me quede mirando un rato a Guren quien después de un rato me sonrió.-Si tienes razón por un momento lo había olvidado ya que han pasado mas cosas de las que puedo manejar…-Mire al suelo con una expresión que reflejaba un poco de desesperación.-Si después de todo eres un inútil…-Dijo mientras que me daba un leve golpe con su cola.-Entonces si me quieres enseñar será mejor acercarnos mas al riachuelo que se escucha un poco a lo lejos…
Arone- Caballeros Dorados
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
El camino del bosque había terminado y Michiru por fin había salido del bosque La joven violinista de cabellos verde esmeralda se sentía aliviada de haber salido de aquel bosque, rápidamente levanto su cabeza para poder admirar el hermoso cielo Pasaron muchas horas para volver a ver el azul del cielo, las copas de aquellos árboles no me dejaban admirarlo parece como si no lo hubiese visto en días, Michiru bajo la cabeza y se percato de que un riachuelo se encontraba cerca del lugar donde ella se hallaba ese río era muy largo ya que ella se encontraba en otro extremo de el, se acerco rápidamente y tomo agua con sus dos manos y la llevo a su rostro para refrescarse, el agua era muy fría y cristalina tanto que podía observar su reflejo perfectamente con claridad, la joven violinista se observaba sucia de su cuerpo debido a todas las plantas llenas de lodo de aquel bosque que habían manchado su piel blanca así que se le vino ala mente en tomar un baño dentro de el, no lo pensó dos veces y se dispuso a quitarse la ropa no sin antes mirar hacía todos lados para percatarse de que nadie la estuviese observando dejándola completamente desnuda, una vez desnuda coloco uno de sus pies dentro del el riachuelo su piel se erizo ya que se encontraba fría, pero eso no le importo así que introdujo todo su cuerpo dirigiéndose a la parte mas profunda creo que después de un momento podré acostumbrarme musito la joven entre dientes.
Minutos después Michiru ya se había acostumbrado al agua fría así que se podía moverse con libertad veamos intentare si puedo manipular el agua estando dentro de ella, la joven mujer comenzó a concentrar su energía para poder manipular el agua a su antojo, una vez la energía concentrada Michiru empezó a mover sus manos con gracia y estilo al rededor de ella, el liquido en instantes imitaba sus movimientos creando una especie de cadena la cual giraba alrededor de Michiru, aquella joven observo que el río continuaba y parecía ser que se encontraba con mas profundidad, así que tomo sus cosas de la orilla y camino hacía el otro lado del río.
Offrol : Segundo post para la creación de la primer técnica débil
Minutos después Michiru ya se había acostumbrado al agua fría así que se podía moverse con libertad veamos intentare si puedo manipular el agua estando dentro de ella, la joven mujer comenzó a concentrar su energía para poder manipular el agua a su antojo, una vez la energía concentrada Michiru empezó a mover sus manos con gracia y estilo al rededor de ella, el liquido en instantes imitaba sus movimientos creando una especie de cadena la cual giraba alrededor de Michiru, aquella joven observo que el río continuaba y parecía ser que se encontraba con mas profundidad, así que tomo sus cosas de la orilla y camino hacía el otro lado del río.
Offrol : Segundo post para la creación de la primer técnica débil
Michiru- Amazona Dorada
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Post 1 de 4 para maestría de Primer Ataque Débil. Elemento: Manipulación de la mente
Ya sentada en el suelo a pocos metros de la orilla del riachuelo decidí comenzar con lo mío, ya que no tenía nadie que me moleste y mucho menos aquel tipo extraño que no se había comportado muy bien. Crucé mis pies y junté mis manos frente a mí cuerpo, como lo había hecho la primera vez que logré crear aquella defensa. Cerré los ojos y traté de concentrarme de una vez por todas. Puse alerta mis sentidos, logré captar todo a mi alrededor; el sonido del agua fluyendo, la corriente de aire a mi alrededor, la briza de viento rosando mi cuerpo, todo lo que me rodeaba lograba distinguir; tal y como me había enseñado Edward.
Pasaron a penas unos pocos minutos hasta que aquel esfuerzo de concentración comenzó a dar sus frutos. Mi cuerpo fue rodeado por una tenue aura dorada, que poco a poco se intensificaba hasta ser una luz muy notable en torno a mí figura. Podía sentir como fluía por mi cuerpo, como esa cosmoenergía brillante comenzaba a querer despertar nuevamente. No había pasado mucho tiempo y lo estaba logrando sola. Después de todo ya sabía el secreto de todo eso. Concentración, confianza en sí mismo y fe. Era todo lo que se necesitaba para lograr un objetivo deseado; sobre todo el despertar de aquella energía justiciera que traiga paz y luz a un mundo de tinieblas y odio.
Comencé a recordar aquella vez en el barco a Roma, cada cosa que pensaba, cada cosa que escuchaba por parte de aquel viejo compañero que me había protegido del mal que podía haber en Egipto. Gracias a él ahora estaba en ese sitio, sabía como defenderme y sobre todo.... había descubierto la mejor forma de hacer el bien, la luz que guiaría mi camino desde ese momento y por siempre. Proteger el mundo junto a la diosa de la sabiduría era lo más grandioso que me podía pasar y no faltaba mucho para que conozca el verdadero poder del valor. El tiempo pasaba y no debía desperdiciarlo en tonterías por eso decidí quedarme allí y tratar de proseguir con ese trabajo que una vez había comenzado: el despertar definitivo de mi cosmos, esa energía dorada que fluía por todo mi cuerpo y estaba lista para utilizarse.
Ya sentada en el suelo a pocos metros de la orilla del riachuelo decidí comenzar con lo mío, ya que no tenía nadie que me moleste y mucho menos aquel tipo extraño que no se había comportado muy bien. Crucé mis pies y junté mis manos frente a mí cuerpo, como lo había hecho la primera vez que logré crear aquella defensa. Cerré los ojos y traté de concentrarme de una vez por todas. Puse alerta mis sentidos, logré captar todo a mi alrededor; el sonido del agua fluyendo, la corriente de aire a mi alrededor, la briza de viento rosando mi cuerpo, todo lo que me rodeaba lograba distinguir; tal y como me había enseñado Edward.
Pasaron a penas unos pocos minutos hasta que aquel esfuerzo de concentración comenzó a dar sus frutos. Mi cuerpo fue rodeado por una tenue aura dorada, que poco a poco se intensificaba hasta ser una luz muy notable en torno a mí figura. Podía sentir como fluía por mi cuerpo, como esa cosmoenergía brillante comenzaba a querer despertar nuevamente. No había pasado mucho tiempo y lo estaba logrando sola. Después de todo ya sabía el secreto de todo eso. Concentración, confianza en sí mismo y fe. Era todo lo que se necesitaba para lograr un objetivo deseado; sobre todo el despertar de aquella energía justiciera que traiga paz y luz a un mundo de tinieblas y odio.
Comencé a recordar aquella vez en el barco a Roma, cada cosa que pensaba, cada cosa que escuchaba por parte de aquel viejo compañero que me había protegido del mal que podía haber en Egipto. Gracias a él ahora estaba en ese sitio, sabía como defenderme y sobre todo.... había descubierto la mejor forma de hacer el bien, la luz que guiaría mi camino desde ese momento y por siempre. Proteger el mundo junto a la diosa de la sabiduría era lo más grandioso que me podía pasar y no faltaba mucho para que conozca el verdadero poder del valor. El tiempo pasaba y no debía desperdiciarlo en tonterías por eso decidí quedarme allí y tratar de proseguir con ese trabajo que una vez había comenzado: el despertar definitivo de mi cosmos, esa energía dorada que fluía por todo mi cuerpo y estaba lista para utilizarse.
Jezzara- Reino : Santuario de Athena
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Post 2 de 4 para maestría de Primer Ataque Débil. Elemento: Manipulación de la mente
Cerré los ojos y traté de concentrarme. Aquella imagen se dibujó en mi mente, parada en un borde del barco frente a Edward. Aquella tormenta que se acercaba. Los truenos y rayos acechando en el firmamento. Mientras que el agua se balanceaba con gran fuerza y lograba salpicar grandes olas empapando la madera. Mi cosmos rodeándome. Cada sonido lograba sentir, la concentración era inmensa, nada más interrumpía mis pensamientos. Permanecía en una especie de trance recordando esa escena de mi vida.
Luego de un momento de recuerdos y concentración mi cuerpo comenzó a cubrirse por una energía dorada que de a poco se desprendía y se elevaba en los aires en forma de llamas del mismo color que esa aura. El agua del riachuelo que se encontraba detrás de mí salpicaba en grandes olas igual que aquella vez que logré despertar mi cosmos. Humedecía mi vestido blanco que con la tierra del suelo se ensuciaba un poco. Eso no me interesaba, tal vez luego me cambiaría de vestimenta. Mientras tanto un viento bastante fuerte comenzaba a recorrer el lugar, eso mismo hacía que los pocos árboles que allí se encontraban comenzaran a balancearse de a poco.
-"Vamos, Jezzara... tú puedes. Ya lo has hecho una vez... ¿Qué puede dificultarte el hacerlo una vez más?"- Me decía a mí misma al mismo tiempo que apretaba mis parpados con más fuerza tratando de elevar más esa energía que estaba fluyendo y quería salir de mi interior de una vez por todas. -"No... tranquilízate. Ten paciencia, fe. No desesperes, idiota..."- seguía diciéndome a mí misma en mis pensamientos. Era verdad, me sentía presionada, nerviosa, no podía trabajar de esa manera. Necesitaba relajarme y olvidarme de todo, como lo había hecho hacía a penas un momento. Era la mejor forma de concentrarme en lo que estaba haciendo y no sólo yo lo sabía; eso le servía a muchos guerreros.
Suspiré una vez más y tomé todo el aire que pude para proceder. Abrí mis ojos por un momento y levanté mi rostro para ver al cielo azul. La noche no estaba lejos, pero aún así faltaban algunas horas para que esta llegue. A pesar de eso logré notar que la constelación de Virgo comenzaba a brillar sobre mi cabeza, en medio del cielo azul. -Como aquella vez...- dije en un murmullo mientras apreciaba las doradas estrellas recordando ese mismo día que desperté la energía cósmica en mí, había brillado esa constelación de la misma manera.
Cerré los ojos y traté de concentrarme. Aquella imagen se dibujó en mi mente, parada en un borde del barco frente a Edward. Aquella tormenta que se acercaba. Los truenos y rayos acechando en el firmamento. Mientras que el agua se balanceaba con gran fuerza y lograba salpicar grandes olas empapando la madera. Mi cosmos rodeándome. Cada sonido lograba sentir, la concentración era inmensa, nada más interrumpía mis pensamientos. Permanecía en una especie de trance recordando esa escena de mi vida.
Luego de un momento de recuerdos y concentración mi cuerpo comenzó a cubrirse por una energía dorada que de a poco se desprendía y se elevaba en los aires en forma de llamas del mismo color que esa aura. El agua del riachuelo que se encontraba detrás de mí salpicaba en grandes olas igual que aquella vez que logré despertar mi cosmos. Humedecía mi vestido blanco que con la tierra del suelo se ensuciaba un poco. Eso no me interesaba, tal vez luego me cambiaría de vestimenta. Mientras tanto un viento bastante fuerte comenzaba a recorrer el lugar, eso mismo hacía que los pocos árboles que allí se encontraban comenzaran a balancearse de a poco.
-"Vamos, Jezzara... tú puedes. Ya lo has hecho una vez... ¿Qué puede dificultarte el hacerlo una vez más?"- Me decía a mí misma al mismo tiempo que apretaba mis parpados con más fuerza tratando de elevar más esa energía que estaba fluyendo y quería salir de mi interior de una vez por todas. -"No... tranquilízate. Ten paciencia, fe. No desesperes, idiota..."- seguía diciéndome a mí misma en mis pensamientos. Era verdad, me sentía presionada, nerviosa, no podía trabajar de esa manera. Necesitaba relajarme y olvidarme de todo, como lo había hecho hacía a penas un momento. Era la mejor forma de concentrarme en lo que estaba haciendo y no sólo yo lo sabía; eso le servía a muchos guerreros.
Suspiré una vez más y tomé todo el aire que pude para proceder. Abrí mis ojos por un momento y levanté mi rostro para ver al cielo azul. La noche no estaba lejos, pero aún así faltaban algunas horas para que esta llegue. A pesar de eso logré notar que la constelación de Virgo comenzaba a brillar sobre mi cabeza, en medio del cielo azul. -Como aquella vez...- dije en un murmullo mientras apreciaba las doradas estrellas recordando ese mismo día que desperté la energía cósmica en mí, había brillado esa constelación de la misma manera.
Jezzara- Reino : Santuario de Athena
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Post 3 de 4 para maestría de Primer Ataque Débil. Elemento: Manipulación de la mente
En ese momento justamente fue que empezó a rodearme un aura dorada más intensa que la primera vez. Desde ese instante tomé más seguridad y comencé a creer que realmente tenía la habilidad necesaria para poder lograrlo, aunque estaba totalmente consciente que aquello era solamente el comienzo del trabajo que me esperaba pronto. Tenía que esforzarme, eso era esencial para aumentar mis habilidades y sobre todo para enfrentarme al enemigo en la inminente guerra entre los dioses; en la cual tan sólo sería una guerrera más entre miles, aunque sí era posible esforzarme para al menos intentar ser útil, al menos una poderosa amazona.
Estaba ya casi lista, por lo que cerré mis ojos enseguida mientras bajaba un poco la cabeza. Tenía que concentrarme lo mejor posible para lograr que aquella energía que quedaba encerrada en mí, se libere lo antes posible para empezar a crear al fin la próxima técnica de ataque, la que me ayudaría a mejorar mucho más. Era la clave para conseguir al fin ese espíritu y habilidad de guerrera que me faltaba. Al generarse una leve brisa en el aire, con rastros dorados de mi cosmoenergía, mis cabellos comenzaron a flotar como si una energía fantasma los sostenía en el aire. Estaba más relajada que nunca, en ese momento tenía la oportunidad y lo estaba logrando.
-"Sí... eso era lo que necesitabas. Vas bien, eso es."- me decía en mi mente entre mis pensamientos. De pronto comenzaron a materializarse esas llamas doradas casi transparentes que me caracterizaban a la hora de elevar mi cosmos. Comenzaron a danzar en los aires de una forma espectacular, como si se tratase de un juego de luces de colores brillantes que incluso se veían durante el día, cuando el sol se encontraba justamente en el centro del firmamento. Empezaba a verse también, que ese mismo sol se intensificaba, exponiendo su resplandeciente luz de una forma exagerada, que incluso lastimaría la vista de cualquiera que se encuentre en ese sitio, cualquiera que no tenga ese enorme poder psíquico que yo poseía. El calor emanado por los rayos del sol hacían que el ambiente comience a arder, de cierta forma.
Estaba funcionando, con mi cosmos estaba logrando algo que nunca había hecho, incluso algo más que aquel encuentro con Edward. Era como si esa energía que habitaba en mi interior se despertaba por completo, esta vez no era solo una parte. Me estaba preparando ara lo que se venía... y ciertamente no estaba muy lejos de lograr mi primer objetivo. Eso me aliviaba y me hacía estar contenta. Mi vida había cambiado, ahora tenía nuevos propósitos que cumplir. Uno de ellos, estaba en proceso.
En ese momento justamente fue que empezó a rodearme un aura dorada más intensa que la primera vez. Desde ese instante tomé más seguridad y comencé a creer que realmente tenía la habilidad necesaria para poder lograrlo, aunque estaba totalmente consciente que aquello era solamente el comienzo del trabajo que me esperaba pronto. Tenía que esforzarme, eso era esencial para aumentar mis habilidades y sobre todo para enfrentarme al enemigo en la inminente guerra entre los dioses; en la cual tan sólo sería una guerrera más entre miles, aunque sí era posible esforzarme para al menos intentar ser útil, al menos una poderosa amazona.
Estaba ya casi lista, por lo que cerré mis ojos enseguida mientras bajaba un poco la cabeza. Tenía que concentrarme lo mejor posible para lograr que aquella energía que quedaba encerrada en mí, se libere lo antes posible para empezar a crear al fin la próxima técnica de ataque, la que me ayudaría a mejorar mucho más. Era la clave para conseguir al fin ese espíritu y habilidad de guerrera que me faltaba. Al generarse una leve brisa en el aire, con rastros dorados de mi cosmoenergía, mis cabellos comenzaron a flotar como si una energía fantasma los sostenía en el aire. Estaba más relajada que nunca, en ese momento tenía la oportunidad y lo estaba logrando.
-"Sí... eso era lo que necesitabas. Vas bien, eso es."- me decía en mi mente entre mis pensamientos. De pronto comenzaron a materializarse esas llamas doradas casi transparentes que me caracterizaban a la hora de elevar mi cosmos. Comenzaron a danzar en los aires de una forma espectacular, como si se tratase de un juego de luces de colores brillantes que incluso se veían durante el día, cuando el sol se encontraba justamente en el centro del firmamento. Empezaba a verse también, que ese mismo sol se intensificaba, exponiendo su resplandeciente luz de una forma exagerada, que incluso lastimaría la vista de cualquiera que se encuentre en ese sitio, cualquiera que no tenga ese enorme poder psíquico que yo poseía. El calor emanado por los rayos del sol hacían que el ambiente comience a arder, de cierta forma.
Estaba funcionando, con mi cosmos estaba logrando algo que nunca había hecho, incluso algo más que aquel encuentro con Edward. Era como si esa energía que habitaba en mi interior se despertaba por completo, esta vez no era solo una parte. Me estaba preparando ara lo que se venía... y ciertamente no estaba muy lejos de lograr mi primer objetivo. Eso me aliviaba y me hacía estar contenta. Mi vida había cambiado, ahora tenía nuevos propósitos que cumplir. Uno de ellos, estaba en proceso.
Jezzara- Reino : Santuario de Athena
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Post 4 y último para maestría de Primer Ataque Débil. Elemento: Manipulación de la mente
Manteniendo mis ojos cerrados y mi mente en blanco, concentrándome nada más en mi cosmos interior, en lo que yo era capaz de hacer, logré que el ambiente cambiara en su totalidad, al menos en gran perímetro del territorio en donde me encontraba en ese momento. Todo se volvió más brillante y esplendoroso, hasta el mismo sol había tomado un brillo especial y se volvió de un color más intenso mientras que sus rayos chocaban en la tierra elevando exageradamente la temperatura del ambiente y el poco viento fresco que hacía momentos corría.
Sabía que pronto lo lograría, no hacía falta ser tan inteligentes para darse cuenta que ya lograba controlar mi cosmos casi a la perfección ya habiéndolo hecho una vez antes, aunque sin mucho conocimiento del tema. Ahora si lo sabía, estaba muy consciente de lo que se trataba y estaba tan segura que podía lograrlo que incluso comenzaba a confiarme un poco. No era lo correcto, sino intentarlo hasta lograr lo que deseaba. Igualmente no estaría mal un poco de confianza extra en sí mismo, nunca hacía daño. Es más, aquellas cosas lograban fortalecerme más de lo que era para cumplir mis deseos.
Entonces suspiré y abrí los ojos. En realidad no estaba mirando nada en particular, mi vista estaba como muerta, no tenía color, se veía opaca. Estaba en una especie de trance o algo así, ya iba a lograr mi objetivo y en ese momento sin ayuda de nadie, estaba sola en eso. Pronto la tierra comenzó como a tambalear, se movía tal cual si fuera un terremoto y todo el cielo se oscurecía, incluso el sol parecía apagarse. De pronto un flash de energía se vio, en ese momento todo se volvió invisible, aquello era capaz de cegar a cualquiera mientras sucedía. Pocos segundos más tarde todo dejó de moverse y las cosas se veían más claras que antes, pero algo en el ambiente había cambiado.
A mi alrededor se veía un sitio completamente distinto a aquel bello riachuelo y sus alrededores. Parecía un salón cerrado y oscuro. Cada rincón se veía tenebroso y fantasmal. Una alfombra bastante extensa en el centro de la habitación. Las escaleras en el fondo algo rotas, era imposible subir al piso de arriba de esa manera. Pero no tenía ninguna puerta, estaba completamente cerrado y sin escapatoria alguna. Era como el salón principal de alguna mansión , castillo o algo de eso, pero sin cuidados, completamente en mal estado. Se escuchaban gritos y llantos aunque nadie se encontrar allí dentro, tan solo yo. Estaba levitando en medio de la sala, con mis ojos cerrados y manos juntas frente a mi cuerpo.
Pronto comenzó a correr una energía dorada a mi alrededor y una explosión de cosmos se generó desde mi cuerpo pareciendo así destruir por completo esa especie de salón antiguo y descuidado. Generando así nuevamente ese flash de energía brillante y al desaparecer... aquella ilusión lo hizo con él. Porque eso había sido, una ilusión creada por mi mente y mi cosmos liberándose en aquel lugar. Fue algo que teniendo mis ojos cerrados no podía contemplar, pero sí lo hice... lo logré con mi alto poder psíquico y mi cosmos resplandeciente. Apareciendo entonces sentada en el mismo lugar donde estaba antes.
Abrí los ojos y volví a apoyar mis manos en el suelo. Miré en todas direcciones confundida pero a la vez alegre de haber logrado liberar mi cosmos una vez más y esta vez sin ayuda alguna. Me encontraba cansada luego de lo sucedido, por lo que sin más que hacer, me dejé caer de espaldas en la tierra seca a pocos metros del riachuelo. Deseaba descansar unos minutos antes de marchar hacia mi próximo destino. -Eso fue bueno... cuando descanse unos minutos estaré más que lista ara seguir.- me dije a mí misma en un tono de voz muy baja para así permaneces mirando al cielo, que ya se veía nuevamente normal.
Manteniendo mis ojos cerrados y mi mente en blanco, concentrándome nada más en mi cosmos interior, en lo que yo era capaz de hacer, logré que el ambiente cambiara en su totalidad, al menos en gran perímetro del territorio en donde me encontraba en ese momento. Todo se volvió más brillante y esplendoroso, hasta el mismo sol había tomado un brillo especial y se volvió de un color más intenso mientras que sus rayos chocaban en la tierra elevando exageradamente la temperatura del ambiente y el poco viento fresco que hacía momentos corría.
Sabía que pronto lo lograría, no hacía falta ser tan inteligentes para darse cuenta que ya lograba controlar mi cosmos casi a la perfección ya habiéndolo hecho una vez antes, aunque sin mucho conocimiento del tema. Ahora si lo sabía, estaba muy consciente de lo que se trataba y estaba tan segura que podía lograrlo que incluso comenzaba a confiarme un poco. No era lo correcto, sino intentarlo hasta lograr lo que deseaba. Igualmente no estaría mal un poco de confianza extra en sí mismo, nunca hacía daño. Es más, aquellas cosas lograban fortalecerme más de lo que era para cumplir mis deseos.
Entonces suspiré y abrí los ojos. En realidad no estaba mirando nada en particular, mi vista estaba como muerta, no tenía color, se veía opaca. Estaba en una especie de trance o algo así, ya iba a lograr mi objetivo y en ese momento sin ayuda de nadie, estaba sola en eso. Pronto la tierra comenzó como a tambalear, se movía tal cual si fuera un terremoto y todo el cielo se oscurecía, incluso el sol parecía apagarse. De pronto un flash de energía se vio, en ese momento todo se volvió invisible, aquello era capaz de cegar a cualquiera mientras sucedía. Pocos segundos más tarde todo dejó de moverse y las cosas se veían más claras que antes, pero algo en el ambiente había cambiado.
A mi alrededor se veía un sitio completamente distinto a aquel bello riachuelo y sus alrededores. Parecía un salón cerrado y oscuro. Cada rincón se veía tenebroso y fantasmal. Una alfombra bastante extensa en el centro de la habitación. Las escaleras en el fondo algo rotas, era imposible subir al piso de arriba de esa manera. Pero no tenía ninguna puerta, estaba completamente cerrado y sin escapatoria alguna. Era como el salón principal de alguna mansión , castillo o algo de eso, pero sin cuidados, completamente en mal estado. Se escuchaban gritos y llantos aunque nadie se encontrar allí dentro, tan solo yo. Estaba levitando en medio de la sala, con mis ojos cerrados y manos juntas frente a mi cuerpo.
Pronto comenzó a correr una energía dorada a mi alrededor y una explosión de cosmos se generó desde mi cuerpo pareciendo así destruir por completo esa especie de salón antiguo y descuidado. Generando así nuevamente ese flash de energía brillante y al desaparecer... aquella ilusión lo hizo con él. Porque eso había sido, una ilusión creada por mi mente y mi cosmos liberándose en aquel lugar. Fue algo que teniendo mis ojos cerrados no podía contemplar, pero sí lo hice... lo logré con mi alto poder psíquico y mi cosmos resplandeciente. Apareciendo entonces sentada en el mismo lugar donde estaba antes.
Abrí los ojos y volví a apoyar mis manos en el suelo. Miré en todas direcciones confundida pero a la vez alegre de haber logrado liberar mi cosmos una vez más y esta vez sin ayuda alguna. Me encontraba cansada luego de lo sucedido, por lo que sin más que hacer, me dejé caer de espaldas en la tierra seca a pocos metros del riachuelo. Deseaba descansar unos minutos antes de marchar hacia mi próximo destino. -Eso fue bueno... cuando descanse unos minutos estaré más que lista ara seguir.- me dije a mí misma en un tono de voz muy baja para así permaneces mirando al cielo, que ya se veía nuevamente normal.
Jezzara- Reino : Santuario de Athena
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Habiendo seguido el consejo de Night y finalmente terminando de usar la Otra Dimensión como medio de transporte el gemelo de Cambre había entrado de nuevo en los territorios adyacentes al Santuario, ahorrándose una buena parte del camino que en realidad no le molestaba seguir a pie; la verdad era que se había decidido cuando ya él y Capricornio no tenían nada más que hacer juntos más que perder el tiempo…mientras más rápido reunieran a los demás aspirantes a Santos con mayor prontitud habrían de prepararse para lo que prometía ser una inminente guerra en contra del dios Ares.
Dando unos pasos adelante y llegando a una zona por la corría un fino arroyo después de seguir una energía que crecía más y más, Aspros se encontraba frente a frente con una muchacha rubia que parecía enfrascada en algún tipo de tarea personal.
Mmm... sabiendo que interrumpirla sería por demás maleducado y un tanto problemático el gemelo de Cambre decidió ver que era lo que se encontraba haciendo semejante persona en un lugar tan apartado como aquel, aparte de claro, despedir semejante energía. Con los ojos entornados y sus sentidos agudizados para no perder ni un solo detalle de las acciones de la muchacha, el peliazul se vio cegado por un destello momentáneo que lo hizo enjugarse los ojos rápidamente para así observar como esta posaba sus manos en la tierra, acostándose de espaldas sobre esta segundos después y murmurar para sí misma. Sonriendo y sabiendo que era lo que había pasado con un poco de deducción y lógica interna, el Santo de Géminis se acercó. Discúlpeme señorita, pero podría decirme que se encuentra haciendo en este lugar? preguntó el geminiano con calma y ambas manos a los lados, mirando con fijeza a la rubia. Si preguntaban, incluso se podía confundir al romano con algún tipo de guardia o algo por el estilo…y en cierta forma, se le podía considerar uno en toda regla. No todos los días entran nuevos reclutas al Santuario…acaso es una candidata a Amazona?
Dando unos pasos adelante y llegando a una zona por la corría un fino arroyo después de seguir una energía que crecía más y más, Aspros se encontraba frente a frente con una muchacha rubia que parecía enfrascada en algún tipo de tarea personal.
Mmm... sabiendo que interrumpirla sería por demás maleducado y un tanto problemático el gemelo de Cambre decidió ver que era lo que se encontraba haciendo semejante persona en un lugar tan apartado como aquel, aparte de claro, despedir semejante energía. Con los ojos entornados y sus sentidos agudizados para no perder ni un solo detalle de las acciones de la muchacha, el peliazul se vio cegado por un destello momentáneo que lo hizo enjugarse los ojos rápidamente para así observar como esta posaba sus manos en la tierra, acostándose de espaldas sobre esta segundos después y murmurar para sí misma. Sonriendo y sabiendo que era lo que había pasado con un poco de deducción y lógica interna, el Santo de Géminis se acercó. Discúlpeme señorita, pero podría decirme que se encuentra haciendo en este lugar? preguntó el geminiano con calma y ambas manos a los lados, mirando con fijeza a la rubia. Si preguntaban, incluso se podía confundir al romano con algún tipo de guardia o algo por el estilo…y en cierta forma, se le podía considerar uno en toda regla. No todos los días entran nuevos reclutas al Santuario…acaso es una candidata a Amazona?
Aspros- Caballeros Dorados
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AD - Disrupción (4300)*
AM - Golpe Centrado (4500)*
AM - Sentencia (4600)*
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AF - Canción de la Muerte (4850)*
AF -Explosión de Galaxias (4900)*
AFa -Megiddo (5100)*
TS -Destrucción Dual
TE -Apoteosis
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Me encontraba distraída mientras miraba el cielo, sin pensar en nada en lo absoluto. De pronto algo logró llamar mi atención. Sentí la voz de un hombre desde cerca, entonces decidí ver hacia el frente. Se trataba de un sujeto bastante alto y con el cabello largo y de color azul. Me llamó bastante la atención, sentía algo extraño en él. Como cuando me había topado con los otros dos sujetos en los cuales sentía una presencia fuerte que lograba causarme lo mismo. Entonces me senté nuevamente en el suelo mientras lo miraba extrañaba a la cara. Escuchaba atentamente cada una de sus palabras, fue una pregunta a la que podría responder con mucha facilidad, aunque sabía que había muchos que no creían en el cosmos y los dioses y todo ese tipo de cosas que a penas hacía algunos días me había dispuesto a seguir.
Al parecer aquel hombre sabía de lo que hablaba, al igual que aquella vez del encuentro con Edward, cuando logré liberar por primera vez mi cosmoenergía. Y es que no todos tienen la necesidad o deseo de dirigirse al Santuario en vano. Sabía que ese sitio era especial y no era la única que había encontrado la respuesta. Entonces me dispuse a contestar con toda seguridad.
-Bueno... puede sonar algo extraño pero me encontraba aquí... entrenando sola, es una larga historia el como descubrí este sitio. Es que de alguna manera extraña y larga de contar, descubrí que mi destino estaba aquí. Un viejo compañero me ayudó y me enseñó el poder del cosmos... entonces me intrigó, de alguna manera me llamó y hoy estoy aquí para fortalecer aún más ese poder.- dije en un tono de voz seguro y firme mientras tanto me levantaba del suelo, parándome firme y sacudiendo un poco el polvillo de mi ropa. -Pero luego de eso no he logrado encontrar a nadie más que sea consciente de la existencia e importancia del cosmos. Entonces debo decir que está en lo correcto, señor, soy una candidata a amazona y estoy dispuesta a convertirme en una más que nada en el mundo.- pronuncié por último en el mismo tono que antes, igual de respetuoso y sereno, mientras observaba fijamente al muchacho a los ojos. Como estaba consciente que aquel hombre sabía de lo que hablaba no temí en ningún momento en hablarle del cosmos. En ese momento sólo esperaba su respuesta.
Al parecer aquel hombre sabía de lo que hablaba, al igual que aquella vez del encuentro con Edward, cuando logré liberar por primera vez mi cosmoenergía. Y es que no todos tienen la necesidad o deseo de dirigirse al Santuario en vano. Sabía que ese sitio era especial y no era la única que había encontrado la respuesta. Entonces me dispuse a contestar con toda seguridad.
-Bueno... puede sonar algo extraño pero me encontraba aquí... entrenando sola, es una larga historia el como descubrí este sitio. Es que de alguna manera extraña y larga de contar, descubrí que mi destino estaba aquí. Un viejo compañero me ayudó y me enseñó el poder del cosmos... entonces me intrigó, de alguna manera me llamó y hoy estoy aquí para fortalecer aún más ese poder.- dije en un tono de voz seguro y firme mientras tanto me levantaba del suelo, parándome firme y sacudiendo un poco el polvillo de mi ropa. -Pero luego de eso no he logrado encontrar a nadie más que sea consciente de la existencia e importancia del cosmos. Entonces debo decir que está en lo correcto, señor, soy una candidata a amazona y estoy dispuesta a convertirme en una más que nada en el mundo.- pronuncié por último en el mismo tono que antes, igual de respetuoso y sereno, mientras observaba fijamente al muchacho a los ojos. Como estaba consciente que aquel hombre sabía de lo que hablaba no temí en ningún momento en hablarle del cosmos. En ese momento sólo esperaba su respuesta.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Así que entonces no me equivoqué. Perfecto, entonces no tengo razones para no dar a conocer mi identidad… dijo Aspros con ambas manos posadas sobre la cintura para luego apartar varios mechones rebeldes que le tapaban la vista con un solo movimiento fluido de su diestra. Exhalando por lo bajo el gemelo de Cambre finalmente dio unos pasos hacia delante mientras que extendía la derecha con todos los dedos desplegados en una seña de cortesía que le habían enseñado a mostrar desde pequeño, durante toda su formación como un caballero de la aristocracia romana. Yo soy Aspros, Santo Dorado Guardián de la Tercera Casa del Zodiaco, Géminis y uno de los tres guerreros que actualmente se encuentran activos en el Santuario. Espero perdone mi intromisión, espero no ser muy inoportuno pero tampoco podía dejar pasar la oportunidad de encontrarme con una aspirante a Amazona dado que mi misión actual es encontrar candidatos que puedan cumplir con la función de guardianes. Como verá…no hay muchos presentes…y de los pocos que pueden hacer algo, suelen abandonar o desaparecer sin dejar rastro alguno. informó Aspros con tono noble entremezclado con algo de decepción, refiriéndose por supuesto al par de Dorados que le habían dejado tan mala impresión en el Coliseo al actuar como un par de niños estúpidos. Como fuera, eso no venía al caso en su encuentro con la rubia así que ni siquiera iba a ahondar en el tema. Más bien, ahora debía darle las indicaciones finales a la muchacha para que así pudiera avanzar más en la búsqueda que parecía la había llevado hasta aquel lugar en específico. Ahora...si me lo permite, la guiaré al lugar en donde podrá encontrar las respuestas finales antes de poder ser una guardiana de Athena. indicó el peliazul, ladeándose para dejar que la chica decidiera si seguirlo o no…después de todo, quedaba a su discreción.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Aquel muchacho saludaba de una forma cortés a la cual correspondí con mucho respeto. Entonces me dispuse sin problemas a oír sus palabras. Se presentaba como uno de los Santos Dorados,el guardián de la casa de Géminis, de esos que desde hacía mucho tiempo oía y últimamente confiaba mucho en ello. Para mí su presencia era verdaderamente valiosa; sabía que los santos dorados era muy poderosos y tenían mucha sabiduría por lo que estaba muy contenta con aquel hecho y dije entonces.
-Es un verdadero placer conocerlo, señor Aspros.- con un tono respetuoso y sereno para luego mostrar una agradable sonrisa y continuar con mis palabras hacia aquel hombre. -Y no es así, señor, no ha sido inoportuno. Ha llegado en el momento justo y agradezco su presencia. Si es así, pretendo ayudar en todo lo que sea posible. No soy de los que abandonan un objetivo si se lo proponen y yo estoy muy segura de lo que quiero.- pronuncié luego en el mismo tono. Estaba dispuesta a cumplir mis ideales, y más aquello por lo que había luchado tanto tiempo y había sufrido tanto por conseguirlo. Sería una verdadera estupidez abandonarlo cuando me encontraba tan cerca.
Entonces, escuchando las últimas palabras de Aspros me dispuse más que nunca a seguir adelante. Pude saber que aún no había muchos Santos dispuestos para la pelea, parecía sólo algunos se lo tomaban muy en serio. yo creía estar entre ellos por lo que no dude ni un instante en aceptar aquella propuesta tan valiosa. -Claro que sí, estoy dispuesta a seguirlo. Quiero encontrar esas respuestas y convertirme en una verdadera amazona. Creo estar ya lista para eso.- dije emocionada y en un tono muy firme y decidido, siguiendo el camino hasta donde estaba el dorado, dispuesta a seguirlo en aquella trayectoria que me llevaría hasta aquel lugar prometido que me conduciría sin dudar, a mi verdadero destino como guerrera. -... ah y disculpe mis malos modales, casi lo olvidaba. Mi nombre es Jezzara.- dije luego deteniéndome a un lado, esperando a que Aspros me indicara el camino.
-Es un verdadero placer conocerlo, señor Aspros.- con un tono respetuoso y sereno para luego mostrar una agradable sonrisa y continuar con mis palabras hacia aquel hombre. -Y no es así, señor, no ha sido inoportuno. Ha llegado en el momento justo y agradezco su presencia. Si es así, pretendo ayudar en todo lo que sea posible. No soy de los que abandonan un objetivo si se lo proponen y yo estoy muy segura de lo que quiero.- pronuncié luego en el mismo tono. Estaba dispuesta a cumplir mis ideales, y más aquello por lo que había luchado tanto tiempo y había sufrido tanto por conseguirlo. Sería una verdadera estupidez abandonarlo cuando me encontraba tan cerca.
Entonces, escuchando las últimas palabras de Aspros me dispuse más que nunca a seguir adelante. Pude saber que aún no había muchos Santos dispuestos para la pelea, parecía sólo algunos se lo tomaban muy en serio. yo creía estar entre ellos por lo que no dude ni un instante en aceptar aquella propuesta tan valiosa. -Claro que sí, estoy dispuesta a seguirlo. Quiero encontrar esas respuestas y convertirme en una verdadera amazona. Creo estar ya lista para eso.- dije emocionada y en un tono muy firme y decidido, siguiendo el camino hasta donde estaba el dorado, dispuesta a seguirlo en aquella trayectoria que me llevaría hasta aquel lugar prometido que me conduciría sin dudar, a mi verdadero destino como guerrera. -... ah y disculpe mis malos modales, casi lo olvidaba. Mi nombre es Jezzara.- dije luego deteniéndome a un lado, esperando a que Aspros me indicara el camino.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Escuchando las palabras de su interlocutora, Aspros terminaba por asentir al comprobar que de verdad la voluntad de la chica era fuerte y además parecía comprometida con el propósito de convertirse en una Amazona. Sí, estaba preparada.
Bienvenida al Santuario, Jezzara. dijo el gemelo de Cambre con calma para así tomar la delantera y empezar a caminar en dirección al lugar que le había prometido a la rubia. No es que él tuviera mucha noción de cómo haría la muchacha para encontrar la armadura a la cual estaba destinada ya que en su caso había sido al contrario, el ropaje parecía haberlo encontrado a él. Fuera como fuera el punto de partida inicial sería el Coliseo de entrenamiento, desde donde se podía acceder a las Doce Casas del Zodiaco y en el que seguramente ambos hallarían más de una respuesta…más Jezzara que él mismo claro estaba.
Mientras continuamos nuestro camino, creo que me toca informarle de las reglas primordiales de las Amazonas y los Santos: primero que nada y al ser una guerrera de Athena, las reglas dictan que lleve una máscara desde el momento en que obtenga su Armadura…implicando que ha renunciado a su feminidad y que es una guerrera. Segundo, las Armaduras no deben ser usadas por motivos personales o banales. Tercero…cumplir las órdenes de los superiores en todo momento o lugar, pudiendo ser revocadas tan solo en caso de romper con las reglas anteriores o poder comprobar que se sigue un camino injusto. informó el Santo de Géminis, mientras ambos se perdían en un camino que llevaba entre los árboles y que invariablemente terminaría por dar con una de las zonas principales del Santuario de Athena.
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Bienvenida al Santuario, Jezzara. dijo el gemelo de Cambre con calma para así tomar la delantera y empezar a caminar en dirección al lugar que le había prometido a la rubia. No es que él tuviera mucha noción de cómo haría la muchacha para encontrar la armadura a la cual estaba destinada ya que en su caso había sido al contrario, el ropaje parecía haberlo encontrado a él. Fuera como fuera el punto de partida inicial sería el Coliseo de entrenamiento, desde donde se podía acceder a las Doce Casas del Zodiaco y en el que seguramente ambos hallarían más de una respuesta…más Jezzara que él mismo claro estaba.
Mientras continuamos nuestro camino, creo que me toca informarle de las reglas primordiales de las Amazonas y los Santos: primero que nada y al ser una guerrera de Athena, las reglas dictan que lleve una máscara desde el momento en que obtenga su Armadura…implicando que ha renunciado a su feminidad y que es una guerrera. Segundo, las Armaduras no deben ser usadas por motivos personales o banales. Tercero…cumplir las órdenes de los superiores en todo momento o lugar, pudiendo ser revocadas tan solo en caso de romper con las reglas anteriores o poder comprobar que se sigue un camino injusto. informó el Santo de Géminis, mientras ambos se perdían en un camino que llevaba entre los árboles y que invariablemente terminaría por dar con una de las zonas principales del Santuario de Athena.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Había caminado durante bastante tiempo, buscando aquello a lo que me había enviado el joven llamado Aspros. Pero sin éxito aún no encontraba a otro guerrero para guiar en ese camino al santuario. Me alejé nuevamente de éste, caminando y atravesando los bosques para finalmente sólo terminar a donde había iniciado, a los pies de aquel arroyo rodeado por árboles. No había nadie. Nuevamente me encontraba sola en aquel sitio, donde tan sólo podía oírse el sonido del agua fluyendo y la suave ventisca en los aires.
Suspiré deteniéndome por un instante a unos pocos metros de la orilla. Tan sólo me dedicaba a mirar a los alrededores. Mi vista se paseaba por cada esquina, pero mi mente no atendía a todo aquel sitio. Me encontraba totalmente concentrada en otra cosa. Tratava de canalizar mi energía para ver si lograba encontrar la presencia de algún cosmos cercano. Sólo así podría saber si por ese sitio se encontraba otro candidato a guerrero de Athena, sólo de esa manera iba a encontrarlos. Debía aprovechar aquello al máximo si deseaba cumplir la misión, sería estúpido que fallara en aquello, que era mi primera tarea como amazona dorada.
-Que extraño...- me dije a mí misma recordando aquellos momentos en los que me encontraba con aquel sujeto llamado Manigoldo. Extrañamente estando a su lado lograba sentir una energía similar a la que mi cosmos emanaba. Era algo raro pero en parte tenía su sentido, como era aquello que sentía en Edward también. No sería ridículo pensar que el destino de ellos dos también perteneciera al Samntuario. Ni ridículo ni apresurado. Cada cosa que me había ocurrido en la vida tenía su sentido. Como lo que ocurría en Egipto aquella vez que vi a mi hermana por última vez.
Mi cosmoenergía comenzó a fluir lentamente por mi cuerpo, liberando de a poco una pequeña cantidad de esa energía dorada que se mostraba como destellos en el exterior de aquel lugar. Mi armadura también brillaba en aquel momento, no podía evitar mostrar a kilómetros que mi energía se encontraba brillante allí. Buscaba ese cálido cosmos, que suponía que debían tener los guerreros de Athena.
Suspiré deteniéndome por un instante a unos pocos metros de la orilla. Tan sólo me dedicaba a mirar a los alrededores. Mi vista se paseaba por cada esquina, pero mi mente no atendía a todo aquel sitio. Me encontraba totalmente concentrada en otra cosa. Tratava de canalizar mi energía para ver si lograba encontrar la presencia de algún cosmos cercano. Sólo así podría saber si por ese sitio se encontraba otro candidato a guerrero de Athena, sólo de esa manera iba a encontrarlos. Debía aprovechar aquello al máximo si deseaba cumplir la misión, sería estúpido que fallara en aquello, que era mi primera tarea como amazona dorada.
-Que extraño...- me dije a mí misma recordando aquellos momentos en los que me encontraba con aquel sujeto llamado Manigoldo. Extrañamente estando a su lado lograba sentir una energía similar a la que mi cosmos emanaba. Era algo raro pero en parte tenía su sentido, como era aquello que sentía en Edward también. No sería ridículo pensar que el destino de ellos dos también perteneciera al Samntuario. Ni ridículo ni apresurado. Cada cosa que me había ocurrido en la vida tenía su sentido. Como lo que ocurría en Egipto aquella vez que vi a mi hermana por última vez.
Mi cosmoenergía comenzó a fluir lentamente por mi cuerpo, liberando de a poco una pequeña cantidad de esa energía dorada que se mostraba como destellos en el exterior de aquel lugar. Mi armadura también brillaba en aquel momento, no podía evitar mostrar a kilómetros que mi energía se encontraba brillante allí. Buscaba ese cálido cosmos, que suponía que debían tener los guerreros de Athena.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Habia terminado de subir los peldaños que estaban frente a mi viendo el lugar un poco mejor y fijandome que aun quedaba mucho para llegar al santuario. Por lo demas una insasiable sed habia empezado a invadir mi garganta por lo cual busque algun rio o laguna en la cual avastecerme de agua fresca caminando sin rumbo alguno por el lugar hasta que pude visualizar a lo lejos un riachuelo de aguas claras al cual fui corriendo rapidamente puesto que la sed me hacia daño y no queria tener ningun desmayo debido a eso. Al llegar me arrodille cerca del riachuelo para poder tomar un poco de aquella agua con mis manos y beberla sintiendome un poco mejor apenas esta paso por mi garganta, vi a mi alrededor con curiosidad puesto que por extraño que pareciera podia sentir una presencia algo fuerte que sacaba una buena cantidad de energia pero no era agresiva sino pasiva por lo cual di un suspiro comenzando a concentrarme tambien para liberar aquella misma energia que liberaba aquella presencia sin fijarme que esa misma se encontraba muy cerca de donde estaba en ese instante.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Estaba muy concentrada tratando de liberar aquella energía que fluía en mi interior y se liberaba al exterior, recorriendo los alrededores del santuario, incluso llegando a sentirse en el mismo bosque del santuario. Trataba de identificar cada una de esas energías que podía presenciar a mi alrededor. Pronto algo me llamó la atención: se trataba de aquella energía que se mostraba bastante elevada, era similar a la mía, no parecía amenazante. Eso en verdad me sorprendió, quizás era uno de esos aprendices que trataban de buscar su destino en el santuario. De aquellos que Aspros me había hablado.
Aquello que sentí en ese momento me obligó a detenerme por un instante. Tenía que encontrar a la persona que estaba liberando tal energía se su ser. Comencé a mirar en todas direcciones, no debía estar muy lejos de allí, de hecho se sentía bastante cerca. Tenía que encontrar a aquella persona. Mi vista recorría cada rincón de aquel lugar al menos hasta donde llegaba la visibilidad. Hasta que de pronto logré visualizar la silueta de una mujer a unos cuantos metros de distancia. Desde allí podía notar un aura brillante e imponente.
-Debe ser ella...- comenté en voz baja, casi no podía oirse. No lo pensé más de dos veces y decidí acercarme a ella. Cuando estuve a unos pocos metros me detuve, mirándola fijamente a atrvés de aquella máscara dorada que poseía cubriendo mi rostro.
-Hola, chica. Disculpa mi intromisión, pero sentí una especie de energía llamativa desde aquí. Si no me equivoco debe de provenir de ti.- Decía en un tono que sonaba algo alegre y a la vez amable, como estaba acostumbrada a dirigirme a los extraños. Estaba segura que era ella quien liberaba ese cosmos, pero deseaba escucharlo de su boca. -Si es así supongo que estás aquí por algo. Puedo ayudarte si lo deseas, pero quisiera saber si en verdad estoy en lo correcto.- añadí si dejar de mirarla, era sorprendente el poder que liberaba desde su ser.
Aquello que sentí en ese momento me obligó a detenerme por un instante. Tenía que encontrar a la persona que estaba liberando tal energía se su ser. Comencé a mirar en todas direcciones, no debía estar muy lejos de allí, de hecho se sentía bastante cerca. Tenía que encontrar a aquella persona. Mi vista recorría cada rincón de aquel lugar al menos hasta donde llegaba la visibilidad. Hasta que de pronto logré visualizar la silueta de una mujer a unos cuantos metros de distancia. Desde allí podía notar un aura brillante e imponente.
-Debe ser ella...- comenté en voz baja, casi no podía oirse. No lo pensé más de dos veces y decidí acercarme a ella. Cuando estuve a unos pocos metros me detuve, mirándola fijamente a atrvés de aquella máscara dorada que poseía cubriendo mi rostro.
-Hola, chica. Disculpa mi intromisión, pero sentí una especie de energía llamativa desde aquí. Si no me equivoco debe de provenir de ti.- Decía en un tono que sonaba algo alegre y a la vez amable, como estaba acostumbrada a dirigirme a los extraños. Estaba segura que era ella quien liberaba ese cosmos, pero deseaba escucharlo de su boca. -Si es así supongo que estás aquí por algo. Puedo ayudarte si lo deseas, pero quisiera saber si en verdad estoy en lo correcto.- añadí si dejar de mirarla, era sorprendente el poder que liberaba desde su ser.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Segui liberando energia por un buen rato de manera pacifica puesto que no deseaba atraer gente que quisiera hacerme daño o causar problemas, por lo cual toque el agua con cuidado con una de mis manos expandiendo aquella energia en ella para calentarla un poco puesto que estaba muy fria y asi poder meter cuidadosamente mis pies ya descalzos en el agua haciendo que se refrescaran un poco debido a todo el tiempo que habia estado caminando. Mientras hacia aquello escuche pasos y senti una presencia acercarse hacia donde me encontraba en aquel instante por lo cual deje de irradiar aquella energia para no llamar la atencion, pero fue algo inutil puesto que aquella presencia ya se encontraba cerca de mi por lo cual levante la mirada y vi a una mujer con una armadura dorada bastante llamativa la cual no mostraba su rostro debido a la mascara que llevaba por lo cual alce una de mis delgadas cejas para verla mejor y darme cuenta de que ella tambien emitia ese tipo de energia por lo cual escuche todo lo que me decia con atencion decidiendo el responderle a sus preguntas.
- Si era yo quien emitia esa energia, estoy aqui porque algo me atrajo a este sitio como si lo conociera de algo pero aun estoy buscando el porque me siento atraida hacia aqui -viendo seriamente a la mujer frente a ella-
- Si era yo quien emitia esa energia, estoy aqui porque algo me atrajo a este sitio como si lo conociera de algo pero aun estoy buscando el porque me siento atraida hacia aqui -viendo seriamente a la mujer frente a ella-
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Las palabras emitidas por aquella muchacha revelaban lo que estaba sospechando desde que sentí esa energía. Evidentemente era emitida por ella misma. Pero al parecer no sabía lo que verdaderamente la había llevado hasta los alrededores del santuario. Por el cosmos que emanaba de su cuerpo, que era similar al mío, y al de cada uno de los aspirantes y los guerreros de Athena que había encontrado, podía darme cuenta que ella tenía suficiente fuerza para tratarse de una aspirante también, como yo lo era hacía a penas unas horas hasta mi encuentro con Aspros. Entonces debía hacer la tarea que el dorado me había encomendado. Tenía que guiar a la chica hasta que se diera cuenta de lo que significaba aquella energía que podía liberar.
-Ya veo, estaba en lo cierto entonces.- mencioné con un tono más suave. -Estamos en los alrededores del Santuario de Athena. Y por lo que logro sentir en esa energía que liberas, estas en el lugar correcto y debes ser una aspirante a amazona de Athena, pues no cualquiera llega hasta aquí y muestra esa energía.- dije un poco más seria mientra miraba hacia los ojos de la muchacha.
-¿Has escuchado acerca del ejército de Athena?- pregunté intrigada, pues por lo que oía la chica no sabía el qué la había atraído hacia el santuario, y según su respuesta iba a saber como contestar y qué cosa hacer a continuación, aunque sabía que la muchacha me había visto con esa armadura dorada y mi cara cubierta por la máscara, sospechaba que algo de eso también le iba a intigar, pero aún así esperaba la respuesta.
________
Off: Lo siento mucho, de verdad. Disculpa la demora, no volveré a tardar tanto la próxima vez. u.u
-Ya veo, estaba en lo cierto entonces.- mencioné con un tono más suave. -Estamos en los alrededores del Santuario de Athena. Y por lo que logro sentir en esa energía que liberas, estas en el lugar correcto y debes ser una aspirante a amazona de Athena, pues no cualquiera llega hasta aquí y muestra esa energía.- dije un poco más seria mientra miraba hacia los ojos de la muchacha.
-¿Has escuchado acerca del ejército de Athena?- pregunté intrigada, pues por lo que oía la chica no sabía el qué la había atraído hacia el santuario, y según su respuesta iba a saber como contestar y qué cosa hacer a continuación, aunque sabía que la muchacha me había visto con esa armadura dorada y mi cara cubierta por la máscara, sospechaba que algo de eso también le iba a intigar, pero aún así esperaba la respuesta.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Despues de haber emitido una respuesta positiva a la pregunta que me hacia aquella muchacha segui mirandola seriamente mientras hacia desaparecer la energia que habia estado emitiendo anteriormente dando un ligero suspiro. Vi que la muchacha se me quedaba mirando fijamente por unos instantes antes de empezar a habar presentandose y diciendome el lugar en el que me encontraba actualmente mas no me sorprendi de oirla decir aquello los aldeanos de Rodorio me habian hablado sobre el santuario y sus alrededores asi que no habia ningun problema de ubicacion, mas lo siguiente me dejo algo intrigada puesto que no sabia nada sobre lo de ser aspirante a amazona ateniense ni que era el ejercito de Athena, aun cuando los aldeanos me habian hablado un poco sobre lo que eran los alrededores del santuario no me habian comentado que existiera un ejercito asi por lo cual la mire intrigada y pensativa puesto que no tenia ni la menor idea y mis ansias por obtener conocimiento eran bastante grandes asi que debia intentar obtener un poco de informacion.
- No se lo que es ese ejercito del que me hablas...solo vine hacia aqui porque me sentia atraida por una extraña energia y aun la siento... -dice seriamente viendo a la muchacha-
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Escuchaba atentamente a la joven, que al parecer no tenía idea de lo que era el ejército de Athena. Iba a tener que enseñarle acerca de eso, pues esa energía que sentía proveniente de ella, no se trataba de cualquier poder. Ella debía ser una auténtica aspirante a amazona de Athena. No podía saber cual era exactamente el verdadero límite al cual podía llegar su energía, pero estaba dispuesta a averiguarlo, y ayudar a esa joven, enseñándole el camino que le pertenecía. Entonces sonreí, pero detrás de la mascara no pudo notarse.
-Ya veo. Bueno, debo decirte que el ejército de Athena se encarga de defender a la diosa, luchando por la paz y la justicia. Es algo que yo he estado dispuesta a defender desde hace mucho tiempo, por eso quizás, ha despertado esta energía en mi interior, que quizás tu puedas sentir también.- Hice una pequeña pausa mientras miraba a la muchacha. De verdad me intrigaba hasta donde ella podía llegar con eso que podía percibir en su ser.
-Esa energía se llama cosmos. Es la fuerza del universo que corre en nuestro interior. Sólo algunas personas son capaces de controlarlo y usarlo a su antojo. Unos para hacer el bien… pero hay muchos que lo desean para acabar con la paz.- decía un tanto segura. Tratando de explicarle más o menos lo que me habían enseñado, y lo que pude comprender con el paso del tiempo.
-Puedo explicarte con todo gusto de qué se trata para no confundirte. Porque siento que estoy siendo algo confusa con mis palabras. Pero necesito saber si te interesa. Pues si te has sentido atraída hacia aquí, debe ser porque es aquí a donde perteneces y a eso te lo explicaré si me lo permites.- continuaba segura y en un tono suave.
Deseaba enseñarle a la joven, más o menos en donde se encontraba y lo que ocurría con los caballeros y amazonas protectores del santuario. Pero necesitaba saber si ella quería aceptar mi ayuda. Podía mostrarle el camino hacia el santuario y así enseñarle lo que significaba ser un guerrero de aquel ejército. Si ella aceptaba, no tendría problemas en revelar mi identidad. Sería más fácil ganarme la confianza de esa joven, para explicarle sin problemas lo que presentía que ella podía llegar a lograr.
-¿Estás dispuesta a acompañarme? Puedo enseñarte el por qué de la sensación que pudo atraerte a estos lugares, pero es tu decisión.- concluí con mayor seriedad. No tenía idea de si la muchacha deseaba tener conocimiento acerca de todo esto, pero no perdía nada con intentarlo.
-Ya veo. Bueno, debo decirte que el ejército de Athena se encarga de defender a la diosa, luchando por la paz y la justicia. Es algo que yo he estado dispuesta a defender desde hace mucho tiempo, por eso quizás, ha despertado esta energía en mi interior, que quizás tu puedas sentir también.- Hice una pequeña pausa mientras miraba a la muchacha. De verdad me intrigaba hasta donde ella podía llegar con eso que podía percibir en su ser.
-Esa energía se llama cosmos. Es la fuerza del universo que corre en nuestro interior. Sólo algunas personas son capaces de controlarlo y usarlo a su antojo. Unos para hacer el bien… pero hay muchos que lo desean para acabar con la paz.- decía un tanto segura. Tratando de explicarle más o menos lo que me habían enseñado, y lo que pude comprender con el paso del tiempo.
-Puedo explicarte con todo gusto de qué se trata para no confundirte. Porque siento que estoy siendo algo confusa con mis palabras. Pero necesito saber si te interesa. Pues si te has sentido atraída hacia aquí, debe ser porque es aquí a donde perteneces y a eso te lo explicaré si me lo permites.- continuaba segura y en un tono suave.
Deseaba enseñarle a la joven, más o menos en donde se encontraba y lo que ocurría con los caballeros y amazonas protectores del santuario. Pero necesitaba saber si ella quería aceptar mi ayuda. Podía mostrarle el camino hacia el santuario y así enseñarle lo que significaba ser un guerrero de aquel ejército. Si ella aceptaba, no tendría problemas en revelar mi identidad. Sería más fácil ganarme la confianza de esa joven, para explicarle sin problemas lo que presentía que ella podía llegar a lograr.
-¿Estás dispuesta a acompañarme? Puedo enseñarte el por qué de la sensación que pudo atraerte a estos lugares, pero es tu decisión.- concluí con mayor seriedad. No tenía idea de si la muchacha deseaba tener conocimiento acerca de todo esto, pero no perdía nada con intentarlo.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
La muchacha en si solo escuchaba lo que decia sin interrumpirme lo cual agradecia puesto que nunca me gusto que se me interrumpiera cuando tenia que decir algo al respecto, vi que se quedaba callada un momento antes de comenzar a explicarme mas o menos lo que era ese ejercito de Athena alzando una de mis cejas al oirle decir que eran protectores de la paz y la justicia algo que normalmente no creeria puesto que existian muchas personas que decian hacer lo mismo pero enrealidad era solo en beneficio propio por lo cual me quede mirandola sin decir nada. Me dijo como se llamaba esa energia que emanaba de ella y de mi, ¿cosmos? porque esa palabra se me hacia tan familiar en aquellos instantes o al menos eso sentia,esa muchacha decia cosas que sentia me eran muy familiares en ese instante y cuando me ofrecio el decirme todo lo que ella sabia continue con mi mirada seria antes de contestarle.
- Supongo que no perdere nada al acompañarte...pero advierto que si se trata de una trampa deberas prepararte para las consecuencias muchacha... -viendola aun de manera seria-
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Veía que al parecer, la chica aún desconfiaba de mi palabra. Era de esperarse, por eso me mantenía tranquila y sin cambio en mi semblante. Ella no me conocía, ni yo a ella, por eso no me sorprendía de su respuesta. Iba a llevarla al camino que estaba próximo al santuario y quizás más cerca. Sospechaba que ella debía ser una candidata a amazona de Athena. No sabía el poder de su espíritu, de su cosmos. Por eso deseaba averiguar a cual de los ejércitos pertenecía. Podía ser un valioso aporte al aún escaso, ejercito de Athena.
-Esta bien que desconfíes de mí, aún no nos conocemos, pero te aseguro que puedo ayudarte. No sería capaz de tender una trampa a alguien de quien siento un gran poder bondadoso y un potente cosmos, como tú. Tranquila, voy a ayudarte y te enseñaré de qué se trata esto.- decía con confianza, pero en un tono de voz serio.
Entonces me di media vuelta hacia el lado de donde había venido, la entrada en aquel bosque en los alrededores del Santiario, en dirección al mismo.
-Bueno, si lo deseas, acompáñame. Vas darte cuenta del por qué estás aquí.- Dije por último mirándola de reojo. No deseaba que desconfíe de mi palabra, pero para eso debía demostrarle mi sinceridad y confianza. Aún no sabía como reaccionaría la chica, no la conocía, por eso mismo debía actuar con cautela.
-Por cierto. Puedes llamarme Jezzara. Ese es mi nombre.- dije antes de comenzar a caminar. Entonces me encaminé en esa dirección, esperando que la muchacha vaya conmigo.
-Esta bien que desconfíes de mí, aún no nos conocemos, pero te aseguro que puedo ayudarte. No sería capaz de tender una trampa a alguien de quien siento un gran poder bondadoso y un potente cosmos, como tú. Tranquila, voy a ayudarte y te enseñaré de qué se trata esto.- decía con confianza, pero en un tono de voz serio.
Entonces me di media vuelta hacia el lado de donde había venido, la entrada en aquel bosque en los alrededores del Santiario, en dirección al mismo.
-Bueno, si lo deseas, acompáñame. Vas darte cuenta del por qué estás aquí.- Dije por último mirándola de reojo. No deseaba que desconfíe de mi palabra, pero para eso debía demostrarle mi sinceridad y confianza. Aún no sabía como reaccionaría la chica, no la conocía, por eso mismo debía actuar con cautela.
-Por cierto. Puedes llamarme Jezzara. Ese es mi nombre.- dije antes de comenzar a caminar. Entonces me encaminé en esa dirección, esperando que la muchacha vaya conmigo.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Apenas termine de decir todo lo que tenia que decir senti la mirada de esa muchacha nuevamene sobre mi persona mas no podia estar segura debido a que ella usaba una mascara por lo cual podia estar dirigiendo su mirada hacia cualquier parte. Me dedico algunas palabras mientras mi mirada siempre fria y seria se mantenia sobre ella mas sentia que ella no era de desconfianza es mas hasta sentia que la conocia de algun lado mas no sabia identificar de donde exactamente pero aun asi sentia que la conocia. Apenas ella se dio la media vuelta y comenzo a caminar yo hice exactamente lo mismo siguiendola a paso lento pero seguro viendo su espalda y fijandome en su largo pero hermoso cabello dorado, solo vi una vez un cabello tan hermoso y solia pertenercer a una de las hermanas de mi señora Selene claro que yo no conocia el nombre ni nada pero sabia que era tan solo una niña cuando ella murio pero siempre decian que tenia un hermoso cabello dorado semejante al oro y que el año en que nacio fue muy beneficioso para Egipto. Apenas me dijo su nombre decidi el contestar diciendole el mio.
- Tu puedes llamarme Rain. Ese es mi nombre -dice mientras la seguia con cuidado por si intentaba el hacerle alguna cosa-
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Me había detenido un momento para esperar que la muchacha aceptara ir conmigo y contestara al respecto. Pero no la miraba, me mantenía de espaldas a ella, mirando el camino por el cual la guiaría hacia el santuario. Pensaba que sería un trabajo un tanto difícil porque había notado en aquella chica, cierta desconfianza hacia mí. Pensaba la manera en cómo explicarle las cosas con respecto a su cosmos y la energía de los santos de Athena, sin que pareciera una ridiculez. Por eso mismo trataba de darle confianza para que al menos entendiera que trataba de decirle una verdad importante.
Pronto me dijo su nombre. Eso me alivió un poco. Al menos sabía como se llamaba y cómo debía dirigirme a ella. Estaba segura que esa energía que había liberado esa mujer cuando la encontré, era tan potente como la de cualquier amazona dorada, pero era claro que no se notaba mucho aún. Necesitaba llevarla por el camino hacia el santuario, tenía que hacer lo que Aspros me había dicho anteriormente.
-Bien… vamos- comenté por último y seguí caminando, sabiendo que ella iba detrás de mí.
Off-Rol: Hice este post para estar al día con Jezzara lol. Ya haré el post en el otro tema para que podamos seguir. Cuando lo acabe, editaré y pondré el link aquí.
Pronto me dijo su nombre. Eso me alivió un poco. Al menos sabía como se llamaba y cómo debía dirigirme a ella. Estaba segura que esa energía que había liberado esa mujer cuando la encontré, era tan potente como la de cualquier amazona dorada, pero era claro que no se notaba mucho aún. Necesitaba llevarla por el camino hacia el santuario, tenía que hacer lo que Aspros me había dicho anteriormente.
-Bien… vamos- comenté por último y seguí caminando, sabiendo que ella iba detrás de mí.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Sin darme cuenta comencé a caminar con lentitud hasta dejar atrás el pueblo junto a su camino de piedra y el pequeño tumulto de gente que vivía feliz sin preocupaciones, donde el tiempo parecía no alterar su tranquila vida. Había decidido caminar nuevamente, sin rumbo alguno como hacía habitualmente cuando no tenía demasiado que hacer durante el día, no rondoaban demasiadas ideas en mi mente, parecía vacía en aquel instante, no sabía si ir directamente al Santuario o quedarme en sus cercanías, no tenía la certeza de nada.
- Solamente quiero... - dije en voz alta sin terminar mis palabras, lo que realmente quería era ver a la reencarnación de la diosa Athena, que se encontrase bien, ver su sonrisa cálida y llena de vida, pero de momento aún sentía que faltaba demasiado par verla. El sonido del agua llamó mi atención me dirigí de donde provenía, allí pude ver el riachuelo el cual me era conocido, quede allí quieta mirando para todas partes, quizá esperando a que algo ocurriese.
- Solamente quiero... - dije en voz alta sin terminar mis palabras, lo que realmente quería era ver a la reencarnación de la diosa Athena, que se encontrase bien, ver su sonrisa cálida y llena de vida, pero de momento aún sentía que faltaba demasiado par verla. El sonido del agua llamó mi atención me dirigí de donde provenía, allí pude ver el riachuelo el cual me era conocido, quede allí quieta mirando para todas partes, quizá esperando a que algo ocurriese.
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
Una vez hubo salido del claro en donde se acumulaban los arbustos y aquella espesa capa de árboles que apenas si dejaba a los transeúntes andar con total calma, el Santo de Géminis continuó por un camino siguiendo el sonido del agua correr. Eventualmente la fuente del murmullo se presentaba en la del arroyo que según recordaba también había visitado hacía un largo tiempo atrás.
Y vaya que no había cambiado ni solo un poco. La fuente de agua seguía acumulándose en cierta parte del claro, rodeado por un pequeño círculo de piedras planas semejantes a las mismas que había al fondo con la clara diferencia del tamaño entre unas y otras así como el tono de color, contextura y peso.
Obviamente, la mente del geminiano no hacía sino divagar de forma ridícula. Realmente tenía que ponerse a andar y dejar de lado todo aquello si al menos quería poder terminar de implantarse la orden y el Satán Imperial ese mismo día…pero no podía evitar el estar haciendo tantas paradas innecesarias dado que el tiempo parecía dilatarse con cada paso que daba, incitándole a retrasarse cada vez más y más. No era precisamente lo que más quería en su situación actual pero tampoco podía hacer nada por remediarlo.
Siento que estoy en una mala obra griega. Terminó comentando el peliazul sin dejar de caminar, chapoteándose ligeramente la capa de viaje al pasar por encima del agua. Todavía le quedaba bastante por caminar aquel día.
Y vaya que no había cambiado ni solo un poco. La fuente de agua seguía acumulándose en cierta parte del claro, rodeado por un pequeño círculo de piedras planas semejantes a las mismas que había al fondo con la clara diferencia del tamaño entre unas y otras así como el tono de color, contextura y peso.
Obviamente, la mente del geminiano no hacía sino divagar de forma ridícula. Realmente tenía que ponerse a andar y dejar de lado todo aquello si al menos quería poder terminar de implantarse la orden y el Satán Imperial ese mismo día…pero no podía evitar el estar haciendo tantas paradas innecesarias dado que el tiempo parecía dilatarse con cada paso que daba, incitándole a retrasarse cada vez más y más. No era precisamente lo que más quería en su situación actual pero tampoco podía hacer nada por remediarlo.
Siento que estoy en una mala obra griega. Terminó comentando el peliazul sin dejar de caminar, chapoteándose ligeramente la capa de viaje al pasar por encima del agua. Todavía le quedaba bastante por caminar aquel día.
Última edición por Aspros el Dom Nov 27, 2011 12:36 pm, editado 1 vez
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
El miembro 'Aspros' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados
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#3 'Defensa Especial' : 114
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Re: Riachuelo cerca del Santuario
El sonido del agua moviéndose era hipnotizante y hasta relajante, hacía poco había obtenido la armadura aunque la verdad esta me había elegido como su portadora, quizá algo de mí fuese de su interés, se podía sentir la caricia de Eolo dios de los vientos por mi rostro, el cambio estaba sucediendo, si bien la batalla era próxima, algunas almas habían cambiado su destino por otros distintos, dando a entender que el futuro no lo eligen los dioses, sino nosotros mismos, aunque claro hay excepciones claras, ya que estos siempre querrán manejarnos cual marionetas en sus juegos.
- Si las cosas fueran fáciles, no existiesen guerras y gobernará la paz eterna... - estás fueron mis palabras dichas al viento, no esperaba que nadie las escuchase, ya que son solo eso palabras que emiten un pensamiento que quizá es compartido por muchos o pocos, no lo sabía, aún no tenía la certeza de nada, solamente de que una cruenta batalla ocurriría y que yo, era una simple pieza de ajedrez reemplazable, sacrificable, pero todo por un bien común la paz y protección de la humanidad.
- Si las cosas fueran fáciles, no existiesen guerras y gobernará la paz eterna... - estás fueron mis palabras dichas al viento, no esperaba que nadie las escuchase, ya que son solo eso palabras que emiten un pensamiento que quizá es compartido por muchos o pocos, no lo sabía, aún no tenía la certeza de nada, solamente de que una cruenta batalla ocurriría y que yo, era una simple pieza de ajedrez reemplazable, sacrificable, pero todo por un bien común la paz y protección de la humanidad.
Enya- Amazona Dorada
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